Internacionales

El conflicto en la Franja de Gaza se cobró nuevas víctimas en la jornada del domingo

Contacto con Carmen Rengel, periodista española, colaboradora de En Perspectiva.


(emitido a las 7.47 Hs.)

EMILIANO COTELO:
La destrucción avanza a paso de gigante sobre la Franja de Gaza y a golpe de misil del ejército israelí. Las noticias sobre un posible alto el fuego, mediado por los egipcios, cobran cierta intensidad pero no acaban de cuajar. Ayer domingo, quinto día de la operación Pilar Defensivo, ha sido especialmente sangriento, los niños se llevaron la peor parte, hasta diez han muerto por los bombardeos, cuatro miembros de una misma familia. Son, según datos de France Press, parte de los 31 palestinos, muchos de ellos civiles, que han muerto solo ayer por las bombas que de momento no dan tregua y que mantienen aterrorizada a la población de Gaza.

Pero esto tiene dos partes y mientras tanto los cohetes palestinos han vuelto a sobrevolar la frontera que separa Israel de Gaza en dirección a Tel Aviv, ahora, dice la crónica del diario El País de Madrid, despegan desde casi cualquier lugar de la franja causando un enorme estruendo, salen desde atrás de un hotel, desde al lado de un edificio de viviendas. Ese es el panorama en una apretada síntesis en estas horas que se perfilan decisivas.

Cuando se puso en marcha este nuevo enfrentamiento estuvimos en contacto con Israel, teníamos la crónica de Ana Jerozolimski y hoy nos interesa mirar a la Franja de Gaza y para eso nuestro llamado va en este momento a la periodista española Carmen Rengel, a quien le damos los buenos días, ¿dónde estás exactamente?

CARMEN RENGEL:
Estoy en Gaza capital, en Gaza ciudad, cerca de la calle Alnacer, donde hace apenas media hora se estaba produciendo el entierro de la familia Al Dalu, la última gran víctima de este ataque contra Gaza que comenzó el miércoles pasado. Se trata de una familia de once miembros que murieron ayer cuando Israel lanzó el misil sobre su casa, entre ellos había cinco niños que tendrían entre 3 y 16 años, acabamos de dejar una capilla ardiente con los niños en las camillas envueltos en banderas palestinas, las madres llorándolos y con el pensamiento de por qué son ellos los que tienen que pagar en los conflictos armados, en este caso en ambos lados, pero en el lado palestino con víctimas mortales. Todavía está por aclarar si había algún miembro militante de Hamás dentro de esa vivienda, alguno de esos adultos, quizá no dirigente importante. La pregunta que se hacen todos los vecinos es si el medio de atacar al enemigo, en este caso es Hamás, es también matar a los que le rodean, estamos en un punto bastante duro porque ya alcanzamos la cifra de 83 muertos y más de 700 heridos, de esos el 90% son civiles, Israel asegura que en el último día ha alcanzado ya 90 objetivos, hablan de comisarías de policías, casas de entrenamiento de Hamas y de las Yihad islámicas, hablan también de puntos donde se estaban realizando lanzamientos de cohetes hacia ciudades israelíes como Rehovot, que en principio estaban más tranquilas, y esta mañana están llegando los cohetes y nos encontramos con una mezcla extraña de sentimientos dado que hay mucha población que sin ser miembro de Hamas y sin haberlos votado si quiera, se sienten robustecidos con esta respuesta tan firme que en principio la milicias le están plantando a Israel algo insólito, nunca habían llegado tan lejos con los misiles, nunca habían tenido tantos misiles para amenazar a la otra población, entonces creen que ahora es el momento en el que quizá puede mantenérselo, por eso están muy firmes con esas negociaciones de paz que parece que se están empezando a activar en el Cairo. Pero hay que decir que el sentimiento general es de muy poca esperanza, consideran que esta escalada va a ir a más y todo el mundo está preparado para cuando llegue la supuesta ofensiva terrestre.

EC – Es muy difícil en estos casos, y tratándose del conflicto entre israelíes y palestinos, cortar el círculo vicioso y saber donde empezó una etapa, cual fue el causante. Pero lo cierto es que había una tregua entre las dos partes hasta hace pocos días, el miércoles todo esto se precipita cuando Israel resuelve llevar adelante el asesinato selectivo del jefe militar de Hamás, pero a su vez lo hace en represalia por los disparos de misiles palestinos que estaban cayendo sobre territorio israelí. Entonces, ¿por qué estaba ocurriendo esto? ¿Por qué palestinos disparaban misiles sobre territorio de Israel antes de que se iniciara esa operación?

CR – Sí, hay que tener en cuenta que los incidentes entre Gaza e Israel son cíclicos y se repiten con muchísima frecuencia. Hay veces que los medios de comunicación hacen mediciones extrañas de cuantas víctimas consiguen ser noticia, ya no los contamos, pero cada dos meses tenemos incidentes en la frontera, tenemos ataques de las milicias a soldados israelíes que están patrullando, tenemos cohetes que están lanzando y la réplica de Israel que siempre se lleva por delante a milicianos pero también a civiles.

En este caso estamos ante un episodio muy similar, estaban lloviendo cohetes contra Israel pero a una distancia aproximada de entre 12 y 15 kilómetros, estaban sometiendo a esas poblaciones del centro y del sur pero llegado el momento en el que El Cairo había conseguido una tregua en la que ninguno de los dos dice perder, siempre dicen que se comprometen a no disparar siempre que no se sientan amenazados por el de enfrente, eso siempre da lugar a esos dos o tres meses de relativa calma. En este caso se había conseguido, pero no duró ni 24 horas, porque Israel decidió que era el momento de dar el golpe definitivo contra Jabari, el comandante en jefe de las brigadas de Hamás, un señor que llevaba más de una década de actividad terrorista, que había planificado algunos de los grandes ataques contra Israel y algunos de los logros más simbólicos de Hamás en los últimos años, como el secuestro de Gilad Shalit que estuvo cinco años en un punto indeterminado de la Franja de Gaza. Sufriendo ese secuestro, decidieron ir por él. Hay quien dice que para lanzar un mensaje muy severo a Hamás porque no consiguen controlar al resto de milicias menores de las franja, como el Frente Popular para la Liberación de Palestina, la Yihad islámica seguían insistiendo en hacer daño a Israel. Israel quiso parar eso de raíz y consiguió lanzar una operación a mucho mayor calado y se han encontrado con una respuesta que para ellos era esperada, quizá no tanto para su población, y es el hecho de que había encontrado muy fuertes a esas milicias con armamentos capaces de llegar a más de ese perímetro de entre 12 y 15 kilómetros. El primer golpe a 40 kilómetros al sur de Tel Aviv, un paso psicológico importantísimo de derrotas para unos y de victoria para otros, ya han llegado a más de 60 kilómetros marchando sobre Jerusalén, entonces se están dando cuenta que es difícil abandonar esa operación sin dar un golpe importante.

EC – Pero mi pregunta era por qué había disparos de misiles sobre territorio de Israel antes del miércoles pasado.

CR – La respuesta es la de siempre: el odio visceral contra Israel y el sometimiento y la orden de las milicias de seguir insistentemente con esa lluvia, alentada por un nuevo contexto regional. Hamás se siente muy avalada por el nuevo gobierno de Egipto, también han recibido visitas en las últimas semanas de una delegación del gobierno de Qatar, se sienten muy fuertes y es el momento de decir, con el mundo árabe ebulliendo con las revoluciones, que ellos también podían presentar batalla al enemigo en este caso externo, y eso ha acelerado las cosas.

EC – Estábamos hablando de las víctimas palestinas que viene dejando esta operación llevada adelante por el ejército de Israel, tanto los muertos como los heridos que se amontan. También hay muertos y heridos del lado israelí, pero los números son más graves del lado palestino. Israel argumenta que la causa de ese tipo de daños colaterales, como muchas veces se lo llama en una guerra, es que los milicianos palestinos lanzan sus cohetes desde lugares fuertemente poblados por civiles, de hecho están usando a los civiles como escudos humanos, lo denuncian como una práctica censurable. ¿Qué dices a propósito de esto y de cómo lo viven los  palestinos?

CR – La milicia de Hamás está totalmente imbricada entre la población. Hay edificios civiles en los que en una planta viven algunos dirigentes y se usan como almacenes o como puntos de reunión. Es cierto que hay edificios gubernamentales que están  localizados al lado de un colegio, un centro sanitario, una oficina municipal. Eso ocurre, en ese caso son objetivos que Israel "limpia" de forma quirúrgica, sus ataques están medidos porque tienen las coordenadas. El problema son los grandes barrios como en el norte de Gaza, en la zona donde nos encontramos, el hotel está rodeado por un campo de entrenamiento de Hamás, con lo cual se crean pequeños reductos de seguridad que en el fondo no son tales porque en el momento en el que llega ese impacto puede que destroce la comisaría de Hamás, pero deja sin defensa a los vecinos de alrededor. Es una práctica usada por todas las fracciones del mundo. Hay sentimientos encontrados en la gente, algunos se sienten cómodos, ya que para ellos es un orgullo tener mártires y combatientes dentro de sus propios bloques por simpatía.

Hay otra gente que se siente aterrada, que se está moviendo a casa de otros familiares, a barrios que no están controlados por Hamás.  Saben que es posible que algún misil caiga donde no debe y saben que la metralla puede ser muy dañina, incluso para una persona que sencillamente esté cruzando la calle.

Encontramos casas donde habitualmente viven cinco o seis personas y hoy hay treinta refugiadas, para evitar ser objetivo. Nos encontramos también a gente que está preocupada por el tipo de arsenal que puede haber en sus edificios, porque la intención de Israel es destruir todos esos cohetes de largo alcance, y dicen desde el gobierno que hasta que eso no ocurra no van a cesar esa ofensiva.

EC – Esto ocurre en la Franja de Gaza, donde gobierna el movimiento Hamás. Mientras tanto, ¿qué pasa en la otra franja, en Cisjordania, donde gobierna la Autoridad Nacional Palestina, donde gobierna Fatah?

CR – Estamos viviendo en estos días algunas manifestaciones de solidaridad con los hermanos de Gaza, como ellos dicen, hay gente que se quedó en Cisjordania cuando Israel decretó un bloqueo sobre la franja e impidió que nueva gente entrara y saliera después de la victoria de Hamás. El sentimiento es más fraternal que político, entienden que los que sufren son los civiles y el posicionamiento político intenta no ser muy marcado, pero también hay que tener en cuenta que Hamás en los últimos meses estaba ganando bastante seguidores en Cisjordania, algo que preocupa a la autoridad nacional. En el plano popular han habido manifestaciones muy tranquilas de apoyo, no estamos teniendo grandes incidentes, ha habido algunos heridos por enfrentamientos con el gobierno israelí, con los soldados del ejército israelí, pero son realmente menores y la duda está en cómo esta operación puede afectar al pretendido gobierno de unidad que lleva más de dos años intentando negociar entre más de 23 facciones palestinas, esencialmente Fatah que gobierna en Cisjordania, Hamás que gobierna en Gaza, y que todo el mundo ve de una forma muy lejana. Hasta que eso no ocurra no podrá haber elecciones y para ellos esta nueva operación hunde aún más ese sueño de tener de nuevo unidos a los dos territorios, algo que en 2007 con la victoria de Hamas quedó absolutamente truncado, sin conexión territorial, sin posibilidad de visitar a familiares, sin posibilidad de hacer intercambios educativos, académicos con las universidades, eso es algo que ya pesa mucho en el ánimo de los palestinos, están realmente entristecidos.

Y un factor importante dentro de las condiciones que explican el por qué de este momento de la operación lanzada por Israel, son los cohetes que estaban lloviendo sobre su territorio. ¿Por qué la virulencia de Israel? Hay elecciones en enero, eso no hay que olvidarlo, y muchos analistas aseguran que Benjamin Netanyahu quería reforzar su autoridad.

Pero hay otro punto importante, el día 29 de noviembre se votará en la Asamblea General de Naciones Unidas el acceso de Palestina, el reconocimiento como Estado, sería la primera vez que legítimamente se le da el estatus de Estado a Palestina, aunque no tenga fronteras definidas. Para ellos es muy preocupante lo que está ocurriendo, porque si el terrorismo de las milicias palestinas hacen mucho daño en Israel y hace que la comunidad internacional se termine alineando con el derecho legítimo a la defensa de los israelíes, tendrán menos votos en esa asamblea. Inicialmente creen que van a conseguir los votos necesarios, pero no solo quieren un voto en número, quieren votos de calidad, creen que habrá muchos países importantes de América, de Europa, que les den ese sustento. Políticamente eso preocupa mucho, creen que va a quedar muy descafeinada la votación de finales de este mes.

EC – ¿Se ve factible una tregua en Gaza o se espera la invasión? Porque la otra gran posibilidad es una invasión de Israel en ese territorio.

CR – Se teme más la invasión. Con unos medios muy sesgados y donde la propaganda sigue teniendo un peso importantísimo, se habla constantemente de derribo de aviones israelíes, de soldados secuestrados, algo que está negado por las fuentes militares israelíes, se hace mucha insistencia en el gran despliegue de tropas que hay en la frontera, en donde se ha sustituido a unidades regulares con unidades de elite, en que es inminente el asedio de la franja. Con esos rumores, la gene que ya tiene una experiencia vital importante de ofensivas como la de hace cuatro años, siempre teme lo peor y se esté preparando para lo peor. Siendo realistas, las posiciones están  muy encontradas. En el diálogo que se está llevando a cabo en El Cairo, las posturas son irreconciliables. Israel plantea que quiere un alto el fuego absoluto, y la seguridad para sus ciudadanos. Hablamos más de cinco millones de israelíes bajo ese círculo de peligro de los cohetes de Gaza. Las milicias de Gaza se niegan a esto, ellos quieren el cese de ese cerco que se establece sobre el territorio después de la victoria de Hamás y también la afirmación de que Israel no va a volver a atacar objetivos de alguna de estas facciones. Desde luego que lo que dice uno es lo contrario a lo que dice el otro.

Las delegaciones que están destinadas en este momento en El Cairo tienen poca fe de avanzar. El presidente norteamericano Barack Obama decía ayer que él esperaría 24, 36, 48 horas y que sería un plazo razonable para conseguir algo. La gente no cree en las palabras de Obama, piensan que la ofensiva va a ser dura, que el hecho de que llevamos dos noches con bombardeos también desde el mar con la armada israelí  denota que esta escalada crece y no que se aminora. La esperanza realmente es bastante poca.

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