(emitido a las 8.41 hs.)

JUAN ANDRÉS ELHORDOY:
Israel y Estados Unidos (EEUU) parecen sufrir una de las peores crisis diplomáticas de la historia.

La Administración de Barack Obama decidió suspender el viaje que el mediador para Oriente Próximo, George Mitchell, tenía previsto iniciar el lunes para intentar forzar la reanudación de las negociaciones entre israelíes y palestinos.

Conocida esta decisión, la secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton, aseguró que Israel "debe demostrar su compromiso" con el proceso de paz en Oriente Medio. Poco después, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, respondió, asegurando que su país ya ha demostrado "con palabras y hechos" su compromiso con la paz.

El tema de fondo tiene que ver con la demanda de la Casa Blanca para que Israel anule el plan urbanístico que implica, entre otras cosas, la edificación de 1.600 viviendas en un barrio ultraortodoxo de Jerusalén.

Washington calificó de "insultante" el proyecto israelí, que se anunció la semana pasada cuando el vicepresidente estadounidense visitaba la región y que ahora amenaza frustrar meses de esfuerzos de Mitchell para convencer a los palestinos de participar de las negociaciones, que están interrumpidas desde fines de 2008.

Para hablar de la realidad que vive Israel y su relación con EEUU, recibimos a Juan Rial, politólogo uruguayo residente en Nueva York.


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JAE – El embajador de Israel en EEUU, Michael Oren, afirmó que las relaciones entre los dos países afrontan la peor crisis bilateral en 35 años. ¿Estás de acuerdo con esto?

JUAN RIAL:
No, porque si tú ves lo que este martes declaró la señora Clinton, ya puso bastantes paños tibios a ese tipo de declaración fuerte. Simplemente hay que verlo esto como parte, por un lado, de la política interna de Israel y, por otro, de la política interna de EEUU. Fue mucho más dura la confrontación que hubo en el año 75 después de la guerra de Iom Kipur y cada tanto hay algún problema.

Pero la parte sustancial: si tú ves cuál va a ser la ayuda militar de EEUU a Israel para los años fiscales 2010 y 2011, va a andar cifrada en 2.200 billones en términos anglos, 2.200.000 millones de dólares, que prácticamente ha sido la misma durante toda la primera década del Siglo XXI. Lo que ha cambiado sí sustancialmente, y eso indica menos importancia, es la ayuda económica, que para el año fiscal en curso va a ser sólo de 120 millones cuando era también de 2.000 millones en el año 2000.

JAE – Tú subrayas que la cooperación a nivel militar sigue siendo firme y sostenida.

JR – Exactamente, sin ningún cambio. O sea, esto es más que nada un ruido fuerte de palabras y no mucho más que eso, no es una crisis realmente fuerte.

JAE – ¿Qué valor tiene para ti esto de la suspensión del viaje del enviado a Medio Oriente a causa de la decisión de Israel de construir las 1.600 casas en Jerusalén Este?

JR – El problema fundamental fue la forma en que se hizo el anuncio (en el momento que estaba el vicepresidente Baiden de visita allí). Si vives diciendo que se exhorta a Israel a que no haga un cambio del estatus en la situación en Jerusalén, esto sonaba provocativo y por eso se vio la necesidad de dar una respuesta. Ahora, es simplemente una suspensión.

Y es más, el lunes que viene el primer ministro Netanyahu estará de visita en Washington y hablará ante la Aipac (American Israel Public Affairs Committee), que es el principal lobby pro israelí. Al mismo tiempo es muy probable que tome una serie de entrevistas con responsables de la política exterior de EEUU. Luego seguirá para Bruselas.

Así que es más ruido que realmente algo de fondo.

JAE – El tema de fondo, la exigencia de EEUU de suspender esta construcción de 1.600 viviendas, la idea de EEUU de fortalecer la figura del presidente palestino, la idea de liberar prisioneros por parte de Israel, la respuesta del canciller Avigdor Lieberman de que estas exigencias de EEUU son irracionales, ¿cómo las valoras? ¿Cómo valoras esta negativa de Israel?

JR – Te decía que es parte de la política interna israelí, o sea, ten en cuenta que el canciller Lieberman es uno de los radicales, no pertenece al mismo partido que el primer ministro Netanyahu y cada cual hace su juego. También Simon Peres, tercer actor de distinto partido también, ha considerado que el anuncio no fue adecuado y criticó fuertemente al ministro del Interior de Israel.

La construcción de viviendas en ese barrio hace tiempo que se viene haciendo. Es un barrio que en la práctica está bajo control israelí desde 1967, o sea, eso no va a cambiar.

En cuanto al manejo de prisioneros, cada tanto hay liberaciones y se cierra más la situación; todo depende de un día a día que va variando de acuerdo a la política que tienen los israelíes internamente.

Y también hay que tener en cuenta el gran problema que tienen los palestinos; estás tratando exclusivamente con Abbas y la Autoridad Palestina, que sólo controla prácticamente una parte del territorio. Hamás controla Gaza y ahí la Autoridad Palestina no tiene nada para hacer.

JAE – ¿Cómo ves el escenario interno de Palestina con esta convocatoria de Hamás, las protestas, a este "día de la ira" como le llamó? ¿Estamos frente a un escenario de una nueva intifada?

JR – Es difícil por esa falta de unidad que hay en todos los palestinos. Hay que ver que los palestinos en este momento son ciudadanos de segunda clase en todos lados, hasta en los propios países árabes donde muchos de ellos están refugiados. Si tú vas a Irak, a Siria o a cualquiera de esos países, un palestino nunca se puede naturalizar, porque todos esos países utilizan a los palestinos para sus fines de reivindicación contra Israel.

En la práctica, además, la gran división que hay entre Hamás y la Autoridad Palestina hace que se puedan hacer protestas como la de ayer –martes-, que terminan con choques con la Policía, pero difícilmente hay capacidad para hacer una resistencia prolongada y larga como fueron oportunamente las intifadas.

JAE – Está el presidente de Brasil en Israel y en Palestina en estas horas... ¿qué comentarios te merece el rol del presidente brasileño en esto de mediar en el conflicto?

JR – Ninguna, no tiene ninguna posibilidad. Simplemente hago una comparación: si Brasil no pudo incidir en lo que ocurrió en Honduras, que es prácticamente nuestro hemisferio, la capacidad que tiene de incidir en Medio Oriente es totalmente nula. Es simplemente uno de los actos de propaganda que trata de realizar Brasil para ver si consigue su ansiado asiento en el Consejo de Seguridad, pero no mucho más. Si tú ves la propia prensa israelí, prácticamente la visita de Lula es totalmente ignorada.