(emitido a las 08.49 Hs.)

EMILIANO COTELO:

"Bienvenidos a la superficie, a la vida". Con estas palabras del presidente Sebastián Piñera están siendo recibidos los 33 mineros que durante 69 días han vivieron atrapados a 700 metros bajo tierra, en la Mina San José, ubicada en el desierto de Atacama, en Chile.

A las 00.11 hora local, 01.11 de Uruguay, era rescatado y recibido por su familia el primero de los obreros que salía a la superficie, Florencio Ávalos. El campamento Esperanza se convertía en el campamento de la euforia, dice la crónica del diario El Mundo de España: "Aplausos, llantos, emoción, alivio, todo se mezclaba" en esa multitud integrada por familiares, técnicos, voluntarios, periodistas y jerarcas de gobierno.

(Audio Sebastián Piñera.)

"Florencio Ávalos, el primer minero, ya está con nosotros. Lo vimos todos abrazar a su mujer Mónica, a su hijo Byron, con un amor, con una ternura, con un cariño que realmente emocionó a todos y cada uno de los chilenos.

Pero todavía nos queda una larga jornada. En este instante la cápsula va bajando nuevamente a las profundidades de esta montaña para traer al segundo minero, Mario Sepúlveda, y así seguirá, sin descanso, como ha sido estos 69 días, porque hoy día 13 de octubre del año 2010, el 13 del 10 del 10, nuevamente el número mágico de 33, el primer minero ha sido rescatado de una forma que realmente enorgullece a todos los chilenos. Después vendrá Mario Sepúlveda, y después vendrán todos y cada uno de los 33.

Yo quiero en esta noche de tantas emociones en primer lugar agradecerle a Dios, porque sin la ayuda de Dios esto no habría sido posible. Y agradecerles también a los rescatistas, al ministro Laurence Golborne que está con nosotros esta noche y al ministro Jaime Mañalich, que desde el primer día se comprometieron en cuerpo y alma con este rescate. Pero a todos los rescatistas, a esos cientos, miles de personas que han hecho su aporte para que esta noche sea una noche maravillosa que los chilenos y el mundo entero nunca van a olvidar".

(Fin.)

EC - Así hablaba el presidente de Chile, Sebastián Piñera, minutos después de la primera de las liberaciones.

***

EC - El contacto es con el economista Cristián Larroulet, ministro secretario general de la Presidencia en el gobierno de Chile.

¿Dónde lo hemos ubicado?

CRISTIÁN LARROULET:
Voy camino a la oficina.

EC - Entonces lo hemos ubicado en Santiago; usted está siguiendo los hechos a la distancia.

CL - Por supuesto, estoy siguiendo estos hechos desde La Moneda, con mucha emoción, como lo dijo muy bien el presidente anoche cuando salió Florencio Ávalos. Todos muy contentos, muy emocionados, muy agradecidos a Dios, y al trabajo de todas las personas que han hecho posible esta realidad. Especialmente los propios mineros, que mostraron una voluntad, un temple, una disciplina y una fe gigantesca para mantenerse debajo de la tierra, a esos 700 metros de profundidad, sin perder la esperanza de que Chile iba a ser capaz de rescatarlos.

EC - El Estado chileno se comprometió muy fuertemente con este operativo de rescate. ¿Cómo fue esa decisión? ¿Cuáles son los costos que se están asumiendo? ¿Puede desarrollar ese punto?

CL - Cuando nos dimos cuenta de que la situación de la empresa donde se había producido el accidente era muy precaria, y por lo tanto su deber y su responsabilidad de rescatar a estos 33 mineros le iba a ser imposible de asumir, inmediatamente se tomó la decisión de que la vida está por sobre todas las cosas y correspondía aplicar lo que en Chile todos conocemos como el principio de subsidiaridad. Le correspondía al Estado hacerse responsable de eso, y por lo tanto se tomaron las decisiones, primero, de contar con las personas más capaces, e identificamos profesionales destacados, expertos en minas subterráneas como el jefe técnico de toda la operación, el gerente de la mina del Teniente, Andrés Sougarret, y le pedimos que ayudara, colaborara y dirigiera este proceso. El presidente de la República puso a cargo también al ministro de Minería, Laurence Golborne, y decidió suspender su viaje a Colombia para venirse directamente a Copiapó y estar ahí presente, observar en la realidad y comenzar a diseñar el proceso.

Hubo un compromiso total del presidente de la República y del Gobierno. Diría un compromiso total de todo Chile. Ha habido una actitud de solidaridad, por ejemplo, son innumerables las empresas privadas que han puesto a disposición de este rescate sus maquinarias, sus profesionales, también las organizaciones de voluntariado. Como Chile es un país que tiene mucha fe, distintas iglesias organizaron cadenas de oraciones. A lo largo de estos dos meses se ha mostrado un compromiso total de toda la sociedad chilena.

EC - Es interesante ese punto, porque iba a preguntarle si hay una estimación de cuánto ha costado y costará este operativo de rescate. Por lo que usted está contando, hay costos que asume el Estado, pero hay otros costos que asumen privados y hay también trabajo voluntario. ¿Cómo es esa ecuación?

CL - Así es. Para que tenga una idea, debe de haber por lo menos unas 30 o 40 empresas privadas que están colaborando en esto. Si usted ve las imágenes de la televisión, de repente ve algunas banderas, algunos nombres de empresas que han estado colaborando. Las principales empresas mineras del país han puesto a disposición a sus técnicos. En general es un esfuerzo de todos, hay que terminar de cuantificar, no es el momento de hacerlo ahora, pero sin lugar a dudas ha sido una operación de rescate que ha comprometido a todo Chile.

Chile vivió el 27 de febrero el terremoto de mayor daño en nuestra historia. Este es un país que tiene una situación geográfica muy sensible a los terremotos, tenemos el triste récord de haber tenido dos de los 10 terremotos de mayor impacto de la historia del mundo, y el último ocurrió el 27 de febrero. Si usted va de nuevo a la zona de la reconstrucción, ve un compromiso del Estado, pero también un enorme compromiso de toda la sociedad civil. Por ejemplo, el compromiso de empresas privadas chilenas para la reconstrucción de escuelas, de hospitales, para el apoyo a los pescadores que fueron arrasados por el maremoto. En general, Chile está mostrando en estos momentos de adversidad con los mineros, con el terremoto, una gran capacidad de solidaridad y un esfuerzo de alianza entre el sector público y la iniciativa privada enorme, lo que los expertos llaman capital social. Cuando los países tienen capital social, que es esta capacidad de construir redes de solidaridad y de apoyo, también se permiten superar adversidades como esta, se permiten que haya más desarrollo económico y más desarrollo social.

EC - Al mismo tiempo que el Estado se compromete como se ha comprometido con este operativo, al mismo tiempo que el Gobierno mismo asume el protagonismo que asume, resulta que por otro lado hay fallas del Estado, en los controles de seguridad de esta mina San José se cometieron errores, omisiones, que en buena medida posibilitaron que ocurriera este accidente que pudo haberse cobrado la vida de los 33 obreros. ¿Cómo ve esa otra parte de la historia?

CL - Efectivamente, usted tiene mucha razón, hubo mucha negligencia, falta de advertencia oportuna de diversos servicios, básicamente del Servicio Nacional de Geología y Minería. A raíz de eso hay una responsabilidad del Estado en esta materia, y por eso también se justifica la participación que ha tenido.

Hace aproximadamente un mes el Gobierno tomó la decisión de formar una comisión de expertos que está presidida por la ministra de Trabajo, Camila Merino, que está trabajando intensamente para revisar todos los aspectos de prevención de riesgos, seguros de accidentes, buenas prácticas en esta materia y cambiar las prácticas erradas o equivocadas. Esta comisión está trabajando intensamente a lo largo y ancho de Chile, haciendo un levantamiento de la situación de riesgo de trabajo, no solamente en la minería sino también en otros sectores. Y con ese resultado y esas propuestas vamos a reflexionar sobre nuestra institucionalidad, nuestra legislación y vamos a mejorar las prácticas para que accidentes como este se reduzcan sustancialmente.

EC - ¿Viene una nueva era en la minería en Chile desde el punto de vista de las condiciones de seguridad, de las prácticas que se siguen? ¿Qué va a pasar en materia de remuneraciones? Porque el caso de la mina San José también ha mostrado que esos empleados tienen sueldos muy magros y condiciones de trabajo muy duras.

CL - En Chile hay una gran minería, una mediana minería y una pequeña minería, y en esta pequeña minería las situaciones de riesgo son mayores y las remuneraciones son menores; ese equilibrio es el que queremos cambiar con este perfeccionamiento de la institucionalidad. Además en el presupuesto del año 2011 hemos decidido reforzar fuertemente las actividades de prevención y de fiscalización en este Servicio Nacional de Geología y Minería para que accidentes como este no se repitan.

Por último, con respecto al tema remuneraciones, lo importante es que haya empleo y capacitación. Con empleo y capacitación se mejoran los niveles de ingresos y los salarios. Estamos haciendo un esfuerzo grande en el país en ambos aspectos. En primer lugar, respecto a empleo, el Gobierno del presidente Sebastián Piñera tenía la meta de crear 200.000 empleos anuales, llegar al final del período con un millón de nuevos empleos, y ya en los primeros seis meses hemos visto que vamos a superar esa meta, que nuestra creación de empleo este año va a estar por encima de los 250.000 nuevos empleos. Por lo tanto, estamos colaborando desde esa perspectiva a las mejores condiciones para los trabajadores chilenos.

En segundo lugar, necesitamos mejorar la capacitación. Hay mucho que hacer, por eso es que en el presupuesto de 2011 hemos decidido darle prioridad al tema de la capacitación, especialmente focalizando más recursos en la pequeña empresa, que es donde muchas veces hace más falta para evitar estos accidentes, pero además para mejorar el nivel de remuneraciones.

EC - ¿Qué responde usted a quienes entienden que el presidente Piñera está asumiendo una presencia excesiva, un protagonismo mediático excesivo durante este operativo de rescate?

CL - No comparto esa crítica. El presidente Piñera corrió todos los riesgos y dijo "la prioridad de la vida de estas 33 personas está por sobre todas las cosas", y decidió jugársela cuando no se sabía si estaban con vida o no, decidió acortar un viaje al cambio de mando en Colombia y decidió tomar los riesgos, como corresponde a un líder. Los líderes toman riesgos sobre todo cuando se habla de la vida de las personas, y corresponde que ese líder esté hoy día en el sitio dándole un abrazo a cada uno de los mineros que salen con vida.

Es una crítica completamente infundada. Gracias a Dios tenemos un presidente que se la juega y que ha demostrado lo que es el estilo de un gobierno de estar cerca de las personas, tener sentido de urgencia, tener sentido de hacer bien las cosas con profesionalismo. Apenas llegó el presidente a la mina dijo: "hay que llamar a los mejores expertos, hay que pedirles a los países que más saben de esta materia como minería, Estados Unidos, Canadá, Australia, experiencia en esta materia". Él estuvo desde el primer día abocado a este rescate, y por lo tanto, con mucha razón tiene que estar hoy día en la mina.

EC - ¿Qué va a pasar con los 33 mineros una vez que todos estén de nuevo en la superficie y se reintegren a sus familias? ¿Qué va a pasar, por ejemplo, en materia de indemnizaciones, qué va a pasar en cuanto a su empleo? Porque más allá de que acaban de vivir este trauma tan brutal, por otro lado la empresa está quebrada, no se sabe si va a continuar su actividad. ¿Entonces?

CL - Estamos en el proceso de rescate, todavía no han salido todos, la prioridad es que salgan todos bien, y en segundo lugar el apoyo en salud, el apoyo psicológico que se les está dando. Ese apoyo además corresponde porque este fue un accidente de trabajo, lo está dando una empresa privada responsable de los temas de seguridad laboral que se llama Asociación Chilena de Seguridad, ella es la que ya mismo está haciendo todo el proceso de apoyo psicológico. Posteriormente cada minero es libre y tomará sus decisiones en función de motivaciones futuras. Algunos de ellos ya han dicho que no quieren seguir siendo mineros, que quieren dedicarse a otra cosa; uno de ellos que ya ha sido contratado por la empresa encargada de la seguridad, porque es un gran líder y un gran comunicador. Vamos a ver, estoy seguro de que se les van a multiplicar las oportunidades en estos meses, y serán ellos libremente quienes decidan eso.

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Transcripción: María Lila Ltaif