El Papa aceptó la dimisión del arzobispo este lunes, tras una anterior negativa a dimitir por parte de Wilson.

Los políticos australianos insistieron en que el arzobispo renunciara a su cargo y el primer ministro australiano, Malcolm Turnbull, se dirigió al Papa para que despidiera a Wilson.

Cediendo a la presión, el arzobispo presentó finalmente su dimisión al papa Francisco.

Wilson fue sentenciado en mayo pasado a un año de prisión, conmutable a libertad condicional al término de seis meses, pero dijo que apelaría la condena.

La justicia australiana dictaminó que Wilson es culpable del encubrimiento de abusos sexuales contra menores que el sacerdote Jim Fletcher había cometido en el estado de Nueva Gales del Sur en la década de 1970.

El ya exarzobispo de Adelaide es el mayor rango de la jerarquía católica declarado culpable de encubrimiento de pedofilia hasta la fecha. (Sputnik)