"El disturbio generado por 18 personas privadas de libertad del pabellón C Alta de la Penitenciaria Regional de Misiones fue controlado por las autoridades penitenciarias, con apoyo de elementos policiales", indica el texto de prensa difundido por la Secretaría de Estado en la red social Twitter.

Más temprano este lunes el jefe de la Comisaría 11ª Metropolitana, Víctor Balbuena, dijo a la radio local 970 AM que "desde anoche, 147 reclusos" se encontraban "amotinados" y que sus peticiones eran "innegociables", ya que pedían alcohol y drogas.

El pabellón C Alta aloja a personas con adicciones e internos traslados desde otros penales por haber generado conflictos.

"Los privados de libertad con síntomas de abstinencia generaron disturbios por no lograr obtener sustancias prohibidas y bebidas alcohólicas, por lo que quemaron tres colchones y exigieron se les permita el ingreso de drogas y bebidas", indica el comunicado.

Sin embargo, un recluso que logró comunicarse con la radio local 780 AM dijo que en realidad solicitaban mejoras en las condiciones de vida, incluyendo la alimentación, ya que la "comida es incomible", consignó el medio local Última Hora.

Al respecto, el Ministerio de Justicia niega que haya habido pedido de alimentos.

"Es importante informar que durante las conversaciones los mismos (presos) no solicitaron víveres, por ser un aspecto que está totalmente cubierto por las autoridades a cargo", añade el comunicado.

El Ministerio aplica "controles en todos los centros penitenciarios para minimizar el ingreso de sustancias prohibidas y alcohol y se fortalece la institución en el combate a la corrupción a través de la recepción de denuncias y sumarios para investigar a funcionarios involucrados en posibles hechos delictivos", indica el texto de prensa.

La Penitenciaria Regional de Misiones tiene 1.497 personas privadas de libertad, cuando su capacidad es de 800 personas. (Sputnik)