Se trata del quinto encuentro entre ambas partes desde el lanzamiento oficial de la negociación, y tuvo lugar esta semana en el Palacio San Martín, sede del Ministerio de Relaciones Exteriores del país austral.

Según informó la Cancillería, en las mesas de negociación, en las que participaron autoridades de los dos bloques, se concretaron "avances decisivos" en materias como facilitación del comercio, comercio de bienes, servicios, desarrollo sostenible, defensa comercial y reglas de origen, cuyos capítulos están "prácticamente cerrados".

La próxima ronda de conversaciones entre el Mercosur -integrado por Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay- y el EFTA -formado por Suiza, Noruega, Islandia y Liechtenstein- está prevista para la última semana de noviembre en la sede de la EFTA en Ginebra.

Mientras, los dos bloques acordaron las modalidades para intercambiar ofertas mejoradas en bienes dos semanas antes de la próxima ronda, que permitirán "garantizar un acceso preferencial de productos prioritarios" para el Mercosur en el mercado del EFTA.

"Con el objetivo de agilizar el acuerdo, ambas partes reafirmaron su voluntad de concluir las negociaciones en 2019", remarca la Cancillería.

Entre 2015 y 2017, el promedio anual del comercio entre los dos bloque superó los 7.000 millones de dólares.