El próximo 2 de octubre el ciudadano colombiano tendrá la oportunidad de poner fin a 52 años de conflicto entre las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el estado; el conflicto más antiguo en occidente.

La embajadora destacó la intención del gobierno de someter "los acuerdos a la refrendación de un plebiscito para que la ciudadanía determine el curso de las negociaciones de paz"; y expresó su deseo de una alta participación.

"El narcotráfico ha sido el combustible efectivo de las FARC", por esta razón, considera importante una reforma rural integral que ofrecezca al campesino colombiano alternativas lícitas al cultivo de coca.

La embajadora subrayó el respaldo de la comunidad internacional al proceso de paz, en particular de Cuba y Noruega, principales acompañantes y garantes de las negociaciones. Este es un "acuerdo de cara al mundo", afirmó.

Resaltó el respaldo político de Mujica y las manifestaciones en apoyo al diálogo del actual presidente Vazquez. Recordó además que Uruguay es uno de los integrantes de la Comisión de verificación del acuerdo. "El apoyo de Uruguay (fue acompañado) con acciones concretas" finalizó.

En referencia al área comercial bilateral, informó que hay manifestación de interés del gobierno uruguayo para firmar un TLC con Colombia. En este sentido, anunció que el gobierno de su país está muy atento ante la posibilidad del acuerdo comercial.
"Colombia es un país que se ha abierto al mundo empresarial, que entiende que debe abrirse al mercado internacional";, valoró.