España reafirma su apoyo a las misiones de paz de la ONU, pero pide reformas
España reafirmó en el Consejo de Seguridad de la ONU su "apoyo inequívoco y firme" a las misiones de paz de Naciones Unidas, pero pidió algunas reformas que mejoren su eficacia y permitan una salida del país exitosa.
En su primera intervención en el consejo, el nuevo embajador, Jorge Moragas, pidió reforzar la dimensión política de las misiones y establecer "estrategias claras de salida" para que las instituciones de los países receptores puedan mantener su propia seguridad una vez los cascos azules abandonen el terreno.
"Naciones Unidas no debe ni puede hacerlo todo, en todo momento y en todas partes", resumió el embajador, que pidió que la base legal de las misiones sea clara y con "objetivos evaluables".
En una sesión del Consejo de Seguridad abierta a países no miembros de ese órgano de Naciones Unidas, Moragas animó a buscar sinergias con organizaciones regionales e internacionales, y puso el ejemplo de Mali, donde España participa en la operación de paz.
El embajador recordó que las crisis actuales "demandan nuevas capacidades" como la lucha contra Artefactos Explosivos Improvisados (IED), un campo que domina España, que ha enseñado a otros países de la OTAN cómo explotar de forma segura estos explosivos.
Moragas instó a aumentar el número de mujeres en las misiones de paz, especialmente en puestos de liderazgo, por su "valor añadido" a la hora de proteger a las familias y cohesionar las comunidades.
España reforzó su compromiso con la inclusión de la perspectiva de género "en todas las fases de una misión" y se sumó a la política de "tolerancia cero" ante los casos de abusos sexuales que ha promulgado el actual secretario general, António Guterres.
"La legitimidad de Naciones Unidas y el sentido último de las misiones están en juego", declaró Moragas, que recordó que el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, forma parte del "círculo de confianza" del secretario general para abordar los abusos sexuales.
Moragas se despidió parafraseando a Miguel de Cervantes: "Decía nuestro español más universal que 'cambiar el mundo no es utopía, ni locura. Es justicia'. Esto nos recuerda hoy, sobre todo, que esta es una reforma imprescindible".
EFE