"Si Temer logra imponer reformas es difícil que Dilma vuelva"
El presidente interino de la Cámara de Diputados de Brasil, Waldir Maranhão, el mismo que ayer anuló la votación por la cual se había dado inicio al impeachment contra la presidente Dilma Rousseff, revocó su propia decisión a la medianoche. Daniel Rittner, colaborador de Rompkbzas dijo que ayer "ni siquiera nosotros (los periodistas) sabíamos qué iba a pasar".
La medida original de Maranhão ya había sido rechazada ayer en la tarde por el presidente del Senado, Renan Calheiros, quien mantuvo en marcha el proceso para que el plenario de la cámara alta vote mañana la apertura del juicio político a la jefa del Estado.
Maranhão divulgó a última hora su nueva resolución, que es publicada hoy. "Revoco la decisión por mí proferida el 9 de mayo de 2016 por medio de la cual fueron anuladas las sesiones del plenario de la Cámara de Diputados ocurridas los días 15, 16 y 17 de abril de 2016, en las cuales se deliberó sobre la denuncia por crimen de responsabilidad N° 1/2015", señala el breve texto del titular en ejercicio de Diputados.
Según el periodista, Maranhão impulsa la anulación original tres reunirse durante el fin de semana con el Abogado de la Unión, que es el representante legal de Rousseff. La vuelta atrás, según explicó, tiene que ver con las presiones recibidas desde su propio partido que apoya el juicio político.
Rittner estimó que la votación que tendrá lugar mañana puede extenderse hasta la tarde del jueves. Según explicó, Maranhão tuvo que cambiar su posición porque podía ser expulsado del Partido Progresista del que es parte ya que desde hace dos años, por orden del Poder Judicial, los diputados no pueden cambiar de partido y mantener su banca.
De acuerdo al colaborador de Rompkbzas, la oposición necesita 41 de 81 votos en el Senado para habilitar el proceso de juicio político. Según Rittner, la oposición quiere dar una "señal"; y pretende conseguir ya mañana los 54 votos que necesita para revocar el mandato de forma definitiva pese a que todavía quedan 180 días de proceso.
El oficialismo, mientras tanto, busca que no se llegue a ese número de votos para dar la sensación de que se puede revertir la situación. Rittner consideró que "todo depende de las primeras semanas de Temer, si logra imponer reformas es difícil que Dilma vuelva";.