(Emitido a las 8.20)

EMILIANO COTELO:
Israel y las autoridades palestinas declararon ayer el fin de todos los actos de violencia entre sus pueblos. El primer ministro israelí, Ariel Sharon, y el líder plaestino, Abu Mazen, se reunieron en el balneario egipcio Charm el Cheij, en un encuentro auspiciado por el gobierno de ese país, y efectuaron esa declaración que hace resurgir las esperanzas de avanzar hacia la paz que hasta ahora ha resultado tan pero tan difícil.

Estamos en contacto con nuestra corresponsal en la zona, Ana Jerosolimski, que cubrió esa reunión.

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Ana, ayer fue un día histórico,.

ANA JEROZOLIMSKI:
Sin duda. Eso se palpaba claramente y no es para menos porque si bien ya uno tiene experiencia del lado israelí y del lado palestino, también de los observadores internaciones, en cuanto a promesas, cumbres y conferencias muy dramáticas que cubrimos los periodistas con mucho entusiasmo y después en el terreno hay muchas crisis. Pero cuando se ve a Sharon y Mazen comprometiéndose públicamente al fin de la violencia -en una situación que hace tiempo no se vivía, entre Israel y el desaparecido Yasser Arafat era otra cosa- evidentemente se habla de historia.

Veamos un poco de estos dichos, de por qué estamos hablando de historia. "Juntos podemos promover las relaciones entre nosotros", dijo Sharon. "Juntos podemos encender por primera vez en mucho tiempo, para todos los pueblos de la región, una primera luz de esperanza", agregó.

En el mismo tono, se pronunció el presidente palestino, Abu Mazen. "Hemos decidido con el primer ministro Ariel Sharon el anuncio del cese de todos los actos de violencia", afirmó Mazen. "Una nueva etapa, el comienzo de la paz y de la esperanza".

EC – ¿Y cómo se vivió este acontecimiento? ¿Qué dijeron los analistas, los portavoces de uno y otro lado?

AJ – Evidentemente cada uno aclara que una cosa es el plan, la buena intención y otra la implementación en terreno. Si ambas se coordinan bien, se puede estar frente a no sólo una nueva cumbre que se sume a la lista de expectativas y decepciones sino ante el comienzo de algo diferente.

Ayer hablamos con el portavoz de la Cancillería israelí, Igal Palmor -hijo de quien fuera embajador en Uruguay, Eliezer Palmor-, que destacaba el hecho de que había un compromiso también de los otros presidentes: el anfitrión, el presidente egipcio Hosni Mubarak, y el rey Abdalah de Jordania. Es decir, más allá de lo bilateral, un marco internacional o regional.

"Lo importante es que todos los líderes aquí presentes, no sólo el israelí y el palestino, sino también el presidente de Egipto y el rey de Jordania se van a comprometer con el proceso de paz que vamos a reanudar aquí, basado en los cimientos de una seguridad estable y garantizado en la medida de los posible. En una fase ulterior vamos a reanudar la parte de la negociación política", dijo Palmor.

O sea que aquí no se deja de lado la Hoja de Ruta si bien evidentemente la implementación será compleja. Son muchos los desafíos con los que hay que lidiar en el terreno. Ayer los israelíes ponían énfasis en la parte de seguridad, pero estaba claro que esto, si se calma la situación en el terreno, será conducente a una reanudación del proceso de paz con todos los aspectos políticos que la atañen, no sólo los de la seguridad en el terreno.

EC – ¿Y los políticos cómo ven el saldo de esta cumbre de ayer?

AJ - Evidentemente los palestinos destacan este punto que yo recién mencionaba la necesidad de que lo político no desaparezca del escenario. Ayer grabamos entre otros, quedamos casi aplastados por las cámaras de la televisión egipcia pero así sucede siempre en este tipo de eventos, al ministro palestino tan conocido en el mundo, el doctor Saeb Erekat, quien decía creo yo muy acertadamente que aquí la cumbre es clave pero no hay que hablar de lo que termina ahora sino concentrarse en lo que comienza. "Es una cumbre de principios y no de fines", dijo.

El doctor Erekat afirmó que espera que esta cumbre haya sido la primera de una serie de cumbres. Lo interesante es que cuando hablan de los contactos de las últimas tres semanas con los israelíes dice: "hemos tenido intensos y productivos contactos con nuestros colegas israelíes". La terminología va cambiando y eso es buena señal.

EC – Y para finalizar, por lo menos un primer enfoque Ana, ¿qué impacto han tenido en estas horas la reacción muy rápida que se conoció de los grupos radicales palestinos? Por ejemplo, Hamas ya comenzó a amenazar con desestabilizar este proceso.

AJ - Así es. Yo no vaticinaría ya ahora que el alto el fuego está cayendo por la posición de Hamas. Ese grupo sabe también captar el terreno y quizás se va a imponer esta realidad porque la gente está cansada de la violencia. No necesariamente todo está terminando. Cuando llegó ayer el desafío de boca de un portavoz de Hamas desde Gaza diciendo que lo que dijo Abu Mazen en la cumbre era la postura sólo de la Autoridad Palestina, que Hamas la rechazaba, preguntamos al portavoz que oímos hace un momento acerca de la reacción israelí.

"Sin un alto del fuego efectivo no puede haber un proceso político y esto ha sido planteado de forma muy clara hoy. Entonces, si el Hamas lo quiere desafiar, eso representa un problema muy grande para lo que quiera Palestina y la Autoridad Palestina. Yo creo que los palestinos tienen que decidir de una vez quién manda, quién es la autoridad y quién puede llevar a cabo los planes y programas decididos por el liderazgo político elegido democráticamente", afirmó Palmor.

Los palestinos no parecen tener dudas al respecto, Emiliano. Quieren que quien decida sea el presidente Abu Mazen, quieren una política claramente de diálogo y de negociación con Israel.

Hace unos días estuve en la franja de Gaza y allí uno de los portavoces de Hamas, Sami Abu Zuhri, dijo que cuando se habla de negociar una tregua necesariamente es algo temporario y que Hamas nunca va a reconocer a Israel. Eso no quiere decir, sin embargo, que ahora todo quede arruinado por ese desafío de Hamas.

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Transcripción: Adriana Arzuaga
Edición: Mauricio Erramuspe