Esto pasó cuando participaba de un acto, ante miles de personas, en el mausoleo del Che Guevara, en la ciudad de Santa Clara. Cuando se bajaba de una pequeña tarima se resbaló y cayó.

Inmediatamente,  los escoltas armados se le fueron arriba para ver qué había pasado, y quedó tirado en el piso unos instantes en medio de una gran confusión.

Según el examen médico, se fracturó la rodilla izquierda y se fisuró el brazo derecho.  Pero aunque se notaba que estaba dolorido, se acomodó en una silla y pidió un micrófono para aclararle a la multitud qué le había pasado y -más que nada- para tranquilizar a la gente sobre su estado de salud.

Frente a las cámaras, pidió perdón a la gente por haberse caído y para que eludir especulaciones dijo: "estoy entero".

Después pidió que el acto siguiera y que se lo llevaran en auto. Además, quiso ver las fotos de la caída.

Fidel tiene 78 años. Y a pesar de que su salud es buena, hace tres años se desmayó mientras hablaba en un acto en La Habana. Esa vez fue atribuido al calor y al sol excesivo.  Esa vez también apareció en la tele dando su versión del desmayo, tranquilizando a la gente y diciendo que tenía salud para rato.