(emitido a las 8.46 Hs.)

ALEJANDRO ACLE:
EEUU tuvo ayer su primer y único debate de candidatos a la vicepresidencia de cara a las elecciones de noviembre.

El actual vicepresidente, el demócrata Joe Biden y el candidato republicano a ese cargo, Paul Ryan, se encontraron anoche en la Universidad Centre College de Danville, Kentucky, en un cara a cara calificado de intenso. La situación en Irán, en Libia, en Afganistán, fueron algunos de los temas de la agenda internacional que estuvieron presentes. Pero también se tocaron asuntos de la agenda doméstica como la economía o el siempre controvertido tema del aborto.

"Creo que la vida comienza en la concepción, esas son las razones por las cuales soy pro vida, entiendo que este es un punto difícil y respeto a la gente que no comparte mi postura, pero la política de la administración Romney será oponerse al aborto, salvo en los casos de violación, incesto y riesgo de muerte para la madre", explicó Ryan.

La respuesta de Biden no se hizo esperar: "La vida comienza en el momento de la concepción, esa es la opinión de la Iglesia y yo la acepto en mi vida personal, pero me niego a imponer mi visión al resto de la sociedad, como mi amigo aquí presente", sostuvo el vicepresidente.

Para analizar lo que ocurrió en el debate, cómo queda el panorama electoral en EEUU de ahora en más, el contacto en los próximos minutos será con Juan Rial, politólogo uruguayo radicado en Nueva York.

¿A qué hora terminó el debate?

JUAN RIAL:
Acá terminó a las 22.30, o sea dos horas más en Montevideo.

AA – Fue un cara a cara más animado que el de Barack Obama y Mitt Romney de la semana pasada, ¿no? ¿Cuál es tu primera impresión de anoche?

JR – Quería comentar que hay una revista bastante conocida acá llamada New Yorker, más cercana a los demócratas que a los republicanos, en donde aparece en la tapa Romney frente a su podio y el podio que correspondería a Obama aparece vacío, replicando lo que ocurrió en la convención republicana donde Clint Eastwood le habló una silla vacía para indicar que en Washington no había nadie a cargo. Esa fue la impresión que se sacó en el debate anterior.

Ayer no fue así. Hubo un formato un poco diferente, no había podio sino una mesa propio de programa de periodismo político y en donde la compartían los dos candidatos a vice más la moderadora, una presentadora de la cadena ABC que se movió con mucha más soltura que su antecesor y le impuso un ritmo muy fuerte al  debate. En la práctica, Biden habló un minuto más que su contendiente, 41,36 segundos contra 40 de Ryan. Prácticamente no hubo pausas y todo el debate estuvo pautado por el intento de mejorar la posición de su candidato titular.

Cuando hay un debate entre candidatos a vice es fundamental que tengan que hacer resaltar a su personaje titular, no como ocurrió en el anterior en donde debatió también Biden, pero en frente tenía a una estrella naciente como la señora Palin.

AA – En este caso la tarea de Biden era levantar la imagen de Obama que había quedado bastante alicaída por su performance de la semana pasada.

JR – Exactamente. Sin embargo, hay que tener en cuenta una cosa: Biden es una persona cercana a los 70 años, él era senador en el año 73 cuando Ryan tenía 3 años, la experiencia de años de senador pesa. Biden es senador desde que tenía 30 años, perteneciendo siempre a los comités de relaciones exteriores y de justicia, pesó muchísimo para poder responder frente al joven Ryan, que sin embargo tuvo una actuación excelente y promete un gran futuro en su partido.

El debate tuvo un momento de risa cuando Ryan encontró la forma de responder a una acusación fuerte que le hizo Biden a su candidato. Ryan dijo que él no iba a gobernar para el 47% de los norteamericanos que viven de subsidios, de ayudas, sino para aquellos que realmente se preocupan de su propia vida. Luego dijo que a veces de la boca salen palabras que no son las más apropiadas. Esto provocó la hilaridad de casi todo el auditorio.

En el resto, Biden trató de rescatar cada uno de los temas a favor de su candidato. Trató de interrumpir, de controvertir las afirmaciones de Ryan, y en más de un caso apeló al lenguaje corporal sonriéndose frente a las afirmaciones de su adversario.

En los términos propios del debate hubo casi un empate. La CNN hizo la acostumbrada ronda de encuestas para ver quien había ganado y salía que Ryan estaría en 48% y Biden en 44%, que con el margen de error indica un empate.

Temas como los de política exterior donde se habló de Libia, la muerte del embajador de EEUU en Bengasi, el problema de Afganistán y el retiro de tropas para 2014 o antes, por qué se interviene o no en Siria, el problema de Irán y la bomba atómica eran muy fuertes para el vicepresidente Biden, sin embargo Ryan los logró manejar con bastante soltura.

A su vez, Ryan era fuerte en el tema de impuestos. Biden lo respondió desde el punto de vista social, lo mismo que en lo referido al delicado tema de la reforma de salud que impuso el presidente Obama, quien llegó a aceptar la calificación de ObamaCare que le hizo el candidato Romney. En este caso, Biden no aceptó ese nombre a pesar de que Ryan lo empleó varias veces.

Y finalmente, se trató el famoso tema del aborto. Los dos candidatos mostraron las diferencias fuertes que existen entre demócratas y republicanos, diferencias que apuntan a como ven a EEUU y su futuro en lo inmediato.

AA – ¿Cuánto pesa en la campaña electoral estadounidense un debate entre candidatos a vicepresidentes?

JR – Ni siquiera el de candidatos a presidente pesa mucho, es difícil entender para los uruguayos, y esto no se define con el voto popular, sino que el que elige al presidente es un colegio electoral. Cada uno de los candidatos del colegio electoral tiene que obtener por lo menos 270 votos, en total son 538 los integrantes para poder llegar a presidente. En este momento hay sólo nueve Estados en donde realmente se hace campaña. En el Estado de Nueva York se sabe que gana Obama, en California que tiene mayor número de votos en colegio electoral (55) también va a ganar Obama, pero en Texas que tiene 32 va a ganar Romney. O sea, en este momento hay 185 votos del colegio electoral para Obama y 155 para Romney, a Obama le falta 85 y a Romney 115 para llegar.

Los debates simplemente inciden indirectamente por su repercusión en los medios. Lo que importa ahora es ver qué pasa en el Estado más importante que es Florida con 28 votos electorales, Ohio con 18, Virginia con 13 y Colorado con 9.

La próxima etapa será el martes próximo en donde el debate será nuevamente entre Romney y Obama en Nueva York, en un pequeño pueblo del norte del Estado.

Hay que tener en cuenta otra cosa: no sólo importa la elección de presidentes, también importa la elección parlamentaria. De los 100 senadores, hay 33 que deben reelegirse o competir con nuevos candidatos. Por ahora habría 19 demócratas y ocho republicanos que obtendrían el asiento, pero hay seis en disputa. Con esos números el Senado sería demócrata. Pero en cambio, en representantes se reelige los 435 y probablemente la mayoría siga siendo republicano, o sea seguiremos teniendo un gobierno dividido.

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