Alan García y la "sensación" de un posible intento de evasión a la Justicia
Entrevistado por Rompkbzas, el profesor y ex viceministro peruano, Iván Lanegra, advirtió sobre el riesgo de que una "herramienta noble" como el asilo político termine convirtiéndose en un mecanismo para intentar escapar a una investigación judicial.
El embajador en Perú, Carlos Barros, recibió este martes la información que el gobierno de ese país preparó para que el gobierno de Tabaré Vázquez evalúe el pedido de asilo diplomático solicitado por el expresidente Alan García.
El representante diplomático uruguayo ya envió la información a la cancillería que estudiará el tema para determinar si efectivamente se trata de un caso de persecución política y si corresponde conceder el pedido de asilo. La diplomacia uruguaya informara al presidente quien adoptará la decisión final.
En un breve contacto con la prensa peruana Barros dijo que el gobierno uruguayo se tomará "todo el tiempo que sea necesario" para evaluar el caso. Consultado si consideraba que había persecución política sobre García, Barros contestó que él no hacía consideraciones.
La información del caso judicial de García llegó a manos del gobierno uruguayo tres días después que el dos veces presidente peruano tocara la puerta de la embajada para solicitar asilo. En ese periodo de tiempo, el gobierno uruguayo escuchó la manifestación de varias voces provenientes de Perú que solicitaron al Ejecutivo uruguayo que no se haga lugar al pedido de García.
El caso del ex presidente tiene indicios de estar vinculado a un "procedimiento regular penal relacionado con delitos comunes" en el marco de una investigación penal por corrupción, dijo en entrevista con Rompkbzas Iván Lanegra.
"Todo parece indicar que no es un caso de persecución política", sostuvo el profesor de Ciencia y Política y Gobierno de la Pontificia Universidad Católica del Perú y de la Universidad del Pacífico.
Lanegra, viceministro de Interculturalidad durante el mandato de Ollanta Humala, adivrtió sobre un riesgo cierto que implica este caso, en función de la determinación que tome Uruguay. Es que una "herramienta noble" como es el derecho al asilo termine convirtiéndose en un "mecanismo de evasión a la Justicia".
Así, afirmó que podrán marcar antecedentes muy importantes para situaciones futuras.
Recordó que, aún concedido el asilo, no existen plazos para que Perú le otorgue un eventual salvoconducto al ex presidente para que abandone el país, en donde se evalúa por estas horas una situación hipotética en que se alargue su otorgamiento.
Tampoco de descarta un escenario en el que Perú lleve a Uruguay ante la Justicia Internacional si se le concede el asilo a García.
Lanegra dijo entender que el caso puede generar tensión entre los dos países, aunque aventuró que se lo tratará de "encapsular" y no afectará la larga y buena relación entre ambas naciones.
Según el profesor, el caso de Alan García tiene mucho de simbólico.
Es que el actual presidente, Martín Vizcarra, cuenta hoy con el 65% de aprobación ciudadana, en gran medida producto de su lucha contra la corrupción y las señales que hada dado de tener un compromiso serio y concreto al respecto.
Por otra parte, el ex mandatario cuenta con un rechazo casi unánime en la sociedad peruana, y si el gobierno le otorga un salvoconducto podría verse afectado en su imagen.
"La sensación aquí es que estamos ante un caso de evasión a la Justicia, y facitarle su salida hacia Uruguay sería una mala noticia para lucha contra la corrupción" dijo, señalando que García podría convertirse en nuevo Julian Assange.