Internacionales

La violencia del narcotráfico golpea una vez más a México y se cuela en la campaña electoral

Contacto con Homero Fernández, colaborador de En Perspectiva.


(emitido a las 8.39 Hs.)

JUAN ANDRÉS ELHORDOY:
El jueves pasado, cuando faltaban pocos minutos para que en México dieran las cuatro de la tarde, cientos de personas se encontraban pasando un buen rato dentro de un casino en la ciudad norteña de Monterrey.

Nadie de los que estaban allí presentes se esperaba que poco más tarde se desatara una nueva tragedia...

(Audio)

Escuchábamos el reporte de un periodista de la televisión mexicana dando a conocer las primeras informaciones que se tenían sobre el atentado.

Poco más tarde, se sabría que la causa del desastre que finalmente provocó la muerte de 52 personas fue, una vez más en México, la violencia provocada por el narcotráfico.

Ayer, las autoridades del estado de Nuevo León anunciaron la captura de cinco de los autores materiales de este ataque, al tiempo que afirmaron que el grupo criminal "Los Zetas", considerado el más sanguinario de México, es quien está detrás de ellos.

Esta mañana les proponemos volver a México para tratar de entender qué está ocurriendo en ese país y por qué siguen produciéndose este tipo de hechos tan impactantes.

ALEJANDRO ACLE:
Para eso, estamos en contacto con el periodista uruguayo Homero Fernández, colaborador de En Perspectiva.

Estábamos repasando los datos de este atentado, ¿cuáles son las últimas novedades con respecto a este caso?

HOMERO FERNÁNDEZ:
Las novedades desde el punto de vista policíaco son las que acaban de describir, hay cinco personas detenidas y las autoridades esperan que en las próximas horas aparezcan más individuos relacionados con este trágico hecho, incluso anuncian que tienen identificado al autor intelectual de este asunto.

Una de las cosas interesantes de esta detención es que uno de los involucrados había sido arrestado hacía prácticamente dos años atrás, justamente por posesión de un auto robado y con arma de fuego en su interior. Este hombre fue encarcelado pero, según establece la autoridad, quedó libre hace dos meses y luego fue reclutado para cometer este delito. Este detalle habla de por qué a veces es difícil encontrar una solución a este tipo de asuntos, al asunto de la justicia, de la corrupción, de la policía, de las autoridades locales, municipales o en este caso del Estado. Lo cierto es que la cosa está bastante enredada, hay muchísimos factores que entran en juego.

Las autoridades de Nuevo León señalan que, según los testimonios de estas personas que están detenidas, ellos no tenían la intención de hacer el daño que realmente hicieron. Dijeron que simplemente habían ido a asustar a estas personas. Aparentemente, estaban cobrando lo que llaman un derecho de piso que los dueños del casino no habrían querido pagar. Eso hizo que esta gente llegara al local con cuatro tanques de gasolina y los rociara –según ellos– con la esperanza de que la gente saliera del lugar antes de que se produjera el incendio. Pero mucha gente evidentemente se asustó y en lugar de ir hacia la salida fue hacia el fondo del edificio. Pero las salidas de emergencia estaban cerradas. Paradójicamente, las autoridades del casino las habían cerrado para evitar un posible atentado o la entrada de esta gente que les estaba amenazando, y al fin esto terminó siendo una trampa mortal.

Hay acusaciones de todo tipo, los expertos comentan que esta lamentable situación fue una síntesis de todo ese enredo que yo comentaba. Porque las autoridades municipales de alguna manera debieron haber hecho una clausura del lugar, en virtud de la situación en la que se encontraban las puertas de emergencia, por ejemplo. Asimismo, las autoridades municipales señalan a las autoridades estatales de ser las culpables o las responsables de haber autorizado el funcionamiento de este local.

Hay unos 500 casinos de este tipo que funcionan con permiso en México, pero se supone que hay una centena de casinos considerados ilegales. En México existe una figura legal llamada la figura del amparo, que se hizo hace muchas décadas con el propósito de proteger a los acusados de las imperfecciones de los sistemas. Esto implica que si tú eres acusado de un delito puedes pedirle a un juez que te dé un documento de amparo, que es el que impide que vayas a la cárcel o que se ejecute una acción penal hasta tanto esa situación se resuelva en un tribunal superior. Muchos de los casinos que están funcionando en el país acuden a este tipo de amparo –que usualmente dan los jueces– para seguir funcionando. Este es el caso de este casino; a vista de la gente común que iba allí a divertirse estaba todo normal, pero lamentablemente las circunstancias mostraron que no era así.

AA – Al comienzo de este contacto tu hacías referencia al papel de la corrupción, un punto que en este tema del narcotráfico siempre viene aparejado. ¿Cuáles podrían ser las causas de este deterioro, por llamarlo de alguna manera, que tiene tanta responsabilidad en todo este asunto?

HF – Lamentablemente tampoco hay una respuesta simple. Yo me remitiría a los comentarios que se han escuchado durante estos días ante esta situación tan trágica. El tema pasa por la responsabilidad de todos, desde el ciudadano hasta el político más encumbrado. Esos comentarios vienen en razón de que los ciudadanos reclaman que haya soluciones a este problema, que está dejando de ser "una guerra entre cárteles" –como decía el Gobierno hasta ahora– para empezar a convertirse en algo más. Comienzan a aparecer estas víctimas incidentales de la violencia y entonces la ciudadanía empieza a reclamarle al gobernante, al político, que haga algo más que estar lamentándose públicamente de estas situaciones...

AA - ...¿La sociedad civil se está organizando efectivamente para realizar estos reclamos?

HF – Sí, la sociedad civil se está organizando y se ha organizado a lo largo de este tiempo, desde hace varios años. De alguna forma ha intentado reconocer su posición ante estos hechos de violencia. No solamente del crimen organizado, del narcotráfico, sino también en otras circunstancias. Porque lamentablemente todos estos hechos que se reportan no son los únicos que ocurren, porque a nivel individual también ocurren otro tipo de delitos a los que la gente está expuesta. Pero volviendo al tema, la sociedad civil se ha organizado, se han hecho marchas, ahora hay un movimiento encabezado por el poeta Javier Sicilia, a quien le mataron a su hijo en un incidente también poco claro. Lo cierto es que se están buscando formas de diálogo con el poder político para tratar de articular una respuesta un poco más general, más civil. Sin embargo, la ciudadanía también se autorreclama, porque señala que esa corrupción de la que se acusa a los políticos también es responsabilidad del ciudadano de a pie, del que se pasa un semáforo en rojo, del que soborna a un agente de tránsito para no ser multado. En fin, hay una cantidad de pequeños elementos que también contribuyen a esa gran bolsa que se llama corrupción.

Entonces el tema pasa por muchos factores, no solamente por un deseo de que las cosas mejoren sino también de que en algunos sentidos se necesita –lo han dicho los expertos– un cambio de actitud, un cambio de cultura, la reafirmación de valores. Una cantidad de cosas que lamentablemente no se logran de un día para el otro.

AA – Sin duda es un tema más que complejo. Ahora, llevando el foco al plano político, ¿cómo afecta todo esto la campaña electoral con miras a las elecciones presidenciales de 2012?

HF – Ese es otro factor que va en crecimiento absoluto a medida que se acerca el 2012, recordemos que a mitad de año serán las elecciones. Si uno comienza a leer en los sitios de internet los comentarios de la gente, a la normal indignación de un ciudadano sobre un hecho de esta naturaleza ya se empiezan a agregar comentarios de tinte político. Porque evidentemente la carrera presidencial de alguna forma ya ha comenzado, incluso el propio partido gobernante, el PAN, ha empezado a seleccionar o a descartar algunos de los secretarios de Estado que estaban buscando ser candidatos por el partido. Ayer justamente el ministro de Cultura y Educación anunciaba su abandono de su aspiración presidencial. Por lo tanto, ya todo se está viendo con un tinte político. Las elecciones están a la vuelta de la esquina y el tema del crimen organizado está presente, lo ha estado también en otras elecciones de tipo estatal. Y hay preocupación por que el tema de la violencia no sea solo un asunto de debate, sino de cómo llegar a una solución. A partir del incidente en Monterrey, el expresidente Vicente Fox lanzó hace unos días la propuesta de que hubiese un diálogo con los involucrados, con las agrupaciones criminales. Incluso convocó a expertos internacionales para que se sentaran a dialogar y a buscar una amnistía. Pero este asunto fue tajantemente rechazado ayer por el presidente Felipe Calderón, quien considera que no hay lugar a una amnistía cuando ocurren hechos de esta naturaleza.

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