La manifestación más grande en la historia de Israel
Contacto con Ana Jerozolimski, corresponsal de En Perspectiva en Israel.
(emitido a las 8.45 Hs.)
EMILIANO COTELO:
Se la anunciaba como "la marcha del millón". A ese número parece que no se llegó, pero la protesta social en Israel, de todos modos, se ha ido consolidando y es un hecho indiscutible.
Cerca de 450 mil personas salieron a la calle el sábado de noche en todo Israel, en lo que se considera la manifestación más grande en la historia de ese país. Pero, por otro lado, se están levantando las carpas instaladas en varios puntos como campamentos de protesta. ¿Qué significa eso? ¿Acaso se terminó la campaña de los "indignados"?
Vamos a actualizar la situación a propósito de este caso. Para eso estamos en contacto con nuestra corresponsal en Israel, Ana Jerozolimski.
EC Hasta hace poco tiempo, "la manifestación de los 400 mil" era todo un símbolo en Israel. ¿Qué pasa, ahora hay uno nuevo? ¿Realmente la manifestación del sábado de noche batió récords?
ANA JEROZOLIMSKI:
Sí, al parecer sí. Durante muchos años se hablaba de ese término como símbolo. Se había acuñado el término "manifestación de los 400 mil" en referencia a una manifestación de protesta realizada durante una de las etapas de la primera guerra con el Líbano, en 1982, cuando la plaza que en ese momento llevaba otro nombre ahora se llama plaza Rabin estaba repleta de gente protestando por la guerra. Y quedó como símbolo de la protesta más impresionante que se había registrado en el país. La Policía dice que las manifestaciones, las concentraciones multitudinarias del sábado último, alcanzaron un nuevo récord de casi 450.000 personas. Hubo 300.000 en Tel Aviv en una marcha realmente multitudinaria, alrededor de 60.000 en Jerusalén, y también se fueron sumando otros miles y miles en diferentes partes del país, desde el sur hasta el norte. En total se puede decir hoy con certeza, según la Policía y según otros modos de medición que los organizadores de la protesta destacan, que la del sábado fue la manifestación más grande en la historia de Israel.
EC ¿Pero entonces por qué se están levantando las carpas en alguno de los campamentos?
AJ No es algo absoluto. En algunos lados sí se terminaron las carpas y se están levantando, en otros solo en forma parcial, por ahora no hay una imposición de las autoridades. La situación es que se pasa a una nueva etapa. Los propios organizadores de la protesta no aclaran a qué se refieren con "una nueva etapa", en qué marco se va a llevar a cabo, más allá del diálogo y de los actos de debate público que hay. Pero está claro que después de ese gran récord del sábado por la noche la sensación es que se cambia un poco la forma de manifestar la protesta.
Te cuento algo interesante respecto al levantamiento de las carpas. En algunos lugares se sabe claramente que las diferentes municipalidades quieren levantarlas, porque sin duda es algo que también molesta en el diario vivir de la gente que reside cerca de esos campamentos de protesta. En algunos lugares ya están entregando órdenes de desalojo. En Tel Aviv, a estas carpas ubicadas en el bulevar Rotschild que se convirtió en el símbolo del gran campamento de protesta llegaron panfletos de la municipalidad acompañados de una flor, exhortando a quienes residen en el campamento de protesta a que se contacten con el organismo si precisan ayuda para desmantelar las carpas. O sea que hay diferentes tonos, pero sin duda se pasa a otra etapa.
EC Muy diplomático el procedimiento.
AJ Sí, muy original.
EC Antes de analizar qué es lo que pasa de ahora en adelante con este movimiento, sería bueno que recordáramos brevemente la historia de esta iniciativa, ¿cuándo y cómo empezó?
AJ Esto empezó entre el 14 y 15 de julio, cuando dos chicas de 25 años Daphne Leef y Stav Shaffir se enteraron de que una amiga de una de ellas había quedado en la calle porque no podía pagar el alquiler y decidieron que esto no iba más y que había que hacer algo. Recordemos que todo empezó con el tema de la vivienda, la carestía para comprar y para alquilar. Entonces, se instalaron con una carpa en el bulevar Rotschild en Tel Aviv y luego se les fueron sumando numerosos jóvenes. La cosa fue gradual pero bastante rápida, hubo un efecto contagioso que se sintió a lo largo y ancho de Israel. Lo que empezó como una protesta por la carestía de la vivienda se fue convirtiendo en una protesta socioeconómica más amplia, que incluyó a diferentes sectores de la población, más que nada de la clase media, con diferentes reivindicaciones. Hubo marchas muy originales de padres jóvenes y no tan jóvenes, con los carritos de sus bebés, diciendo que el mantenimiento de los niños pequeños es impresionante, por lo caro de los productos relacionados a su crianza. O sea que hubo diferentes tipos de expresiones de la queja, lo que empezó por la vivienda se amplió a otros temas. En general, hoy se resume como una protesta de la clase media por la carestía general de la vida.
EC Y ahora, ¿se puede hablar de logros concretos que haya obtenido esta protesta?
AJ Hay cosas concretas, puntuales, en cuanto a precios. Se redujeron algunos costos, como el de un impuesto "fantasma" a la nafta, que los propios analistas económicos dicen que no tiene sentido, que parece algo totalmente arbitrario y que por supuesto lo siente la gente que va a cargar el tanque. Pero ya que la reducción de precios en forma concreta llevará tiempo, lo principal es el logro no en algo material. Lo principal es que la gente que salió a protestar se concientizó de que tienen fuerza, de que no tienen que limitarse a pensar que las cosas son así y no se puede luchar contra el sistema. Y además es importante el mensaje que se trasmitió a las autoridades, de que tienen que tomar en cuenta lo que dice la gente en las manifestaciones, que no es un invento arbitrario sino que la gente tiene algo que decir.
EC Sí, veía las declaraciones que hacía en el diario El País de España Stav Shaffir, una de las propulsoras de este movimiento. Ella dice: "Por primera vez hemos visto como la gente ha despertado, cómo no se han quedado en los refugios a pesar de ver los cohetes sobrevolando sus cabezas. Siempre se habla de la cuestión palestina, pero ¿cómo vamos a solucionar eso si no arreglamos los problemas internos de nuestra sociedad? Hay una conexión clara". Y te pregunto por este detalle: la protesta ha continuado incluso en estos días muy críticos que se vivieron hace poco, con incidentes entre palestinos e israelíes, con ataques terroristas, con muertos de los dos lados.
AJ Sí, acá hay dos puntos que creo es relevante mencionar. Por un lado, cuando se vivieron esos días de seria escalada, de numerosos misiles que caían disparados desde Gaza en el sur de Israel tanto en las ciudades del sur como en las localidades más pequeñas, en los kibutzim, las localidades colectivas del sur las protestas multitudinarias convocadas para esos días por ejemplo en la ciudad de Beer Sheva, que es considerada la ciudad más grande de la periferia en el sur de Israel fueron canceladas por órdenes de las autoridades del comando de defensa civil. Porque que caiga un misil cuando hay 10.000 personas reunidas en una plaza por supuesto que tiene más riesgo que cuando cada uno está en su casa, oye la alarma y se va a resguardar. El aspecto puntual es que las protestas se vieron afectadas.
Y además de esa advertencia concreta en los lugares que estaban bajo riesgo directo, también hubo por parte de la dirigencia de las protestas una decisión de hacer cierto intervalo, porque se estaba viviendo una situación de gran tensión.
Pero por otro lado, el tema de la seguridad es relevante en dos sentidos. El presupuesto nacional de Israel tiene un alto porcentaje destinado a la seguridad por razones obvias, por la situación en la que vive Israel en sus diferentes fronteras. Pero además se ha oído inclusive a altos oficiales que ya no están en servicio, oficiales retirados que ahora están en otras áreas de actividad. Hace poco leí un reportaje a un exoficial que al terminar su servicio militar decidió ir a la educación, diciendo que "la seguridad y las amenazas de Irán claro que son clave, pero no menos importante es atender las necesidades internas de la sociedad. Eso también es otro aspecto de la seguridad al que las autoridades deben prestar gran atención".
EC Para ir redondeando esta conversación, tú mencionabas que por ahora no parece haber habido resultados concretos en cuanto a abaratamiento del costo de vida, ¿qué pasa con la respuesta desde el Gobierno entonces?
AJ Como ya comentamos la otra vez, el Gobierno tuvo diferentes matices de reacción. Probablemente al principio las autoridades se sorprendieron, luego lo tomaron en serio, lo trataron de minimizar, hubo quienes también dieron a entender que se trataba de enemigos de Netanyahu que lo querían derribar. Pero en la última manifestación del sábado por la noche, por ejemplo, salió gente diciendo que había votado a Netanyahu, o uno que votó a Avigdor Liberman, el actual canciller, que es jefe de un partido que es considerado como más de derecha que elLikud, y que estaban junto a gente que seguramente votó a la izquierda. Lo político acá no es en el sentido partidario, no tiene nada que ver.
Por un lado, el Gobierno entiende que algo hay que hacer. Se nombró una comisión profesional que está estudiando seriamente el tema de la carestía de la vida y prometió que la víspera del año nuevo judío, que es el 28 de este mes, va a presentar su informe. Pero Netanyahu aclara constantemente que hay que equilibrar así lo dijo ayer nuevamente entre la sensibilidad social y lo que él llama la responsabilidad por el mantenimiento de la economía. Recordemos que Israel es una economía considerada estable, con un crecimiento fijo de más o menos 6% por año y un desempleo muy bajo. O sea que hay factores de estabilidad que Netanyahu quiere preservar, y él está seguro de que fue su política lo que permitió garantizarlos.
La pregunta es cómo va poder maniobrar entre esas convicciones suyas, que son evidentemente capitalistas y no socialistas, y el acceder a las demandas de los manifestantes. Ya dijo claramente, y en ese sentido los propios expertos señalan que tiene razón, que a todo no se va a poder acceder. La gran pregunta de fondo es si se va a poder romper el marco del presupuesto nacional para acceder a algunas de las exigencias, cuál va a ser el enfoque, el cambio nacional de prioridades. Lo seguro es que por un lado están quienes dicen que cambiar totalmente la forma de pensar de los miembros del actual Gobierno es algo casi imposible. Decía hoy uno de los más destacados analistas de la prensa israelí que en este Gobierno no va a haber un cambio radical, debido a que hay gente que está de cara a las nuevas elecciones y los resultados pueden ser diferentes, porque de fondo ya se encuentra esta protesta social que hay que tener en cuenta.
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