(emitido a las 8.42 Hs.)

ALEJANDRO ACLE:
Italia está viviendo días de incertidumbre. Durante el fin de semana, el primer ministro, Mario Monti, reaccionó ante un nuevo cuestionamiento del partido de Silvio Berlusconi, anunció que abandonará su cargo después de que se apruebe la ley de presupuestos para 2013, y dejó en duda si se presentará a las elecciones que se llevarán a cabo en el mes de febrero, antes de lo previsto.

Mientras tanto, Berlusconi se prepara para ser candidato nuevamente.

Tras conocerse estas novedades el panorama político y principalmente económico se vio convulsionado. Por ejemplo, la prima de riesgo de la deuda italiana se disparó, mientras que los mercados europeos han vivido momentos de inestabilidad.

Vamos a conversar en los próximos minutos con Mario Lubetkin, nuestro corresponsal en Roma, que por estos días se encuentras en Uruguay.

EMILIANO COTELO:
Mario, buen día, gracias por acompañarnos.

¿Qué te parece si empezamos por ubicar las características especiales del gobierno encabezado por Mario Monti? Se le ha llamado gobierno técnico, gobierno de tecnócratas.

MARIO LUBETKIN:
Es un gobierno que agarró los destinos de Italia al punto de la bancarrota hace trece meses y que con una serie de medidas extraordinariamente duras, basadas en un conjunto de impuestos muy fuertes, fue reequilibrando el escenario y ganando la confianza del escenario europeo y de los mercados, colocando a Italia en una situación sustancialmente diferente de la que se encontraba hace trece meses. Si bien, como hablamos en más de una oportunidad, el país no ha despegado del punto de vista económico, como es el caso de la mayoría de los países europeos.

AA – Yendo a la renuncia de Monti, ¿por qué se produce? ¿Cuáles son las razones que alegó el primer ministro?

ML – En estos trece meses fue un gobierno muy extraño, era un gobierno de técnicos respaldado por las fuerzas de centro derecha, de centro y una parte de fuerzas de centro izquierda, nunca se había dado nada parecido. Y sucedió que hace unos días, el entonces secretario del partido del ex primer ministro Berlusconi anunció el retiro de la confianza al primer ministro, dejando que los otros dos grupos políticos que apoyaban a Monti se mantuvieran o no respaldando al gobierno, pero sobretodo pasando a Monti la decisión de si él iba a continuar con los otros dos partidos que le prestaban el apoyo parlamentario o iba a renunciar. Anunció que va a renunciar, el juego vuelve a punto cero en pleno proceso de campaña electoral.

AA – ¿Y cuáles serían las consecuencias de este movimiento? Te lo digo pensando en la situación de crisis que vive Italia y varios países de la región, de la Unión Europea

ML – En primer lugar este proceso de campaña electoral, recuerda que ahora las elecciones van a ser adelantadas y se harán en el mes de febrero, posiblemente el 17 de febrero, contiene dos elementos a tomar en consideración y son los aspectos que hay que seguir en este proceso electoral que de hecho ya inicia con la renuncia de Monti el próximo 21 o 22 de diciembre.

Primero, esta va a ser una campaña electoral muy de corte europeo, ya que toda Europa tiene claro que la densidad de la estabilidad italiana es fundamental para mantener la estabilidad europea. Recordemos lo que pasaba hace doce meses donde si bien un conjunto de países había caído en una situación dramática desde Irlanda a Grecia, y España estaba al borde, se sabía que si Italia iba en esa situación se derrumbaba el euro, por ejemplo, cosa que en este momento no está planteada ante la estabilidad italiana. Por lo tanto, estas elecciones van a ser vistas particularmente por Europa y van a ser jugadas en Europa y no solamente en Italia, porque van los destinos de Europa y la economía europea en estas elecciones. Por eso, desde el primer momento los principales líderes europeos han expresado su confianza en Monti y han salido a atacar, cosa que yo no había visto en ninguna elección anterior en Italia, la decisión de Berlusconi de quitarle su apoyo a Monti y de lanzarse en campaña electoral.

Y la segunda clave que creo que va a ser la clave de lectura de lo que puede pasar en este período es si definitivamente el ciclo Berlusconi iniciado en el 1994 va a terminar o no. Como ustedes habrán seguido las últimas semanas, Berlusconi primero anunció que se retiraba de la vida política, y después cuando le iniciaron algunos procesos extraordinariamente duros y fue condenado, inmediatamente volvió al escenario político. Varios observadores lo señalan porque esto se relaciona con su inmunidad parlamentaria y política, y lo que está en discusión ahora, en función de todos los movimientos que se están dando en las últimas horas, es si Berlusconi puede resurgir de las cenizas o si este proceso electoral será el fin de una era de 20 años en Italia.

AA – Después de todos estos escándalos judiciales, ¿cuáles son las posibilidades concretas de Berlusconi para volver al poder?

ML – Los estudios son de hoy y dan la primera encuesta que midió el anuncio que él hizo la semana pasada contra buena parte de su partido, parte del centro derecha, y contra buena parte de Europa, y  del sistema económico, financiero y social italiano. Le dan un 13%, 15%, pero este es el inicio de la campaña.

Pocos piensan que él tenga alguna chance, pero yo diría que el nivel de presión que hay alrededor de Berlusconi, inclusive como anécdota comento que anoche hubo una reunión entre Berlusconi y el líder del grupo separatista la Liga Norte, para crear una alianza para la campaña electoral. La Liga Norte le señaló informalmente que si él es el candidato, ellos no van a ir en alianza. Recordemos que durante larguísimos períodos tuvieron alianza electoral y gobernaron el país conjuntamente.

Por lo tanto, las señales que está recibiendo Berlusconi son extraordinariamente duras y desfavorables a sus intereses. Hoy es el candidato, está poniendo toda su capacidad, su poder económico y su poder de los medios. Está apareciendo en televisión todos los días con entrevistas del tipo de que poco importa el riesgo país. Como tú señalaste en la introducción, la economía y el mercado reaccionaron muy negativamente a su decisión de entrar en campaña, él respondió diciendo "poco importa el riesgo país en el destino de Italia". Todos esos elementos se están poniendo en su contra. Y yo diría que inclusive dentro de la lectura que tenemos que tener del escenario italiano, no estaría totalmente asegurado que él no se baje de la campaña y finalmente no sea candidato. Eso lo sabremos en los primeros días de enero de 2013.

Pero hoy él es el candidato, hay un gran movimiento de ajedrez en todo el escenario italiano. Pero como están planteadas las cosas, quien triunfaría si las elecciones fueran hoy sería la coalición de centro izquierda encabezada por el líder del Partido Democrático, Luigi Bersani.

AA – Esas declaraciones a las que hacías referencia de Berlusconi son curiosas. Se refirió a la prima de riesgo como una estafa, una invención urdida por Alemania con la ayuda de Mario Monti. Con respecto a las perspectivas para Italia a partir de ahora, ¿qué puede pasar de acuerdo a los resultados de las elecciones?

ML – Hay que ver cómo se desarrollan las elecciones, hay que saber si el primer ministro renunciante, o futuro renunciante, Mario Monti, va a salir a la campaña electoral y va a liderar los grupos de centro político, o si él va a decidir preservar su imagen. No solamente hay elecciones parlamentarias en Italia dentro de unos meses, hay elecciones para la figura de primer ministro, elecciones comunales, elecciones regionales; también hay elecciones para el presidente de la República. O sea, hay un rediseño del país en los próximos cuatro o cinco meses, por lo tanto, estamos al inicio de entender cómo se mueve este tablero de ajedrez y en este caso una de las preguntas que está planteada es si el presidente del consejo, Mario Monti, se va a presentar liderando el centro.

Si fuera así, una de las perspectivas que están planteadas dentro de los diferentes escenarios hipotéticos, es que se establezca un gobierno a partir del mes de febrero en una alianza entre los grupos de izquierda, centro izquierda y centro, con un corte particularmente europeo y de mantenimiento de ciertas tendencias económicas. Que es de hecho a lo que está apostando hoy Europa, por los movimientos y las reacciones que hemos escuchado en las últimas 24 horas. Pongo el caso, tu lo señalaste, de la jefa del gobierno alemán, [Ángela] Merkel, que dijo sin señalar a Berlusconi que Alemania no va a aceptar que la campaña electoral interna en Italia sea anti alemana ni anti europea, y que está convencida de que los italianos tienen un equilibrio político extraordinario como para entender cómo impulsar el futuro escenario político económico de Italia.

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