EFE

El primer ministro griego, Alexis Tsipras, anunció ayer la imposición de un control de capitales y un feriado bancario temporal, pero afirmó que "el ahorro de los ciudadanos, los salarios y las jubilaciones están garantizadas", al mismo tiempo que pidió a la población guardar la calma. "Se habla de un corralito similar al que ocurrió hace algunos años en varios países sudamericanos, pero muchos olvidan que tuvo como responsables a los custodios del sistema. En el caso de Grecia la población está de acuerdo y hasta apoya la medida porque la Unión Europea intenta que los griegos no voten en el referéndum" para ver si las islas permanecerán o no en la eurozona, dijo a El Espectador nuestro corresponsal en Europa Julio Alonso.