La Pascua en Jerusalén: varias religiones y una "atmósfera especial"
Contacto con Ana Jerozolimski, corresponsal de En Perspectiva en Israel
(emitido a las 7.39 Hs.)
EMILIANO COTELO: El mundo cristiano celebra estos días la Semana Santa.
El mundo judío celebra su Pascua, Pesaj.
Y ambas conmemoraciones crean un ambiente de fiesta en Jerusalén.
¿Qué tienen que ver ambas cosas? ¿Y por qué Jerusalén es EL punto central estos días? Para hablar de ello y de algunos aspectos originales de estos días, estamos en contacto con nuestra corresponsal Ana Jerozolimski.
¿Dónde estás exactamente, Ana?
ANA JEROZOLIMSKI:
Estoy dentro del Santo Sepulcro, en el barrio cristiano de la Ciudad Vieja de Jerusalén, en medio de miles de personas junto a lo que, según la tradición cristiana, es la tumba de Jesús.
EC - Ubiquemos los antecedentes. ¿Por qué Jerusalén es nexo entre la Semana Santa y la Pascua Judía?
AJ - Ante todo Jerusalén es el punto central en Semana Santa, sagrada para los cristianos, porque comienza señalando la entrada de Jesús a Jerusalén. Jesús, como judío que era, llegaba a Jerusalén cuando era la Pascua judía, porque es una de las tres fiestas que en el calendario hebreo son fiestas de peregrinación. Llegaba en ese entonces al templo sagrado, que aún existía. Y se dice que lo que es la cena tradicional de Pesaj, que llamamos el seder, era de hecho la Última Cena por lo cual el cenáculo es uno de los puntos principales a los que llegan los cristianos en Semana Santa.
EC - ¿Qué has visto en las últimas horas? ¿Hay realmente una atmósfera especial en Jerusalén?
AJ - Sin duda, yo creo que no exagero en absoluto si digo que hay una atmósfera especial. Y me atrevería a decir que se emocionan no sólo los fieles cristianos sino todo aquel que ve que se puede convivir, que cada uno puede celebrar su culto, ven en eso algo singular. Antes hablaba de las miles de personas, ahora encontré un espacio de un metro cuadrado donde me puedo mover. La Policía está afuera cuidando, y cuando tuve que desviarme en el camino hasta el Santo Sepulcro discutía "¿Por qué no me dejan pasar? Tengo carné de prensa", y me decían "El problema no es el carné de prensa, si no querés morir aplastada buscá otro camino", porque hay -según me decía un policía- 25.000 personas. No sé si realmente ese es el número exacto, pero hay una gran cantidad de gente que llega especialmente a la Ciudad Vieja en estos días. Recordemos que para los cristianos el Santo Sepulcro es muy especial, es el lugar donde se cree que fue sepultado Jesús. Aquí adentro están las últimas estaciones de la vía dolorosa y por eso se conglomera tanta gente. En las callejuelas de la Ciudad Vieja se ve que hay turistas, judíos que están de vacaciones por esta semana de Pesaj, cristianos de diferentes denominaciones y por supuesto los peregrinos, que llegan más que nada en estas procesiones imponentes, llevando una enorme cruz de madera.
Acá veo gente con diferentes rasgos, religiosos que están en cargos oficiales dentro de la Iglesia, con diferentes vestimentas, de diferentes comunidades cristianas, de diferentes ritos, que aquí en el Santo Sepulcro andan con mucho cuidado de no pisarse los talones, incluso en el sentido de cómo se hace la liturgia, por dónde pasan las procesiones y en qué horarios puede ejercer su servicio cada uno.
EC - ¿Cuáles son los eventos principales de la Semana Santa en Jerusalén?
AJ - Yo diría que quizás uno de los eventos más coloridos -si cabe el término para algo religioso-, más singulares, fue el primer domingo, el Domingo de Ramos, que según la tradición cristiana señala la entrada de Jesús a Jerusalén. Eso se señala en una procesión muy singular que baja desde el Monte de los Olivos hacia Getsemaní, todos los años participan miles y miles de personas y como el camino es muy estrecho parecen mucho más todavía.
Es algo con muchos colores, la gente señalando la recepción a Jesús batiendo los ramos de olivo. Esa misma ceremonia se cumple en esa procesión dentro del Santo Sepulcro, yo no estuve este año pero el año pasado recuerdo que estuve en una de las ceremonias del Domingo de Ramos dentro del Santo Sepulcro y la gente rodea el sitio, que según la tradición cristiana es la tumba de Jesús, con oraciones y cantos oficiales, todos batiendo esas palmas de olivos, por eso el nombre de Domingo de Ramos. Yo diría que eso es uno de los temas más importantes.
Por supuesto hoy Viernes Santo, que es el día en que se conmemora el día de la crucifixión según la tradición cristiana, con las diferentes plegarias dentro del Santo Sepulcro. Y mañana hay una ceremonia muy especial de los ortodoxos dentro del Santo Sepulcro, que es la ceremonia del fuego, que requiere especiales medidas de seguridad. El domingo por supuesto ya las campanas repican de otra forma porque para los cristianos se pasa de la congoja a la alegría por ser considerado el Domingo de Resurrección.
EC - Estamos acostumbrados a hablar más a menudo de lo político, que ya sabemos es bien complejo, pero los temas religiosos, incluso los relacionados con la Semana Santa en el Santo Sepulcro, tampoco son muy sencillos, los propios cristianos están divididos, ¿cómo es esto?
AJ - Todos los años, cuando me encuentro con peregrinos a los que pregunto sobre sus impresiones hablan primero de las emociones y después me comentan que se sorprenden para mal cuando ven la división de jurisdicciones dentro del Santo Sepulcro. No es sólo aquí, también en la Basílica de la Natividad en Belén por ejemplo. El régimen del así llamado "status quo" que rige el funcionamiento de este santuario, determina que el Santo Sepulcro está "controlado" por tres comunidades diferentes: los católicos de rito latino, los ortodoxos griegos y los armenios. Bajo la jurisdicción de los armenios están también de hecho los coptos y los sirios. Justamente estuve hablando hace unos minutos con un joven copto que vestía una túnica muy especial de color violeta con bordados dorados, que recorría esta zona acompañando a los fieles y yo le pregunté sobre esa división interna. El me dijo "Cristo es uno, debería haber una sola Iglesia", pero el status quo que preserva el delicado equilibrio de esa división interna, es estable hace siglos. La división es muy grande, a mucha gente le preocupa, dicen que debería haber unidad pero parece algo irreversible, está muy clara la división de horarios, por dónde puede pasar cada procesión. Y ya ha pasado que ha habido peleas con los puños entre sacerdotes de diferentes comunidades porque una comunidad considera que otra "pisó" sus horarios. En el camino al Santo Sepulcro una colega española que me encontré me dijo "¿Oíste de la piñata que hubo en la octava estación de la vía dolorosa?". Yo no oí nada, le pregunté a un policía y no sabía, pero parece que ya hubo alguna pelea violenta entre católicos y ortodoxos.
EC - Que increíble que se llegue a ese extremo... Ahora, ¿judíos y musulmanes tienen algo que ver en toda esa división interna cristiana?
AJ - Los musulmanes tienen un rol muy original porque, en ese muy delicado equilibrio entre las comunidades cristianas en los lugares sagrados, las llaves del Santo Sepulcro están en manos de dos familias musulmanas. O sea, no son los propios cristianos de ninguna denominación los que abren todos los días el Santo Sepulcro, en general entre las 6 y 7 de la mañana, sino dos familias árabes -Yude y Nusseibe- que tienen los horarios muy claros, cómo tienen que cumplir, cómo se hace la ceremonia, quién le pasa la escarilla de adentro y la saca para afuera para abrir el primer cerrojo de abajo, luego el cerrojo de arriba. En fin, es algo increíble pero ahí está el rol justamente del lugar por el que tanto se ha peleado y que es para los cristianos el santuario más sagrado del mundo; las llaves la tienen dos familias musulmanas, precisamente por esa problemática de la división interna.
EC - Decíamos al comienzo que esta semana también es Pesaj, es la pascua judía, ¿siempre coinciden en el tiempo?
AJ - Como decía al principio, se estima que la cena tradicional de Pesaj -el Seder, como se llama cuando se celebra la Pascua judía- era precisamente esa cena que estaba celebrando Jesús en la Última Cena, en el cenáculo. O sea, siempre salen muy cerca la Semana Santa y la Pascua judía, pero no sale exacto todos los años, el tema es que los judíos lo celebran según el calendario hebreo, que es lunar a diferencia del gregoriano, y eso crea diferencias cada año.
EC - Ana, cada país tiene sus características, en Uruguay que como sabemos es más laico, aunque haya aquí muchos creyentes, se habla seguramente más de Semana de Turismo que de Semana Santa. ¿En Israel también se da la separación entre la parte religiosa por ejemplo de Pesaj y el hecho de que hay vacaciones? ¿Cómo transcurren esos dos niveles en el caso de Israel?
AJ - Sí, ante todo te diré que por supuesto está la parte religiosa. Esperá, sólo una mención, capaz que alcanzas a oír el sonido, llegan los qawas que son los guardias, legado de la época del Imperio Otomano, al frente de la procesión de los coptos que salen de la zona de la tumba de Jesús. Capaz que oyen el ruido de los palos sobre el piso...
Los qawas de sombrero rojo abren el paso a los sacerdotes coptos. Acá viene el patriarca copto camino a la tumba y están prácticamente echando a todos los fieles que estaban sentados, pero a los gritos, sin mucha delicadeza. Ahora le toca al patriarca copto, que pide que se muevan y la gente se levanta porque es bastante convincente el tono que utiliza.
Volviendo a lo que preguntabas recién. Por un lado está por supuesto la celebración de Pesaj, que tiene su dimensión religiosa, y yo diría que la enorme mayoría de la población de Israel la celebra, incluso si no todos cumplen estrictamente los preceptos religiosos, porque no toda la población es religiosa observante en forma absoluta. Pero eso se combina sí con el aspecto de las vacaciones. Es una de las semanas en las que realmente la mayor parte de la población tiene vacaciones, los niños tienen para su satisfacción no sólo la Semana de Pesaj libre sino casi tres semanas de vacaciones en la escuela, en los liceos, por eso muchos padres en sus trabajos también se toman libre. Cada día en esta semana suele pasar que el noticiero de la radio se abre con la información de cuántos cientos de miles están llenando los parques y los lugares de entretenimiento aprovechando la semana. Además recordemos que también es la fiesta de la primavera, porque en esta época aquí en el hemisferio norte empieza el buen tiempo, así que es un buen momento para que salga el sol.
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EC - ¿Tú estuviste allí en Jerusalén, Juan Andrés?
JUAN ANDRÉS ELHORDOY:
Sí estuve. La verdad estaba escuchando atentamente lo que decía Ana y como cristiano debo decir que a mí el hecho de estar allí me pareció imponente, mágico. Hice el Vía Crucis, la recorrida, porque está claramente delimitado cuáles son las estaciones, cada una de ellas con representaciones. Pero además el Santo Sepulcro tiene, más allá de las divisiones que están claramente establecidas, una cosa que es indescriptible. La verdad es que me cuesta recordar detalles, esto fue en el año 96, o mejor dicho llegar a una conclusión clara, pero es mágico.
EC - Ana, un último apunte. Israel hoy está amenazando con una nueva gran ofensiva contra la Franja de Gaza después de haber lanzado esta madrugada varios ataques que dejaron como saldo tres niños heridos y numerosos daños materiales. Según lo que han reportado distintos medios de prensa, Israel realizó al menos seis bombardeos en Gaza en las últimas horas, en represalia por el disparo de un cohete de corto alcance desde territorio palestino. El vice primer ministro israelí, Silvan Shalom, dijo hoy que si no cesa el lanzamiento de ese tipo de cohetes palestinos el ejército va a intensificar las acciones contra el movimiento Hamás. ¿Cómo está incidiendo este otro escenario en las celebraciones en Jerusalén que tú nos estás relatando?
AJ - No, no inciden en las celebraciones de Semana Santa ni de Pesaj. Pero por supuesto que hay preocupación porque los bombardeos de hoy, que según Israel fueron contra fundiciones de fabricación de cohetes y depósitos de armas y municiones de Hamás y otros grupos radicales palestinos, no son en respuesta a un cohete lanzado ayer sino que el de ayer fue uno más en una serie de ataques diarios en las últimas semanas. Por eso se habla de escalada, porque vuelve a haber ataques con cohetes diariamente, a veces más de uno por día. Ya hubo muertos en los últimos días, no sólo soldados israelíes en patrullas del lado israelí sino también trabajadores extranjeros en poblados agrícolas israelíes aledaños a Gaza. Por eso por un lado Israel advierte a Hamás que frene esa escalada, Hamás dice que no fueron ellos, Israel responde que cuando Hamás quiere frena a los otros grupos radicales, y en esas discusiones sin duda se teme un deterioro mayor.
Aunque volviendo al tema inicial, eso no atenta contra las celebraciones aquí en Jerusalén pero no quita que el ambiente esté compuesto también por la tensión política, en este caso en el sur del país, en la frontera con la Franja de Gaza.
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