Servicio Secreto se disculpa por accionar de agentes
El director el Servicio Secreto de EE.UU., Mark Sullivan, defendió este miércoles la integridad de su agencia tras el escándalo por la relación de varios agentes con prostitutas en Colombia, y aseguró que se trata de un caso aislado.
Sullivan compareció ante el Comité de Seguridad Nacional del Senado donde aseguró que el comportamiento de los agentes implicados "no es algo habitual" y garantizó que en ningún momento se vio comprometida su misión.
Los agentes estaban destacados en Cartagena de Indias (Colombia) para organizar las tareas de seguridad previas a la llegada del presidente de EE.UU., Barack Obama, quien iba a participar en la Cumbre de las Américas que se celebró en la ciudad colombiana el pasado abril.
En total, 12 agentes del Servicio Secreto están siendo investigados por haber salido a diferentes clubes nocturnos y haber mantenido encuentros con mujeres, algunas de ellas prostitutas, a las que llevaron al hotel donde iba a alojarse la comitiva presidencial.
La senadora republicana Susan Collins consideró que este comportamiento podía haber comprometido la misión de los agentes y afirmó que el hecho de que haya dos supervisores implicados le hace pensar "que esto no es un incidente único".
Sullivan señaló que "no hay ningún tipo de justificación para este tipo de comportamiento", pero aseguró que los agentes no tenían información sensible que comprometiera la seguridad del presidente Obama y tampoco tenían armas, radios o artefactos de seguridad en su habitación cuyo robo pudiera haber supuesto un peligro.
La senadora se mostró sorprendida, además, de que los agentes registraran a las prostitutas como invitadas para pernoctar en el hotel con sus nombres verdaderos, lo que muestra que "no tenían miedo de que alguien se diera cuenta o de que fueran a ser castigados por ello".
A preguntas de la senadora, Sullivan aseguró que, tras haber entrevistado a todas menos a dos, puede garantizar que las mujeres no pertenecen a ningún grupo terrorista como las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) o a servicios secretos de otro país.
"Es irónico sentir alivio al saber que se trata de prostitutas", dijo Collins.
La comparecencia fue convocada por el senador independiente Joseph Lieberman, presidente del comité, quien ha solicitado las actas disciplinarias de los últimos 5 años para analizar si hay algún tipo de patrón de comportamiento entre los agentes del servicio secreto.
Lieberman ha pedido medidas para que no vuelva a suceder otro caso como el de Cartagena y "restaurar la credibilidad" de este cuerpo que se encarga de la seguridad del presidente y del vicepresidente, así como de los candidatos presidenciales y de los mandatarios extranjeros en viaje oficial a Estados Unidos.
Según el diario The Washington Post, que cita fuentes no identificadas, este tipo de encuentros con prostitutas es algo habitual y se mantiene en silencio entre los propios agentes bajo el código no escrito de "lo que pasa en el camino, se queda ahí", algo que Sullivan negó tajantemente.
En este sentido lamentó que algunas informaciones de prensa se generan con fuentes anónimas y señaló que el Servicio Secreto gastó miles de dólares para investigar unas acusaciones similares en El Salvador, que finalmente no pudieron confirmarse.
El inspector general interino del Departamento de Seguridad Nacional de EE.UU., Charles Edwards, explicó, por su parte, que su departamento está revisando la investigación que llevó a cabo el Servicio Secreto tras conocerse el escándalo, cuyos resultados espera poder presentar a finales de verano.
"Voy a poner todos mis recursos para darle máxima prioridad", señaló Edwards, quien explicó que en paralelo se está llevando una investigación independiente para analizar si es un tipo de comportamiento asumido y en ese caso qué medidas tomar.
Esta semana se conoció además que las autoridades están investigando a tres empleados de la Agencia Estadounidense Antidroga (DEA).
Fuente y foto: EFE