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La renuncia de los cinco ministros de Berlusconi en el gobierno de Enrico Letta desata una nueva crisis política en Italia

Contacto con Mario Lubetkin, colaborador de En Perspectiva en Italia.


(emitido a las 9.20 Hs.)

EMILIANO COTELO:
En Italia acaba de desatarse una nueva crisis política; y otra vez Silvio Berlusconi es protagonista de primera línea.

"Como consecuencia de la invitación del presidente [del partido Pueblo de la Libertad] Berlusconi de que dimitamos del gobierno por las conclusiones que el Consejo de Ministros del viernes alcanzó sobre temas de justicia y fiscalidad, consideramos que no existen las condiciones para quedarnos en el Ejecutivo, donde hemos trabajado por el interés del país y con respeto al programa del Pueblo de la Libertad". Así dice la carta que presentaron el sábado los cinco ministros que integraban el gobierno del primer ministro, Enrico Letta, en representación del partido que lidera Berlusconi.

¿Qué implica esta crisis?, ¿qué consecuencias puede tener para el futuro de Italia en los político, en lo financiero, en lo económico? Vamos a ubicar además estos hechos en el contexto de Europa. Para eso estamos en comunicación con Mario Lubetkin, director general de la agencia Inter Press Service, colaborador de En Perspectiva.

En primer lugar, una precisión, ¿esta renuncia de los ministros de Berlusconi significa que cae el gobierno y que nuevamente hay elecciones anticipadas?

MARIO LUBETKIN:
Bueno, eso lo sabremos el miércoles, cuando el actual primer ministro, Enrico Letta, se presente en el Parlamento para verificar si tiene los votos para mantenerse en su cargo o no en esta democracia parlamentaria. Estas 48 horas son decisivas, no solamente para el futuro de este gobierno sino para el futuro del escenario político italiano por todo un período.

EC – Letta ha decidido ir en busca de una moción de confianza en el Parlamento, ¿por qué siguió ese camino?

ML – Tú leíste una carta de los ministros del día sábado, pero el día domingo los ministros renunciantes cambiaron su posición y se han parado de una forma muy crítica con la decisión de Berlusconi de solicitarles que se alejen del gobierno. Digamos que se ha abierto una crisis muy severa dentro de la centroderecha ya que una parte importante –aparentemente, porque todo esto se está jugando en estas horas– estaría en contra de la decisión de Berlusconi de retirar a sus ministros y hacer caer a este gobierno. Por lo tanto en estas próximas horas se sabrá si efectivamente el malestar interno se transforma inclusive hasta en una división de la propia centroderecha.

Los escenarios pueden ser muchos, por eso el actual primer ministro quiere dejar pasar 48 horas para ver cómo se acomoda el escenario y probar a mantenerse en el gobierno, algo que significaría mucho más que mantenerse en el gobierno, significaría una derrota extraordinaria del exprimer ministro Berlusconi de frente a una decisión muy fuerte que tomó el sábado al solicitar el retiro de su gente del gobierno.

EC – Avancemos un poco más, examinemos por qué se produjo esa renuncia en este momento, o por qué Berlusconi les pidió a sus ministros que renunciaran ahora, este fin de semana, ¿qué es lo que está detrás?

ML – En la forma sería porque en una reunión del Consejo de Ministros del día viernes no se aprobaron las medidas para detener el aumento del IVA que a partir de mañana 1° de octubre pasa de 21% a 22%. Supuestamente eso habría determinado que el exprimer ministro Berlusconi le haya pedido a su gente que se retirara, de frente a teóricamente la falta de cumplimiento de los pactos por parte del gobierno de Letta.

Pero la verdad es lo mismo que venimos hablando hace unos meses: se aceleran los tiempos para la detención de Berlusconi y él ha tomado dos medidas muy fuertes, pedirle a todos sus parlamentarios que renuncien u después pedirle lo mismo a sus ministros, cuando esta semana el Parlamento debe decidir el alejamiento de Berlusconi, la aplicación de las medidas legales de su salida como senador y su exclusión de la vida política del país.

EC – Esta es una decisión que tiene que tomar el Congreso, que tiene su origen a su vez en la primera condena firme que pesa sobre Berlusconi, que viene del 1° de agosto, cuando fue condenado a cuatro años de prisión por un delito de fraude fiscal. Después los cuatro años se redujeron a uno y debido a su edad (tiene 77 años), Berlusconi no irá a prisión, pero esa sentencia es la que precipita después estas otras consecuencias a nivel político.

ML – Esa es la sensación que tienen los observadores mirando cómo se está dando el escenario. Simplemente se ha desarrollado todo de una forma muy dramática y de hecho lo más notable es que un país tan importante como Italia esté absolutamente paralizado por la suerte de una persona. Creo que no hay sistema democrático en Europa que haya visto algo parecido a lo largo de los tiempos. Por lo tanto se hablaba de que más que medir el desarrollo de los acontecimientos en las próximas 48 horas porque determinarán si el primer ministro Letta tiene las condiciones para seguir gobernando, la lectura que tenemos que hacer es cuál va a ser el efecto para el futuro de Berlusconi si, pese a haber tomado una medida tan grave como la de retirar a sus ministros, este gobierno sigue de cualquier manera. Inclusive con el apoyo de una parte de su grupo parlamentario, porque sin el apoyo de una parte de ese grupo Letta no tendría los votos en el Senado para poder mantenerse en su cargo actual.

EC – Yo repasaba algunos de los titulares, de los calificativos, que en la prensa italiana se han publicado a propósito del gesto de Berlusconi. Algunos han hablado de locura, otros han dicho: "Es indigno, el condenado hace naufragar a Italia", y podríamos seguir con las frases con las que se ha cuestionado al líder del Pueblo de la Libertad. ¿Por qué?, porque el momento económico por el que atraviesa Italia es muy frágil. ¿Pasamos ahora a ver esa otra dimensión de todo ese debate?

ML – Sin duda es el efecto. Esta mañana las bolsas abrían de una forma muy negativa para la economía italiana, aumentó dramáticamente el riesgo país, por lo tanto los inversores están viendo toda esta situación con mucho escepticismo. Inclusive lo más emblemático es que en la bolsa las empresas de Berlusconi cayeron dramáticamente en sus resultados de estas primeras horas, lo que demuestra que el mercado está dirigiendo claramente la acusación de quién está generando escenarios de inestabilidad en el campo económico-financiero.

Al mismo tiempo si efectivamente se genera la parálisis del país con la caída del gobierno de Enrico Letta, se activan muchos mecanismos: el aumento del IVA a partir de mañana, otro de los temas en debate que era el impuesto a la primera casa que había sido retirado y que automáticamente vendría -porque no están los tiempos parlamentarios como para poder hacer la doble sanción- y la financiación del seguro de paro para una parte de esos millones de personas que están desocupadas y que están sin la protección del seguro de paro que tenía que ser financiada en estos días. O sea, se activan una serie de mecanismos y de impactos sociales de enorme importancia para el futuro económico-social de este país.

Finalmente hay que ver cómo la Unión Europea (UE) sigue manteniendo la presión tan grande sobre Italia, sobre todo por el hecho de que Italia está superando apenas la barrera del límite del déficit que la UE acepta, que es de tres puntos. Esto determinaría que inclusive existe la posibilidad de que la UE actúe directamente en los destinos de la economía italiana, y esto, está de más decir, afectaría, y cómo, a todo el escenario político europeo y por lo tanto al euro en función del peso que Italia tiene en ese escenario.

EC – El triunfo de Angela Merkel, la votación tan alta que obtuvo en las elecciones del otro fin de semana en su país, su consolidación como líder en Alemania, ¿cómo juega?

ML – Sin duda lo que triunfó en Alemania es la política de austeridad europea liderada por Alemania y el mantener el euro en ciertas condiciones. Lo que lleva a todos estos países, sobre todo del Mediterráneo, a tener menos márgenes como para poder moverse en escenarios económicos tal frágiles.

Pero yo señalaría dos aspectos. Primero desde el punto de vista económico el triunfo de Merkel es una decisión de una cierta forma de estabilidad que es la que se llevó adelante en estos años, con el precio que están pagando sobretodo los países del Mediterráneo sur, Grecia, Portugal, España, Italia, etcétera. Pero el segundo aspecto increíble y casual es que la presidencia de la UE va a estar el primer semestre del próximo año en Grecia, y el segundo en Italia, entonces en este cuadro de inestabilidad política y económica podemos comenzar a ver qué tipo de liderazgo podrá tener Europa en el 2014 de frente a estos escenarios de cambio negativo que se están verificando.

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