(Emitido a las 08.51)

EMILIANO COTELO:
Ghazi Al Yauar es el nuevo presidente de Irak, el primero después de la caída de Saddam Hussein el año pasado. Este ingeniero de 46 años de origen sunita -que como ustedes saben es una minoría que junto a los chiítas constituye el grueso de la población iraquí- se formó en Estados Unidos donde vivió exiliado. Sobrino de uno de los jeques más influyentes del país, Al Yauar estaba al frente del disuelto Consejo de Gobierno iraquí que ahora da paso a este gobierno interino un mes antes de que los iraquíes recuperen en parte su soberanía, cosa que está prevista para el 30 de junio. Menudo desafío el que tiene este hombre por delante: el de conducir al país -a un país ocupado por fuerzas extranjeras- hacia la celebración de elecciones democráticas en medio de ataques y más ataques.

Nos ocupamos de este tema en diálogo con Mauricio Rabuffetti.

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Mauricio, quizá a algún oyente que viene siguiendo el tema Irak le llame la atención el hecho de que este nuevo presidente asuma funciones un mes antes de ese hito previsto para el 30 de junio, cuando los iraquíes recuperarán parte de su autonomía. Hay una razón para ello y me gustaría que tú empezaras por ahí.

MAURICIO RABUFFETTI:

La razón es que es necesario un tiempo mínimo para aceitar el funcionamiento de este gobierno interino que va a encabezar Al Yawar. De hecho, para ser justos, deberíamos mencionar que además del nombramiento de Al Yawar como presidente, se produjo el nombramiento de quien en los hechos va a manejar el gobierno y el gabinete de 32 integrantes, que es Iyad Allawi, el nuevo primer ministro iraquí. En ambos casos hay que señalar también que se trata de ex integrantes del Consejo Provisional iraquí que se disolvió ayer, ese grupo de consenso que había encumbrado la coalición en el cual estaban representadas distintas minorías iraquíes. Es decir que hablamos, seguimos hablando, para ser exactos con los términos, de funcionarios de confianza de Estados Unidos.

EC - Si, pero con un matiz que llevó a fuertes discusiones sobre quién debía ser el nuevo presidente...

MR - Me imaginaba que me ibas a decir algo así y ya voy a ese punto. Pero primero quisiera destacar un detalle que no es menor en relación al momento en el que se produce este cambio de gobierno. Los oyentes recordarán que la semana pasada tocamos el tema de la resolución sobre Irak presentada en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas por Estados Unidos y Gran Bretaña, que fue muy cuestionada, y que China, Francia y Alemania pidieron reformar. Este cambio de gobierno en Irak refuerza el mensaje estadounidense al Consejo de Seguridad en el sentido de que quiere cumplir el cronograma que se trazó y terminar entregando el poder y la soberanía a los iraquíes. Como mensaje es fuerte en un momento en el que necesita apoyos para hacer pasar su proyecto de resolución.

EC - Pero yo te preguntaba por las discusiones que rodearon el nombramiento de Ghazi Al Yawar...

MR - Sí, discusiones e incluso una renuncia, nada menos que la del candidato favorito de Estados Unidos.

EC - Adnán Pachachi, quien rechazó el nombramiento ayer al cargo de presidente debido a fuertes discrepancias en el seno del Consejo Provisorio.

MR - Pachachi era el candidato natural estadounidense, el candidato por lógica. Fue y sigue siendo un aliado fundamental para Estados Unidos en Irak y después de la muerte, del asesinato en realidad de Ezedine Salim, del cual también hablamos hace unos días -recordemos que era el titular de turno del Consejo Provisional de Gobierno-, asumió Al Yawar, hoy presidente de Irak, en medio de la polémica.

EC - Este fin de semana el diario El País de Madrid explicaba que la diferencia entre ambos, lo que dividía las preferencias, era que Pachachi aparecía como "prooccidental" y menos conocido dentro de Irak que Al Yawar, quien a su vez es un jefe tribal y por lo tanto podría "reunir más consensos", según señalaba ese diario.

MR - Evidentemente por esa característica de pertenecer a una familia de jefes tribales, Al Yawar podría moverse con más comodidad en un gobierno que va a necesitar generar ante todo confianza en la población iraquí, confianza para poder llegar a elecciones democráticas, y va a tener que marcar un perfil propio desligándose lo más que pueda de la tutela que hasta ahora tenía el Consejo Provisorio por parte de la coalición. Es algo muy difícil cuando el país sigue ocupado por tropas extranjeras, cuando no está claro qué poder va a tener este gobierno sobre las fuerzas de seguridad, y sobre todo cuando, una vez más, se trata de funcionarios cuya designación pasó por la aprobación estadounidense.

EC - Tú mencionabas recién el tema de la seguridad en Irak y lógicamente surge la pregunta de en qué está el proyecto de resolución de la ONU sobre Irak, del cual nos ocupamos la semana pasada, un proyecto que de hecho se trancó precisamente en ese punto: la presencia de las tropas extranjeras en Irak.

MR - Lo principal en este aspecto del tema iraquí es que ante las fuertes críticas que recibió el proyecto inicial de resolución, Estados Unidos y Gran Bretaña presentaron otro que está siendo discutido por el Consejo de Seguridad de la ONU.

EC - ¿Tiene alguna modificación importante?

MR - La semana pasada, cuando nos ocupamos de este asunto de la resolución, explicábamos que un punto central de discordia era el tiempo de permanencia de las fuerzas internacionales que, comandadas por Estados Unidos, van a instalarse con la anuencia de la ONU en Irak después del 30 de junio. Estados Unidos quería inicialmente una duración no determinada, pero parece que las presiones de Francia, Alemania y China dieron resultado y el nuevo texto enviado al Consejo de Seguridad plantea no una fecha fija para la salida de estas tropas, sino un período que podría durar hasta el momento en el cual se consolide un gobierno democrático elegido por los iraquíes.

EC - Hablamos entonces de más de un año de presencia de las fuerzas internacionales en Irak a partir del 30 de junio.

MR - Sí, porque si se cumple el calendario previsto recién a fines del año que viene se estarían realizando las elecciones para elegir, ahí sí, a un gobierno legitimado por el voto popular. Por eso decía que más que una fecha específica, este nuevo proyecto de resolución presentado al Consejo de Seguridad de la ONU plantea un período que va a ser determinado en buena medida por los acontecimientos, algo que parece un poco más factible para Estados Unidos desde el punto de vista práctico si pensamos en la estabilidad de Irak como un objetivo de la Casa Blanca, pero que al mismo tiempo podría prestarse a interpretaciones subjetivas en el futuro, al momento de retirar las tropas. De todos modos todavía no hay pistas sobre la aceptación o no de esta nueva propuesta por parte de los demás miembros del Consejo de Seguridad.

EC - Queda además por conocer un tema bien importante: qué grado de control van a tener los gobiernos iraquíes, el actual y los futuros, sobre la infraestructura petrolera del país.

MR - Si será importante.

EC - Algo bien importante en momentos en que el precio del petróleo bate records.

MR - Sin duda.