Chile: "La situación es compleja pero no es una etapa crítica" (audio)
Contacto con Rodrigo Álvarez, editor general de Radio Duna, de Chile
(emitido a las 7.23 hs.)
EMILIANO COTELO:
Hay clima de temor en Chile en estas horas. Cuatro nuevas réplicas del terremoto del sábado se produjeron ayer en las zonas de Valparaíso y Concepción, despertando nuevamente la alarma entre los pobladores.
El primero en Concepción, poco después de las 14.00 horas, con una magnitud de 6,1 grados, y minutos más tarde otra réplica de 6 grados cerca de Talca, en este caso acompañada de una falsa alarma de tsunami que provocó pánico entre la población local. Por la noche, a las 23.00 horas, un sismo de 6,1 grados tuvo epicentro a 39 kilómetros de Valparaíso y a unos 130 kilómetros de Santiago. Finalmente, cerca de la medianoche, se registró otra réplica, no tan intensa de 4,9 grados también cercana a Valparaíso.
Estamos en diálogo con Rodrigo Álvarez, editor general de Radio Duna.
RODRIGO ÁLVAREZ:
Literalmente las últimas horas han sido muy movidas acá en Chile, a propósito de las réplicas que se han ido sintiendo de este terremoto de la madrugada del sábado pasado de magnitud 8,8 grados en la escala de Richter.
EC ¿Qué ha pasado en los hechos, qué gravedad han implicado, qué consecuencias han tenido?
RA Vamos por partes. Este terremoto afectó más de 1.000 kilómetros de territorio de nuestro país, un posterior tsunami afectó un poco más de 500 kilómetros y esas consecuencias han sido devastadoras. Al punto que estas últimas réplicas han generado más incertidumbre, más pánico, más temor y obviamente más destrucción, porque hay muchos daños estructurales en varias regiones del país con edificios que han quedado prácticamente deshabitados porque corren riesgo de derrumbe.
Eso es lo que ocurrió particularmente en la parte estructural, no solamente en las regiones más afectadas, la del Biobío y la del Maule, que vivieron momentos de pánico.
La primera réplica de la tarde, a eso de las 15.00 horas de ayer, en la región del Biobío en Concepción, vino acompañada de una falsa alerta de tsunami, que 43 minutos después fue desmentida por la Oficina Nacional de Emergencia chilena con sede acá en Santiago pero que generó pánico en la población. La alarma surgió de funcionarios de Bomberos que están trabajando en el rescate de algunas personas que todavía están desaparecidas bajo los escombros de un edificio en la ciudad de Concepción. Eso generó que la gente tratara de huir a los cerros, a zonas de altura, porque se estaba hablando de esta serie de olas que venían.
Por otra parte, para el gobierno de la presidenta Michelle Bachelet ha sido bien complejo tratar de llegar con ayuda de todo tipo, desde frazadas hasta alimentación y agua, a esas zonas más complejas. Por el momento no hay agua potable en 450 kilómetros del territorio de las zonas más afectadas, no hay electricidad en ese mismo territorio, y obviamente la ayuda está llegando por goteo. Se le ha hecho muy difícil al gobierno llegar a esas zonas por un problema de conectividad, por tierra, mar y aire.
EC - Justamente hay versiones que señalan que el gobierno demoró la declaración de zonas de emergencia y de desastre porque eso implicaba asignarles a las Fuerzas Armadas un protagonismo y una presencia que no se entendía conveniente, y que allí habría estado una de las causas de estos inconvenientes con la asistencia y con el control del orden y de la seguridad pública. ¿Qué hay de eso?
RA Hay varias aristas respecto a lo que ha pasado con este terremoto y las consecuencias que ha generado en nuestro país. Una de esas tiene que ver con las aristas políticas, decisiones, que ha tomado el gobierno de la presidenta Michelle Bachelet. Ayer el ministro del Interior tuvo que comparecer ante una comisión del Senado para explicar cuáles fueron las políticas de emergencia que se aplicaron en primer momento. Es cierto que se ha criticado al gobierno de Bachelet respecto a una demora para decretar aquellas zonas más complejas zonas de catástrofe, zonas de excepción constitucional, lo que implicaba que fuerzas militares fueran a esos lugares a controlar el orden y la seguridad, porque luego del terremoto esa gente quedó sin luz, sin agua, y comenzaron una serie de saqueos y pillajes.
Lo concreto es que ayer la presidenta Michelle Bachelet habló, como lo ha hecho todos estos últimos días, y en particular extendió la conferencia de prensa a nivel de radios del país. Ella dijo que "no es el momento de empezar a apuntar con el dedo a culpables respecto si se demoró o no", pero efectivamente hay una crítica respecto a la tardanza que habría tenido el gobierno y las determinaciones de ella particularmente sobre decretar esas zonas como zona de catástrofe.
Lo que sí está claro es que efectivamente hubo un error en la Armada, la tardanza que hubo por la alerta de tsunami que se envió a la Oficina Nacional de Emergencia con sede en la capital y que nunca llegó a las zonas más afectadas por el maremoto que vino después del terremoto que ocurrió en la madrugada del sábado.
EC Ahora sí las políticas que se están siguiendo, en especial en cuanto a la presencia militar, son muy drásticas. Las advertencias sobre cómo se van a comportar los soldados apuntan a disuadir de la manera más terminante estos intentos de saqueos, de pillaje. ¿Se ha logrado calmar la inseguridad y los temores?
RA De todas maneras no sé si se aplaude pero sí se agradece la determinación que adoptó el gobierno de enviar a funcionarios militares a las zonas más desvastadas.
Por momentos la situación fue muy compleja, particularmente el día domingo y lunes, con muchos saqueos de gente que no tenía qué comer y otros que se aprovecharon de esta situación y comenzaron a robar casas, a incendiar supermercados y a incendiar aquellos locales comerciales que tenían enseres necesarios como para la alimentación y otras cosas también.
Entonces se agradeció la denominación de esta zona de catástrofe que decretó que funcionarios militares fueran hacia allí. Hay toques de queda que abarcan hasta 18 horas en que la gente no puede salir de sus hogares, lo que ha facilitado dos cosas: que la seguridad se mantenga en un nivel óptimo y que, como la gente está en sus casas y no en la calle, puedan entrar los camiones con la ayuda a esas zonas más complicadas y se pueda comenzar ya la organización de la distribución de ayuda alimentaria para esa gente que está en una situación muy compleja.
Además no hay una estimación respecto a cuánta gente está desaparecida y cuánta gente efectivamente ha perdido la vida.
EC Por ahora la cifra que se maneja oficialmente es la de 802 muertos, pero está claro que ese es un número que va a cambiar con el correr de los días.
RA Absolutamente. El primer catastro que tuvo la Oficina Nacional de Emergencia hablaba de 150 personas muertas, no pasaron ni tres horas y ya había aumentado al 100%, se hablaba de 350 personas muertas. Lo que tú dices es cierto, el último catastro que se entregó ayer en la tarde fue de 802 personas muertas y 19 desaparecidos, pero la cantidad de desaparecidos, sobre todo en la costa luego del tsunami es bastante alta, no hay todavía una estimación respecto a cuánta gente está desaparecida en esa zona ni tampoco cuánta gente habría muerto. Al menos así lo manifestó ayer el propio ministro del Interior, quien dijo que no tenía una estimación de cuántas víctimas fatales hay a propósito de este terremoto.
EC Hay oyentes que nos consultan a propósito del impacto económico directo del terremoto, qué está pasando en estos días con la actividad en Chile. Por ejemplo, cuántas empresas no están pudiendo funcionar, si se ha cortado la cadena de pagos, ¿hay información sobre esto?
RA Tanto la presidenta Michelle Bachelet como los ministros del área económica se han preocupado mucho de llamar a la calma y a la tranquilidad. El país no está normalizado 100% pero al menos acá en la capital la situación está entrando a una fase de normalización entre el 90 y el 95%.
A nivel del país, el ministro de Hacienda, Andrés Velasco, ha dicho en forma reiterada que el país puede hacer frente económicamente a esta situación. Ayer hubo una importante reunión de los empresarios con la presidenta Bachelet, quienes de una y otra parte se comprometieron a que el país no iba a ser interrumpido. No hay desabastecimiento en cuanto a alimentos, no hay una situación compleja en cuanto a que el gobierno no pueda hacer frente económicamente respecto a la situación que significa enfrentar este terremoto.
Desde ese punto de vista ha sido la autoridad la que ha llamado a la calma y ha dicho en constantes situaciones que no es compleja la situación para el gobierno de ese punto de vista. Lo que se está tornando complejo, y es ahí el punto donde está el gobierno llevando la preocupación, es en tratar de ayudar a esa gente, tratar de llegar con la ayuda de alimentos, de agua potable y electricidad a esa gente que está con una situación bastante compleja, porque ya estamos entrando en el quinto día post terremoto y la situación sigue siendo de mucha incertidumbre para ese gente.
Pero quiero reiterarte: el gobierno de la presidenta Bachelet, sus ministros del área económica, han dicho que por el momento la situación si bien es difícil no entra en una etapa crítica o compleja para el país.
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Foto: (flickr.com)