(Emitido a las 08.11)

EMILIANO COTELO:
Después de más de un año de idas y vueltas, ayer la oposición venezolana se salió con la suya: habrá una consulta popular sobre la continuidad de Hugo Chávez en el poder. Después de un largo, difícil y disputado proceso de revisión de firmas, las autoridades electorales determinaron ayer que la oposición consiguió el número suficiente de voluntades para que se convoque a un referéndum revocatorio que podría llegar a sacar al presidente Chávez del poder. El mandatario mientras tanto dijo que acepta el resultado de esta iniciativa y prometió dar dura batalla a sus opositores.

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Vamos a conversar a propósito de estas novedades con Mauricio Rabuffetti. Ya hemos tratado en más de una ocasión el caso Venezuela, sobre todo porque hubo episodios en los que el país estuvo al borde del derrumbe institucional, al borde de conflictos internos graves. Ahora tenemos resultados a la vista.

MAURICIO RABUFFETTI:
Sí, diría en cierto modo "finalmente" con resultados a la vista porque vaya si hemos trabajado en los últimos meses en base a posibilidades, a hipótesis en este tema, cuántas veces nos ocupamos del tema Venezuela pensando que habría una decisión determinada y después eso quedaba por el camino. Ahora sabemos que va a haber un referéndum en el que Chávez se va a jugar su mandato.

EC - Recordemos entonces muy brevemente qué es este referéndum que tendrá lugar en Venezuela.

MR - Muchos oyentes que han venido siguiendo el tema con nosotros recordarán que se trata de una alternativa que existe en la Constitución de Venezuela que habilita a los ciudadanos a recoger firmas para someter a consulta la continuidad de cualquier autoridad electa, sea el presidente, sean los diputados nacionales, siempre y cuando se haya cumplido la mitad de su mandato. En el caso específico del presidente, la recolección de firmas y la posterior realización del referéndum van a ser el corolario de un enfrentamiento de más de dos años con la oposición; se trata de una salida que se consiguió con muchísimo trabajo en parte con la ayuda de instituciones mediadoras, como la OEA y el Centro Carter, y que se espera que zanje definitivamente este enfrentamiento que se refleja en una polarización total entre chavistas y opositores. Un enfrentamiento que llegó incluso a un golpe de Estado opositor contra Chávez, que fue el punto máximo de esta polarización, el 11 de abril del año 2002.

EC - En aquella instancia Chávez volvió al poder menos de 48 horas después del golpe.

MR - Sí, muy rápidamente.

EC - La pregunta, ahora que como decíamos tenemos cifras a la vista, es cómo sigue este proceso, qué pasa ahora que las firmas están.

MR - La oposición consiguió las firmas, va a haber un referéndum revocatorio en una fecha que todavía no está determinada, aunque por ahora se habla del 8 de agosto como la posibilidad más fuerte; en este punto precisamente van a centrarse las discusiones en los próximos días. Me atrevería a decir que posiblemente también van a centrarse en este punto los enfrentamientos de marchas y contramarchas tan habituales en las calles de, características de la lucha política en la Venezuela de Chávez. De todos modos, hay varios escenarios posibles en función de la fecha en que se realice la consulta.

EC - ¿Cuáles son los escenarios?

MR - Si el referéndum revocatorio se hace antes del 19 de agosto, que es cuando se cumplen cuatro años, dos tercios del mandato de seis años del presidente, que terminaría en 2006 y el voto popular decide que Chávez tiene que irse, en 30 días se debería convocar a elecciones generales; pero si el referéndum se realiza después del 19 de agosto, si Chávez pierde sería el vicepresidente -obviamente partidario de Chávez- quien terminaría el mandato del actual presidente.

EC - Lo cual a los efectos de los opositores dejaría todo igual o casi igual que hasta ahora.

MR - Exactamente, y es justamente lo que quieren evitar, así que van a enfocar toda la energía en que el referéndum se celebre antes del 19 de agosto. También puede pasar que se haga el referéndum y Chávez gane y siga en el poder, en este caso fortalecido por el voto popular. Pero hay otra posibilidad: supongamos que Chávez pierde el referéndum y entonces tiene que dejar el poder: nada en la Constitución venezolana -hasta donde pude averiguar- impide que vuelva a presentarse como candidato tras la revocación de su mandato.

EC - O sea que existe la posibilidad de que se realice de ese modo una especie de elecciones anticipadas en las que podría participar una vez más Hugo Chávez.

MR - Algunos artículos de análisis jurídicos de algunas entidades opositoras interpretan, consideran que eso no debería ocurrir, que el concepto de revocación es absoluto, es decir que Chávez en esa hipótesis no podría presentarse. Pero hasta donde pude averiguar, hasta donde pude consultar con fuentes de confianza, nada en la Constitución venezolana impide que se vuelva a presentar.

EC - Es decir que para la oposición la opción es una consulta popular antes del 19 de agosto.

MR - Sí.

EC - Y en ese caso la pregunta que lógicamente se harán muchos oyentes es cuántos votos se necesitan para sacar a Chávez de poder o, visto de otra manera, cuántos votos permiten que se quede.

MR - Estuve buscando para poder tener la cifra exacta, que ronda los 3,8 millones de votos. De todos modos aclaremos primero que para que el referéndum sea válido tiene que cumplirse la condición de que participe al menos el 25 por ciento del padrón electoral. En caso de que esta primera condición se cumpla, exactamente, según fuentes de la propia oposición, serían 3.757.773 votos los necesarios para sacar a Chávez del poder; esta cifra representa el número de votos que obtuvo cuando resultó electo en el año 2000. Y ésta es probablemente la parte más interesante de este tema, ahora que ya sabemos que va a haber un referéndum revocatorio porque ayer el propio Chávez aceptó el resultado de la recolección de firmas y su posterior verificación -que se realizó el fin de semana- y dijo que va a haber referéndum. La parte más interesante es saber qué posibilidades tiene Chávez de cara a esa consulta popular.

EC - ¿Tenemos encuestas o algún tipo de dato específico sobre eso?

MR - Por experiencia propia, las encuestas -que las hay- sobre la popularidad de Chávez en Venezuela suelen ser bastante -por no decir muy- sesgadas. Entonces preferiría no remitirme a esos datos, que por supuesto tengo, porque nada viene con sello de imparcialidad hoy por hoy en Venezuela. Cuando ganó en el año 2000, según datos que recordaban ayer las agencias de noticias, Chávez obtuvo esos casi 3,8 millones de votos que mencionaba recién, y la oposición, que recogió tres veces firmas para convocar a un referéndum logró reunir ahora, en este último intento, exitoso para ellos, prácticamente 2,5 millones de firmas.

EC - O sea que las cifras están bastante alejadas.

MR - Ése es el punto, es una diferencia de casi 1,3 millón de votos si comparamos con las firmas recogidas que suponemos que se convertirán en votos contra Chávez. La vez en que la oposición recogió más firmas, que fue el año pasado después del paro petrolero que terminó en febrero de 2003, según ellos mismos -pues en ese caso no hubo validación oficial- habían obtenido 3,4 millones de firmas. Si nos remitimos a estos datos, está claro que más allá de cualquier resultado de encuestas, objetivamente la oposición está bastante lejos de su meta, de los votos que necesita para sacar a Chávez del poder. Claro que no es lo mismo una recolección de firmas que una instancia electoral, eso a favor de la oposición; y a favor de Chávez, al momento de votar, más allá de los chavistas seguros votantes del presidente y los opositores declarados, seguramente muchos electores van a preguntarse: "Si se va Chávez, ¿quién viene?"; la realidad es que por ahora no hay oferta del otro lado y eso va a jugar muy fuerte a favor del actual gobierno.

EC - Queda claro también que, como ya estamos acostumbrados a ver en Venezuela, va a haber movilizaciones en las calles que, ojalá, no deriven en choques violentos.

MR - Sí, te adelanto que ya para este fin de semana, como para no perder la costumbre e ir practicando, hay una marcha de cada una de las partes, una del oficialismo y otra de la oposición, en Caracas. Así que, otra vez, una pulseada en las calles.

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Edición: Jorge García Ramón