Sobre esto, Pereira dijo que "Lula tiene cinco causas, ésta por algún motivo es la primera que tiene condena, pero no es la central, porque el centro está en torno a Petrobras. Más allá de lo que pase con esto, si es absuelto o no, el problema grueso sigue estando ahí". En esto, también coincidieron sus contratertulianos.

"Que hubo corrupción en Petrobras y que personas del PT (Partido de los Trabajadores) estuvieron involucradas no hay duda. Esta sentencia me parece que está centralmente apoyada en la delación premiada, y si uno le saca eso, no se sostiene. Hay una serie de incongruencias en esta historia que no se sostienen, no se entienden muy bien. Si este es el procedimiento de la sentencia, me parece que estamos en una especie de tembladeral que a la situación crítica que tiene Brasil no lo ayuda nada", agregó.

Pascale expresó que las declaraciones de la ministra de Educación y Cultura, María Julia Muñoz, son "inadmisibles". "El gobierno uruguayo o sus integrantes a título personal, no puede hacer declaraciones de tipo político. Puede pensarlo pero no es serio que lo diga", añadió.

Además, el tertuliano opinó que el destino del dinero que obtuvo Lula por el delito por el cual se lo acusa "fue para financiar las campañas políticas y parte fue para alegrar algunos bolsillos particulares, entre ellos para uno de los hijos de Lula, que hace unos años era un empleado de un zoológico de Brasil y hoy es una de las personas más ricas de todo el país. Uno tiene que pensar que ser hijo de Lula pavimentó esa riqueza".

Por su parte, Bonilla consideró que "estamos ante un fenómeno que trasciende al tema de Brasil. América Latina pasó, desde los últimos quince años, un proceso de corruptización vertiginoso. Nunca me sorprendió lo que pasó en Venezuela, pero sí me sorprendió lo de Brasil. (…) En América Latina, hace diez o doce años se rompió el estado de derecho, y por eso se está deteriorando la calidad de las instituciones democráticas desde hace más de una década".

En referencia a esto, Pascale dijo que cuando el Estado es el que maneja los recursos y los controla, "se abre un campo muy grandes para que ocurran este tipo de cosas". "El corazón de la investigación de Ancap es la diferencia entre los presupuestado y lo que en realidad se pagó. Si uno lo traslada al caso brasileño es lo que pasó".