Argentina marchará hoy bajo la consigna "Ni una menos", donde varios casos de feminicidio conmocionaron al país, entre ellos el de una adolescente de 14 años embarazada y el de una joven de 22 años, a quien su pareja la roció alcohol y le prendió fuego durante una discusión.

La presidenta Cristina Fernández dijo a través de su cuenta twitter que "no es sólo un problema judicial o policial. Estamos ante una cultura devastadora de lo femenino"; y agregó: "La mujer convertida en objeto: Y si entonces es sólo una cosa, siempre habrá alguno que piense que puede romperla";.

En coincidencia con estas marchas, en Brasil la presidenta, Dilma Rousseff, afirmó ayer que "toda la sociedad es agredida cuando se ataca a una mujer" y reclamó "tolerancia cero";.

En tanto, la atención en Paraguay sigue volcada en el caso de una niña de 10 años embarazada presuntamente tras ser violada por su padrastro, lo que reabrió el debate sobre el aborto y ante lo cual un grupo de expertos de la ONU denunció al país por "no cumplir con su responsabilidad de actuar con la debida diligencia".

Además, el gobierno lanzó una campaña y planteó dentro de un proyecto de ley de protección integral a las mujeres aplicar sanciones a quienes comentan acoso en la calle.

Esa misma línea siguió Bolivia, que aprobó varias leyes contra el acoso tras reportar las tasas más altas de Latinoamérica en violencia física hacia las mujeres y ser el segundo después de Haití en violencia sexual en América.

Además, en 2013, Bolivia aprobó una ley que condena el feminicidio con 30 años de cárcel sin derecho a indulto, la pena más alta de la legislación del país andino.

En Colombia, el domingo se realizó la marcha contra el feminicidio "Ni una rosa más", con motivo de los tres años de la muerte de Rosa Elvira Cely, quien en 2012 fue violada, torturada, empalada y asesinada en un parque de la capital.

Y anoche la Cámara de Representantes aprobó una ley que castiga hasta con 50 años de cárcel a quien cometa feminicidio.