A menos de tres semanas de que Trump asuma la presidencia de Estados Unidos, canceló sus potenciales emprendimientos en Buenos Aires. 

 

A finales del año pasado, canceló también acuerdos de licencias para hoteles en Brasil, Azerbaiyán y Georgia, a raíz de presiones para que se separare de sus actividades empresariales antes de que asuma la presidencia. 

 

Él, por su parte, se comprometió a no realizar nuevos negocios mientras sea presidente y dejó la dirección de su compañía a sus dos hijos adultos y otros ejecutivos.

 

El magnate republicano tiene participación en 500 compañías en unos 20 países, aunque algunas son offshore. De hecho, cerró a finales del año pasado cuatro compañías en Delaware que parecían vinculadas a Arabia Saudí pero no efectuaban actividades.