Entrevistas

Tragedia en Buenos Aires

Más de 170 muertos sería el saldo del incendio de la discoteca República de Cromagnon en el barrio de Once de Buenos Aires. El periodista Esteban Jacina, de Radio Continental, aportó los primeros detalles.

(Emitido a las 7.38)

EMILIANO COTELO:
Un fin de año trágico del otro lado del Río de la Plata. Al menos 169 personas murieron hoy quemadas, asfixiadas y aplastadas por la avalancha, y medio millar de heridos se suma al saldo del trágico incendio que se desató anoche en el local bailable República de Cromagnon, según los datos confirmados por fuentes oficiales.

Las calles aledañas a este local del barrio porteño de Once se convirtieron por varios minutos en un improvisado hospital en el que los jóvenes con heridas o quemaduras recibían los primeros auxilios mientras otros gritaban por sus amigos o parientes que yacían inmóviles a la espera de las ambulancias. Estas son imágenes que todos hemos visto en estas últimas horas en los canales de la televisión argentina.

La gran cantidad de heridos inundó los hospitales más cercanos, todo bajo un clima de tensión y desesperación.

Vamos a dialogar con nuestro colega Esteban Jacina, de Radio Continental, de Buenos Aires, que ya está en línea.

ESTEBAN JACINA:
Estamos trabajando aquí desde la madrugada, recibiendo los llamados de todo el mundo, lo cual indica claramente que esta tragedia coloca a Argentina en quinto o sexto lugar a nivel mundial en el historial de muertes en boliches, en espectáculos. Es como un ranking de la muerte, de la sinrazón y ahora de las responsabilidades que se suman en las primeras horas, también con la respuesta y la contención a los heridos, a los familiares de los muertos, pero con la búsqueda de los responsables de un boliche sobrepasado, con miles de personas de más...

EC - ¿Qué podemos ordenar en cuanto a la información? ¿Qué fue lo que pasó exactamente?

EJ - Lo que vos estabas dando es la misma información que tenemos nosotros; sí te podría corregir la cantidad de muertos, estamos hablando de más de 170. Eso es al menos al momento, por la cantidad de 300, casi 400 heridos, algunos graves, incluso niños, menores –hay un bebé fallecido que estaba en brazos de sus familiares–, que estaban presenciando el recital del grupo de rock Callejeros en el boliche bailable República de Cromagnon.

EC - ¿Qué fue lo que ocurrió allí? ¿Cuál fue el origen del incendio?

EJ - El origen habría sido una bengala o algún tipo de pirotecnia que incendió las lonas, la escenografía, el techo, de un material inflamable, que es con lo que habitualmente se recubren acústicamente los boliches, que terminó con gases tóxicos. Uno dice ¿pero por qué? Esto tiene que estar preparado para que no ocurra. Todo lo que te estoy planteando genera interrogantes; incluso las salidas de emergencia que tenía el boliche estaban trabadas con alambre desde afuera. ¿Por qué?

Hay un supuesto responsable que podría ser Omar Tabán, el dueño del boliche, una persona muy conocida en la noche porteña que desde los años 80 ha regenteado, manejado, administrado, impulsado el esparcimiento nocturno, del boliche en Buenos Aires. Este hombre se habría transformado en responsable, no sólo si es que es el verdadero dueño, sino porque además había estado dentro del boliche y si no fue él fue alguien muy cercano a él quien advirtió momentos antes de que se iniciara el fuego en el techo que atrapara a toda la gente tratando de salir por donde podía: "Por favor, no enciendan bengalas, no queremos una tragedia".

Esto indicaría claramente que debería haberse detenido el show, no sabemos si había llegado a empezar a tocar el grupo de rock Callejeros, fue instantes antes nada más. Esa advertencia habla claramente –además hay un antecedente– de que hubo...

EC - Hay antecedentes en ese mismo local, ¿no?

EJ - En el mismo local, exactamente.

EC - ¿Qué pasó?

EJ - Hubo otro incendio, hasta ahora no tenemos... Son todos testimonios de primer momento, habría que buscar en el historial cuál fue exactamente la dimensión, no recuerdo que haya tenido saldo trágico, pero desde el punto de vista policial está registrado un incidente, un incendio en ese mismo boliche.

EC - No es, por otra parte, como decías, el primer incendio, la primera tragedia en un boliche en la República Argentina, hemos tenido otros casos relativamente recientes.

EJ - Sí, no tanto. Keyvis fue el caso paradigmático en la zona del norte del Gran Buenos Aires, es una causa judicial que todavía está pendiente, falta encontrar a los responsables. En ese caso era en otro municipio, no en el de la ciudad de Buenos Aires, alguien que incendió un sillón y a partir de allí la salida alocada de jóvenes que festejaban en un baile de egresados que se encontraron con una infraestructura que no respondía a lo que la norma establecía, que además había sido habilitado haciendo la vista gorda, por eso allí hay funcionarios municipales involucrados. Pero después de tantos años, casi diez, todavía no hay una condena firme sobre esta cuestión.

EC - En cuanto a los operativos de asistencia, de rescate, en cuanto a la tarea de los bomberos, ¿se sabe qué efectividad hubo?

EJ - Sí, llegaron en los primeros momentos pero fueron insuficientes, estamos hablando de una, dos, tres, cinco ambulancias que fueron superadas por la cantidad. Fueron 300 y pico de heridos y más de 170 muertos. Las imágenes que uno está reviviendo a partir de la televisión son de intentos de reanimación en plena calle, de gente que huía a 100 metros de allí a la Plaza Once –estamos hablando de uno de los barrios más populosos, a unas diez cuadras del Obelisco–. La asistencia llegó, de hecho hay policías e incluso bomberos internados en este momento con principio de asfixia, algunos de ellos en estado delicado.

***


EMILIANO COTELO:
Vamos a escuchar un testimonio en primera persona del cual José Irazábal tuvo conocimiento más temprano a partir de su tarea en la madrugada hoy en El Espectador.

¿De qué se trata, Pepe?

JOSÉ IRAZÁBAL:
Es una joven que estaba presente en este boliche que hace referencia a un montón de temas que se dan en este tipo de recitales, por ejemplo el uso de la pirotecnia como un elemento que prácticamente está presente siempre en los conciertos y que ya ha generado problemas en diferentes boliches. La entrevista era realizada por los colegas de Radio Mitre.

(Grabación.)

Periodista:
Más que fuego, en realidad (lo grave) fue el humo, ¿no?

Verónica - Fue el humo, por eso la asfixia, porque fue más asfixia que cualquier otra cosa. Entonces afuera mi primo me ve...

Periodista - Ah, ubicaste a tus hermanos y a tu primo.

V - Claro, ellos tres estaban juntos y desesperados porque la única que faltaba era yo. Ahí empezamos a correr, a correr, a correr para el lado de (la calle) Rivadavia, ahí fuimos a ver qué pasaba, encontramos un chico que estaba todo quemado desde el pie hasta la rodilla, lo llevamos con la Policía, encontramos otro chico que estaba desmayado, todo negro del humo y después otro chico al que le estaban haciendo aire porque no podía respirar. Ahí empezaron a sacar gente, y a desesperación de ver chicos llorando, buscando gente, hasta que la encontraba y se aliviaban. Era una cosa que vos veías, no se podía creer y una desesperación total, y lo que se te pasa por la cabeza en esos cinco minutos en que tratás de salir, es impresionante. Fue impresionante.

P - Por lo que te contabas, vos prácticamente casi te habías rendido.

V - Yo ya estaba dada, en un momento cuando veía que la puerta no se abría y no podía respirar ya me había rendido y pensaba en mi mamá, que estaba desesperada seguro, y en todos los que estaban acá, obviamente desesperados por nosotros, que estábamos los dos, mi hermano y yo, y ellos acá, que dijimos "bueno, esto sale en la radio ahora y ellos ¿qué?" Fue terrible, algo que uno puede contar pero no se explica.

P - ¿Sos seguidora del grupo?

V - Sí, yo ya había ido a verlos a Cromagnon una vez antes, yo sabía que iba a estar este grupo en este mismo lugar. Y hubo pirotecnia, también se pedía que no lo hicieran, esa vez tuvimos suerte.

P - ¿Alguna vez viste tanta gente en ese lugar?

V - No. Justamente eso es lo que hablábamos con mi hermano en el tren cuando ya estábamos un poco más tranquilos. Antes de que alguien dijera que entraban 4.000 y había 6.000 yo le dije a mi hermano: "Me parece que desbordaron la cantidad de personas", porque la vez que habíamos ido uno se podía mover, tenía como un espacio, había aire, pero esta vez era uno encima del otro, no poder moverte...

P - Evidentemente hicieron entrar más gente de la autorizada.

V - Claro, es un lugar habilitado para 4.000 y ellos mismos dijeron que había 6.000 personas.

P - Vos que sos seguidora del grupo, ¿considerás que tenía que haber sido en un lugar abierto? Yo no sé la cantidad de gente que lleva el grupo, pero evidentemente es mucha.

V - Mirá, ellos hicieron en un estadio abierto dos semanas atrás, en el Estadio Excursionistas.

P - ¿Fue mucha gente?

V - Sí, fueron 15.000 personas, yo estuve ahí también. Este era un show de boca en boca, o sea no se hizo propaganda porque era para los seguidores no más para festejar los ocho años de la banda. Supuestamente no tenía que haber tanta gente. Pero el tema fue la organización del lugar, el dueño del lugar sabe la capacidad de gente y la cantidad de localidades que puede llegar a vender.

P - ¿Hay gente de seguridad adentro habitualmente?

V - Sí, hay gente de control.

P - Porque, no sé, la pregunta es: ¿vos viste en algún momento matafuegos?

V - No, ese fue mi primer comentario, lo primero que dije fue: "Yo no vi un extinguidor en ningún lado". Yo soy muy perseguida de esas cosas y generalmente cuando entro a un lugar busco, siempre busco matafuegos, ya sea un subte, siempre busco matafuegos, en donde estoy busco matafuegos. Y no vi ninguno. Si hubiera habido, qué sé yo, aunque sea una manguera que uno tiene ahí por algo, eso se podía haber evitado.

P - Por lo que decís vos, el incendio se inició con esa bola de fuego que llegaste a ver, que se podía haber apagado rápidamente.

V - Sí, si hubiera habido algo eso se llegaba a apagar, estoy segura de que sí.

P - Realmente esta tragedia se debe a la gran cantidad de gente que hubo ahí, a la falta de control y a la estupidez realmente...

V - ...del que tiró la bengala. Totalmente, porque te estás diciendo que no lo hagas, sabiendo que corrés peligro, con lo que estás viendo que hay en el techo, porque se ve la media sombra en el techo, ¿cómo se te ocurre hacerlo igual? Es algo terrible. Encima cuando entramos, los de seguridad –¿viste que te palpan?–, estoy entrando y cuando ya estoy por pasar la chica me dice: "Las zapatillas también sacátelas", me saca las zapatillas y las plantillas, todo; si me revisás así, ¿cómo puede ser que hayan entrado bengalas con el tamaño que tienen?

P - Evidentemente no revisaron a todo el mundo.

V - O no revisaron a todo el mundo o, como dicen muchos, que suele pasar en los recitales, en la puerta a veces hay acomodo, por plata vos pasás.

P - Gente conocida.

V - Conocida o por plata, pasás la pirotecnia. Si a mí me revisaste hasta lo último, una bengala tiene un tamaño bastante generoso, la mayoría conocemos el tamaño que tiene, ¿cómo la pasaste?

P - ¿Vos me dijiste que la semana pasada, para Navidad, ya hubo un problema similar?

V - Sí, creo que fue el 25 de diciembre que tocó la 25, hubo un intento; y en mayo nosotros habíamos ido a ver a Callejeros también, en ese mismo lugar, y dijeron ente de que empiece el show: "Tengan cuidado con las bengalas porque el otro día casi hubo un accidente". Ya había pasado.

P – O sea no es ahora que estamos cerca de las fiestas, ¿es habitual que lleven bengalas a los recitales?

V - Los recitales siempre están minados de bengalas, no faltan en ningún recital.

(Fin.)

EC - La tragedia en el Once,0 en este boliche de la ciudad de Buenos Aires, República de Cromagnon, que se vio afectado en la noche y madrugada de hoy. Un testimonio recogido por los colegas de...

JI - De Radio Mitre hoy en la mañana. A esta hora la gente que se agolpa frente a un centro de información que se ha colocado sobre todo para los familiares que no saben dónde están sus hijos, sus seres queridos. Las caras son realmente de desesperación.

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Transcripción: María Lila Ltaif Curbelo
Edición: Mauricio Erramuspe