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"Sea quien sea el partido que gobierne en Inglaterra, tendrá que hacer un ajuste fiscal"

"Sea quien sea el partido que gobierne en Inglaterra, tendrá que hacer un ajuste fiscal"

Contacto con Francisco Panizza, profesor en la Escuela de Gobierno de la London School of Economics


(emitido a las 7.54 Hs.)

EMILIANO COTELO:
En Gran Bretaña, el Partido Conservador se impuso en las elecciones que se cumplieron ayer, pero no alcanzó la mayoría absoluta y por lo tanto no podrá conformar automáticamente el gobierno.

Ayer fue una noche larga, el escrutinio continúa, hasta ahora van procesadas 621 de las 650 circunscripciones. El Partido Conservador de David Cameron obtiene el 36% de los votos; el laborista Gordon Brown, hoy primer ministro, el 29%; y el liberal Nick Clegg tiene el 22%.

De los escaños que ya están distribuidos, los correspondientes a esas circunscripciones, Cameron tiene 291; Brown 251 y Clegg 51.

Esta mañana se conoció un comunicado del primer ministro Gordon Brown en el que destaca que "ningún partido obtuvo una mayoría clara y que se debe propiciar un gobierno fuerte, estable y con principios".

Por su lado, David Cameron destacó anoche lo que consideraba una derrota del Partido Laborista:

(Audio en inglés)

"Tenemos que esperar los resultados completos pero creo que ya está claro que el gobierno laborista ha perdido su mandato para gobernar nuestro país".

(Fin del audio)

Por su parte, el líder liberal demócrata Nick Clegg, que en principio se perfilaba como la gran sorpresa de esa campaña y terminó votando mal, manifestó que su agrupación política tuvo un resultado muy inferior al esperado en cuanto a la obtención de bancas en el futuro Parlamento. Dijo que pasó una noche "decepcionante" y no reveló a qué partido apoyará si su voto resulta decisivo para inclinar la balanza.

Estamos en diálogo con el doctor Francisco Panizza, doctor en Ciencia Política, profesor en la escuela de gobierno de la London School of Economics.

Anoche, por lo menos hasta que yo estuve despierto, las trasmisiones, por ejemplo la de la BBC, seguían sin parar. Y cuando eran las 2, 3 de la mañana –hora de Londres– continuaban procesando los datos, muy desconcertados por lo que venían mostrando las urnas y sobre todo por su impacto en la distribución de las bancas. Porque allí tenemos que hacer una primera aclaración: los porcentajes de votos no tienen necesariamente correlatos en los porcentajes de escaños en la Cámara de los Comunes, el sistema tiene sus particularidades.

FRANCISCO PANIZA:
Absolutamente, porque el sistema electoral es muy diferente en Gran Bretaña al de nuestro país. En nuestro país es representación proporcional, en Gran Bretaña es mayoritaria, y eso hace que no haya correspondencia entre el número de votos y el número de escaños.

EC – ¿Cómo es? ¿Cómo se va asignando las bancas?

FP – Tú decías que hay 650 escaños en el Parlamento, lo que hay efectivamente son 650 mini elecciones. En cada una de estas 650 circunscripciones el candidato que saca más votos es el que gana la banca a diputado. Si hay varios candidatos, como generalmente hay, el ganador de esa circunscripción no necesariamente tiene más del 50% de los votos, puede ganar con un 40-45% de los votos, pero efectivamente se lleva la banca y los votos de los otros no cuentan para nada. Eso es lo que produce la distorsión entre los porcentajes de votación y las bancas que se ganan.

EC – Sí, el ritual británico es completamente sorpresivo, completamente desconcertante para nosotros. Lo que se vio por ejemplo en la transmisión de la BBC a lo largo de la noche y la madrugada es que en cada circunscripción se produjo un pequeño acto una vez que terminó el escrutinio, en el que se dan a conocer los resultados en un estrado en el que están presente los candidatos que aspiraban a ese escaño. Se da el pronunciamiento, se da el resultado y se instala ya como ganador, se le asigna la banca a fulano o a mengano ante los aplausos y los abucheos del público que está presente en ese lugar.

FP – Efectivamente, el que gana es el candidato, ese candidato obviamente representa un partido; es decir, es el candidato individual y no el partido que gana. Y como te decía, es como si fuera una sucesión o 650 elecciones simultáneas.

EC – Pero lo que nos resulta raro a nosotros es que la banca se asigna en la misma noche, no hay que pasar por varios días de escrutinio definitivo y esas cosas, ¿no?

FP – No, absolutamente no. Y si hubiera habido algún partido que sacara la mayoría absoluta en el Parlamento, como ha pasado desde los años 80 y 90, hoy de mañana tendríamos a David Cameron como primer ministro de Gran Bretaña. La transición es inmediata y brutal. Inmediatamente, a la mañana siguiente, Brown iría a la Reina, le presentaría su renuncia, y la Reina nombraría a David Cameron como primer ministro.

EC – A ver si los cálculos que yo hago están bien: David Cameron obtuvo 36% de los votos, pero de esas 651 bancas que se han asignado, como tiene 291, en realidad tiene el 46% de la Cámara, ¿está bien?

FP – Aproximadamente está bien. El sistema está hecho para aumentar la representación parlamentaria de los partidos mayoritarios. El Partido Laborista, que ha gobernado con mayorías parlamentarias muy amplias en los últimos tres años, nunca sacó más del 50% de los votos; tú necesitas sacar aproximadamente 40 o 42% para asegurarte una mayoría parlamentaria muy confortable.

EC – ¿Pero entonces qué mayoría parlamentaria estaría teniendo a esta altura David Cameron?

FP – No tiene una mayoría parlamentaria y no la va a lograr. Se calcula que podrá lograr entre 307 y 308 bancas en el Parlamento, en un Parlamento de 650 bancas obviamente tiene una mayoría relativa, pero no la mayoría absoluta.

EC – En el otro extremo del espectro se encuentra Nick Clegg que obtuvo 22-23% de los votos y sin embargo en la Cámara va a terminar teniendo apenas un 3%.

FP – Efectivamente, esa es la realidad y así es como el sistema distorsiona. ¿Cuál es el objetivo de este sistema? El objetivo es asegurar lo que los británicos llaman "gobiernos fuertes", que un partido controle el Parlamento y sea capaz de imponer su programa de gobierno sin tener que hacer pactos, sin tener que hacer concesiones, sin tener que buscar alianzas con otro partido. Y ahora la crisis del sistema es que, aún con esos mecanismos electorales, no se ha alcanzado ese gobierno fuerte, en un momento además muy difícil económicamente, en el cual se necesita tomar medidas muy impopulares.

EC – Justamente sobre eso es que quiero consultarte. Con este escenario que están dejando las urnas a partir de los resultados que todavía no son finales, ¿qué perspectivas hay?, ¿qué va a pasar en materia de formación de gobierno?

FP – Nadie puede decirlo por seguro. Si hay alguna posibilidad mayor, sería que David Cameron sea el primer ministro, que haya un gobierno conservador. Pero probablemente sería un gobierno conservador sin mayoría parlamentaria, un gobierno minoritario que dependería un poco del apoyo pasivo o de la buena voluntad de los otros partidos para mantenerse en el gobierno. Y ese escenario llevaría casi seguramente a nuevas elecciones en un plazo tal vez de uno a dos años.

EC – ¿Pero podría pasar que no llegara a conformarse gobierno con estos resultados?

FP – Gobierno se va a conformar. Otra posibilidad sería una alianza entre los laboristas y los liberal demócratas, que formarían de vuelta un gobierno. Pero sería un gobierno que tendría un cierto déficit de legitimidad porque son dos partidos que han perdido las elecciones, que no han votado muy bien, pero por las matemáticas del Parlamento tendría la posibilidad de formar un gobierno.

Y el que tiene el fiel de la balanza va a ser efectivamente el Partido Liberal Demócrata, aunque haya votado mucho peor de lo que se esperaba.

EC – ¿Cuáles son los desafíos que tiene que enfrentar el gobierno que surja de estas elecciones? ¿Qué es lo que hoy preocupa más en Gran Bretaña?

FP – Sin duda la cuestión fiscal. El desafío es un ajuste fiscal muy duro, que sea quien sea el partido que finalmente gobierne lo va a tener que hacer, le guste o no le guste. Las diferencias son de matices o de grados, cortar más ahora, más rápidamente, o esperar un poco a que la economía se recupere más y cortar más adelante. Pero sea quien sea el partido va a tener que hacer ajustes fiscales que en Inglaterra, en Uruguay o en cualquier lado del mundo son impopulares.

EC – La participación de la gente en la votación de ayer estuvo por arriba del 60%, ¿eso qué indica?

FP – En las elecciones pasadas estuvo en el 60%, ahora se calcula en 64-65%. Para lo que es la participación aquí –y debo recordar que aquí el voto no es obligatorio– es una participación relativamente alta.


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