(emitido a las 8.47 Hs.)

ALEJANDRO ACLE:

El Partido Socialista Unido de Venezuela, liderado el presidente Hugo Chávez, arrasó ayer en las elecciones regionales al lograr 20 de las 23 gobernaciones del país

El vicepresidente Nicolás Maduro, presidente en funciones del país mientras Chávez se recupera de una operación en Cuba, consideró que el pueblo le dio un "regalo de amor a su comandante".

AUDIO NICOLÁS MADURO:
"Hoy el pueblo ha premiado la verdad, ha premiado la perseverancia, y además le ha dado un regalo de amor al comandante Hugo Chávez. Hoy el pueblo no le falló a Chávez como Chávez nunca le ha fallado al pueblo. Y ahí está, inmensa victoria, una victoria histórica, gigantesca, gigantesca"

Estamos en comunicación con Omar Lugo, colaborador de En Perspectiva desde Caracas.

Omar, si te parece empecemos por ordenar brevemente que se estaba votando ayer.

OMAR LUGO:
Ayer estaba en juego la administración de los estados del país. Son elecciones que se repiten cada cuatro años y se llevaron a cabo apenas dos meses después de la contundente victoria del presidente Hugo Chávez para un nuevo período presidencial, que como sabemos está en duda si lo puede asumir o no.

La oposición organizada en la Mesa de la Unidad Democrática, una coalición de partidos de centro, de derecha, de izquierda, de social cristianos, de social demócratas, sufrió una aplastante derrota, perdió bastiones importantes, varios de los estados más populosos y más ricos del país quedaron en manos del Gobierno. Es decir, no se trataba solamente de un trámite administrativo, sino también de otra medición de fuerzas entre dos bloques, dos modelos, y dos formas de hacer política.

Es un mapa que se pinta totalmente de rojo, los colores del oficialismo, y solamente quedan tres estados en manos de la oposición. Perdieron el estado Zulia, el estado petrolero por excelencia del occidente, en la frontera con Colombia, y donde el candidato fundamental era Pablo Pérez, que a su vez había sido pre candidato presidencial de la Mesa de la Unidad Democrática para las elecciones pasadas, pero fue derrotado por Henrique Capriles, quien ha logrado defender un importante bastión de la oposición, el estado Miranda, uno de los más populosos del país. Esto lo plantea como el líder de la oposición en medio de esta derrota.

AA – ¿Cuánto influyó en este resultado la salud de Chávez?

OL – Influyó mucho, lo dijo Nicolás Maduro al referirse como un regalo para el presidente. Ayer, en plena votación, cuando la gente todavía estaba dudosa para votar, hicieron un paso en vivo desde La Habana con el ministro de Ciencias, Arreaza, para dar un parte médico y llamar a votar por el proyecto del presidente Hugo Chávez. Diciendo que el presidente agradecía a sus seguidores que fueran a votar para mantener los logros del Gobierno, y para mantener su propuesta.

Es decir, el factor emocional en torno a la figura presidencial otra vez fue importante y también fue muy aprovechado por la maquinaria del Gobierno, la maquinaria del control de los medios de comunicación a través de cadenas obligatorias de radio y televisión y también con la inyección de enormes recursos financieros en todos los estados, básicamente, del Gobierno central, dinero del petróleo invertido en estas elecciones regionales, donde la estrategia oficial era pulverizar lo que quedaba de la oposición después de la derrota de octubre.

AA – Pero antes de que se revelara el estado de salud de Chávez, antes de que viajara a La Habana para esa intervención quirúrgica, ¿qué decían las encuestas?, ¿había una ventaja tan grande del oficialismo?

OL – No se veía tan grande, decían que la oposición podía mantener bastiones fundamentales como el estado Carabobo, en el centro, el estado Zulia, del que ya hablamos, que al menos iba a conservar los Gobiernos que tenía. Tenía entre siete y ocho gobernaciones y ahora le quedan tres.

También influyó mucho la abstención, aunque no tanto como se pensó al principio. Al mediodía solamente habían ido a votar el 30%, 33%, en promedio, de los electores registrados. A última hora los propios líderes, tanto de la oposición como del Gobierno, comenzaron a llamar a la gente a que saliera a votar, y se estima que por la resaca de las fiestas de fin de año y ocupaciones personales, la gente se levantó después del mediodía, y logró disminuirse la abstención hasta un nivel más o menos promedio del histórico.

Lo cierto es que en estos bastiones importantes en que perdió la oposición fue una paliza. Estados como Zulia, Carabobo y Táchira -en la frontera con Colombia, un estado andino-, eran importantísimos para ellos.

Ahora se plantea un reacomodo de fuerzas. Por el lado del chavismo, el único técnicamente derrotado fue el ex vicepresidente Elías Jaua, que hace poco estaba en el cargo de Nicolás Maduro, quien tenía la encomienda de conquistar Miranda y enterrar al gobernador Henrique Capriles, quien fuera derrotado en las elecciones presidenciales y  regresó a la gobernación. Si hubiese sido derrotado allí, hubiera sido una aniquilación para la oposición. Esta fue la victoria más importante que ellos se atribuyen de las tres gobernaciones, porque mantiene viva la opción de Henrique Capriles si hay unas elecciones presidenciales extraordinarias por motivos de salud, como el propio presidente Hugo Chávez lo ha dejado ver.

Otro detalle interesante: once Gobiernos regionales están en manos de militares, retirados casi todos, pero personas de formación y de origen militar en el Gobierno.

AA – En las últimas horas, la oposición ha puesto en duda la transparencia de los comicios. El secretario general de la Mesa de la Unidad Democrática, Ramón Guillermo Aveledo, dijo que van a solicitar que se revisen las actas electorales en los estados donde fueron derrotados por un margen muy estrecho. ¿Cuánto andamiento puede tener esas iniciativas?, ¿puede pasar algo que cambie los resultados?

OL – Es muy complicado que logre un cambio. El estado más disputado es el de Bolívar, un estado grande, de unos 400.000 kilómetros cuadrados que queda en la frontera con Brasil. Es un estado industrial donde hay muchas empresas de aluminio, de acero y mucha energía eléctrica, pero que tiene muchos conflictos sindicales de trabajadores que le reclaman al Gobierno el pago de deudas atrasadas. Es un estado que está técnicamente paralizado, y esto afectó mucho al Gobierno, pero la oposición por un punto porcentual no se lo arrebató. Por ese estrecho margen podría haber revisión. En los demás muy difícilmente, esto es un sistema electrónico que supuestamente es infalible, el argumento oficial que muchas veces es discutido por la oposición. Aparte de eso habrá que revisar los números, según ha dicho Aveledo, pero no hay nada significativo que permita revertir la tendencia dominante: que fue de una victoria aplastante de la opción de los candidatos del Gobierno.

AA – Por último, ¿qué dicen las últimas informaciones sobre el estado de salud de Chávez?

OL – Después del reporte que se hizo ayer en medio de la jornada electoral, diciendo que el presidente se estaba recuperando, que había comenzado a gobernar de nuevo desde La Habana, y que estaba llamando a su pueblo a que saliera a votar para que le dieran ese regalo de participación de consolidar el proceso. Esa fue la última intervención, hecha por el ministro de Ciencia, Jorge Arreaza, quien es yerno del presidente, está al lado con su familia cuidando, pendiente de la evolución. Después de ese parte médico en medio de la jornada electoral no ha habido nuevas informaciones. Tampoco se esperan mucho porque no son tan recurrentes, sin embargo, comparado con el secretismo con el que era llevado el tema de la enfermedad, ha habido grandes avances para el pueblo, para la gente en Venezuela, en términos informativos. Con un margen de uno o dos días de diferencia se están emitiendo algunos informes oficiales sobre la evolución del paciente. Aparentemente se está recuperando bien y podría retornar al país antes del 10 de enero, que tendría que estar aquí para asumir el mando. Sin embargo, algunos comentarios críticos han dicho que si está tan bien, por qué no agarra el teléfono directamente y emite su propio mensaje, en vez de hacerlo a través de terceras personas. Sin embargo, todos los venezolanos estamos esperando que se recupere y que asuma el mando y que el curso político de la historia continúe como tiene que continuar.  

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