En concreto, se probarán en los choques frontales y los oblicuos.

El proyecto está financiado por la UE, que aporta 180 mil euros, y será desarrollado en Teruel (ciudad española situada en el sur de Aragón, España) por el Instituto de Investigación en Ingeniería de Aragón (I3A), perteneciente a la Universidad de Zaragoza.

Juan José Alba López, el coordinador del proyecto, también es investigador del I3A informó este martes al diario español ABC, que "el uso de cadáveres humanos para este tipo de ensayos ofrece una máxima fiabilidad en el análisis de los resultados".

Lo que se ha utilizado hasta ahora son los llamados "dummies", muñecos específicamente fabricados para este tipo de pruebas experimentales.
Pero, según el coordinador, el "sustituto" que más se aproxima a la realidad es el cuerpo humano, si bien hay menos de diez laboratorios en todo el mundo acreditados para realizar este tipo de ensayos.

Afirma Alba López que "una de las vías fundamentales de investigación que se van a llevar a cabo es comprobar que las lesiones producidas en un cadáver tras sufrir choques reales en máquinas de ensayo son similares a los que se obtienen en las simulaciones por ordenador".
 
Agregó que "se incidirá especialmente en la resistencia de la columna vertebral, todo ello con el fin de dar con soluciones técnicas que hagan más seguros los vehículos. Por cada ensayo realizado con un cadáver humano se salvan sesenta vidas y se evitan gran número de lesiones".

La Universidad de Zaragoza ha aclarado que, siguiendo procedimientos revisados por una comisión ética externa, los cuerpos que se utilizarán serán fruto de donaciones voluntarias.

Puntualizaron, así mismo que las familias serán informadas del programa de investigación, del interés social de la misma.

Los ensayos se realizarán en el Laboratorio de Tecnologías y Sistemas para la Seguridad de la Automoción (TESSA), ubicado en el parque tecnológico del circuito Motorland de Alcañiz (Teruel).

Este tipo de prueba no constituye una novedad.

En Estados Unidos, fruto de una investigación que llevó NBC Action News, se descubrieron en 2008, varios serie de videos, cientos de fotos, y miles de páginas de informes que detallaban el uso de cádaveres humanos en prueba de choque automovilistiscos por parte de la NHTSA, la Agencia Nacional de Autopistas y de Tránsito de EEUU.

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