Así lo anunció el primer ministro David Cameron, quien agregó que los saqueos que asolan la ciudad son parte de una delincuencia pura y simple, y así hay que combatirla y derrotarla.

Además, dijo que en, caso de ser necesario, la policía balas de goma para reprimir a estos grupos de jóvenes, que se citan a través de redes sociales para destrozar todo lo que encuentran a su paso.  

¿Y esto ha tenido algún resultado?

Hasta el momento, Londres no ha tenido incidentes, aunque cabe preguntarse cuántos días podrá la policía dedicar 16 mil agentes para la prevención de este tipo de incidentes.

Este martes, por ejemplo, se suspendió el partido entre Inglaterra y Holanda, que iba a disputarse en Wembley, por falta de guardia policial.

Además de eso, los pubs, restaurantes y comercios cerraron más temprano por temor a los incidentes, transformando la situación en un especie de toque de queda.  

Mientras tanto, los incidentes se han trasladado a otras ciudades, algo que ya comenzó a pasar el día lunes.

Ha habido focos de saqueos e incendios en Birmingham y Manchester, en donde, además, el transporte ferroviario está interrumpido debido a los disturbios.   

¿Y el ciudadano común que dice?
 
Cientos de ellos, convocados a través de las redes sociales,  se mandaron a la calle a limpiar los destrozos.

Con escoba en mano y con pancartas del estilo "Londres odia a los saqueadores" se manifestaron fuertemente e incluso contaron el respaldo de algunos personajes famosos, como Justin Bieber o Río Ferdinand.   

Pero lo que hay es mucho miedo y además disconformidad por la actuación de la policía, que en las primeras jornadas se vio absolutamente desconcertada y desbordada.

Recordemos que hasta ahora ha habido más de 500 detenidos, además de más de cien policías heridos y una persona muerta.

También hubo novedades en relación al hecho que originó todo esto:

Según las primeras pruebas de las investigaciones que hizo un comité independiente, Mark Duggan no le disparó a la policía antes de recibir el balazo en el pecho que le quitó la vida.

Sin embargo, la familia Duggan, un afrodescendiente, de 29 años y cuatro hijos, repudió la ramificación de violencia y saqueos que se está dando en el país.