Primer viernes de Ramadán sin incidentes en Jerusalén
El primer viernes de Ramadán, el mes sagrado de ayuno musulmán, transcurrió en Jerusalén sin incidentes, a pesar de que la tensión en Palestina se había disparado a raíz de la muerte de 60 personas en Gaza a manos del Ejército israelí el lunes pasado.
Decenas de miles de palestinos pudieron rezar hoy en la Explanada de las Mezquitas, en la Ciudad Vieja de Jerusalén, en la oración del primer viernes de Ramadán.
Los fieles congregados en la Mezquita de Al Aqsa -el tercer lugar más sagrado para el Islam- fueron 120.000, según la agencia Wafa. Entre ellos no solo había palestinos de Jerusalén sino algunos procedentes de otros lugares de Palestina que obtuvieron permisos de Israel.
La policía se desplegó masivamente en las inmediaciones de la Ciudad Vieja y en otros puntos por miedo a que se produjeran incidentes. El portavoz policial Micky Rosenfeld explicó que la seguridad se reforzaría todo el fin de semana, que coincide con la fiesta judía del Shavuot.
En la zona este de la ciudad, la parte palestina, ocupada por Israel desde 1967, las calles estaban poco concurridas al ser fiesta y por las fuertes temperaturas, que hoy han rozado los 40 grados.
Por la noche, tras la cena del iftar (hora en la que se rompe el ayuno), las calles se llenan de gente, al revés que el resto del año.
En las tiendas abiertas, algunas personas compran alimentos para la cena de esta noche, entre ellos la joven Laila, de 20 años, que ayuda a su madre a preparar lo que comerán hoy.
"Vendrán familiares y vamos a preparar varios dulces", explicó a Sputnik. "El Ramadán con este calor es muy duro, no se aguanta bien", aseguró.