Consiste en un generador de audio, un amplificador y un mecanismo que direcciona la emisión de las ondas que desplazan el oxígeno de la zona en llamas.

Con este nuevo dispositivo creado por Viet Tran y Seth Robertson, únicamente con un parlante y un equipo de sonido especial se podrá extinguir el fuego.

El secreto está en que el aparato emite ondas de baja frecuencia (entre 30 a 60 hertz) y desplaza el oxígeno de la zona incendiada.

Algunas de las ventajas que tiene frente a otros prototipos: es de menor dimensión, no deja residuos, ni depende de un tanque lleno de ninguna sustancia.

Según un informe de "The Washington Post"; ya hay estaciones de bomberos que se postularon como voluntarios para probar el dispositivo. Por el momento, sus creadores lograron apagar un pequeño foco iniciado con alcohol.