(emitido a las 07.26 Hs.)

EMILIANO COTELO:
Cuando faltan tres semanas y unos días para las elecciones presidenciales en Brasil todo indica que a la candidata del oficialismo, Dilma Rousseff, nadie la mueve de la punta en las encuestas.

¿Está ya definida la elección en Brasil? ¿Cuáles fueron los últimos movimientos de los candidatos en la campaña electoral? Vamos a analizarlo con Mauricio Rabuffetti, colaborador de En Perspectiva desde Río de Janeiro.


MAURICIO RABUFFETTI:
Es muy difícil pensar que la campaña pueda cambiar de rumbo. Es un crecimiento muy sostenido en las encuestas de la candidata del Partido de los Trabajadores (PT), la ex jefa de gabinete del presidente Lula, Dilma Rousseff; quien cuenta con la popularidad del mandatario.

La diferencia en las encuestas con su inmediato perseguidor es de 24 puntos. Es un margen más que considerable, sobre todo si se tiene en cuenta que el segundo en esta lucha por la presidencia, el socialdemócrata, ex gobernador de Sao Paulo, José Serra, está en 27% de las intenciones de voto desde hace por lo menos diez días y en su caso la tendencia ha sido a bajar.

En política todo puede pasar, pero queda poco para el final de la campaña. A esto se suma la poca capacidad de reacción que ha mostrado la campaña de José Serra.

EC – ¿La campaña de Serra está estancada?

MR – Estática. El partido de Serra no ha encontrado la forma de penetrar en la coraza de resultados económicos. Tampoco lo ha hecho en materia de mejoras sociales que exhibe el actual gobierno de Lula.

No han logrado luchar con propuestas concretas contra el 80% de satisfacción que tienen los brasileños con el actual gobierno.

La campaña de Serra se ha enfocado en temas como salud e infraestructura. Son puntos importantes porque es un país con grandes carencias en esos sectores. Pero no son los principales para el día a día de los 135 millones de electores que hay en el país.

La población lo que quiere es continuidad.

EC – ¿Continuidad en el plano económico?

MR – Sí. Brasil está creciendo a un ritmo muy importante, la previsión para este año es de más 7% de expansión del PBI.

En lo concreto: se venden autos y televisiones como pan caliente; se pagan en cuotas bajas, muchas personas tienen la sensación de que adquirieron el derecho al consumo de productos que antes les estaban prohibidos. Según datos oficiales el desempleo no alcanza el 7% de la población económicamente activa. Incluso el trabajo informal (que es acentuado) está en mejor posicionamiento porque circula más dinero.

La oposición debe mostrar una continuidad con mejoras en sectores que lo necesiten. De lo contrario será muy difícil que haya un resultado que no sea una victoria de Dilma Rousseff; al día de hoy ni siquiera habría segunda vuelta.

EC – La elección, como aquí en Uruguay, se disputa a dos turnos, ¿no?

MR – Sí. De todas formas un segundo turno sería igualmente difícil para Serra. El resultado que está muy instalado entre los votantes, la mayoría creen que Dilma Rousseff va a ganar. Lo cierto es que si Serra llega a un segundo turno podría mostrar que puede competir con la popularidad de Lula. También permitiría que sus aliados en los distintos Estados hagan campaña con mucha más fuerza y no estén tan concentrados en las acciones locales: ingreso al congreso, gobiernos estatales -o municipales- que también se eligen el próximo 3 de octubre.

EC – En la campaña hubo denuncias en la Justicia de los socialdemócratas contra acciones de afiliados al PT (el partido de gobierno). ¿Qué fue lo que pasó y cómo incidió en la campaña?

MR – Se descubrió que algunos miembros del partido de Serra, el partido de la socialdemocracia brasileña, tuvieron secreto fiscal: declaraciones de impuestos violadas. Entre las personas que tuvieron el secreto fiscal violado está una hija de José Serra. Según las denuncias, algunos de quienes accedieron a esos datos son miembros del gobernante PT. Serra acusó a la campaña de Dilma Rousseff de querer sacar partido electoral de esos datos, presentó una querella y la Justicia Electoral determinó que no hubo tal intención y archivó el expediente que pedía la impugnación de la candidatura oficialista.

Es el tema central de la campaña en estos días y opacó una discusión de propuestas que ya era bastante light.

EC –Serra llegó a decir que este tipo de investigaciones por fuera de la ley forman parte del ADN del PT. El presidente Lula respondió ordenándole a la Policía que llevara una investigación a fondo sobre este asunto.

MR – Correcto. Hay una investigación abierta en la Justicia ordinaria, pero a nivel de lo que es la campaña electoral hasta el momento no ha habido un impacto que se ha convertido central en las encuestas.

EC – ¿Cuándo es el próximo debate entre los candidatos presidenciales?

MR – Hoy hay uno previsto pero no participa Dilma Rousseff, así que ese no lo contamos. El próximo debate en el que van a estar los tres candidatos -Dilma Rousseff, José Serra y la ex ministra de Medio Ambiente Marina Silva (que tiene apenas 8% en las encuestas)- está previsto para el próximo domingo.