(Emitido a las 08.50)

EMILIANO COTELO:
Andrés Manuel López Obrador es hoy por hoy el político más popular en México y quizá el que mayores posibilidades tiene de llegar a la Presidencia en las elecciones del año que viene. Esta afirmación podría ser tan cierta como podría verse totalmente desmentida por los acontecimientos. Y es que el alcalde de Ciudad de México, Manuel López Obrador, es centro de un polémico caso con ribetes políticos y jurídicos que podría dejarlo fuera de la carrera presidencial. Eso si la justicia acepta procesarlo por una acusación de abuso de funciones que le formula la Procuraduría General de la República, un organismo dependiente del gobierno que dirige Vicente Fox.  El alcalde denuncia una conspiración política orquestada desde el gobierno, una acusación que el Ejecutivo rechaza tajantemente.

Es un caso por demás complejo al cual vamos apenas a asomarnos esta mañana en diálogo con Mauricio Rabuffetti.

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Mauricio, yo decía recién Mauricio que es un caso complejo...

MAURICIO RABUFFETTI:
Sí, esa es una manera bastante formal y educada de definir este caso. La verdad es que  probablemente sea el mayor enredo judicial que nos ha tocado analizar en este espacio. Más que un comentario habría que enviarle a cada oyente un mapa para que entienda lo que está pasando en México con López Obrador.

Por eso hoy, en este primer abordaje de este tema, lo que vamos a proponerle a los oyentes, más que un análisis como los habituales, es una especie de ejercicio de relectura de toda la información que ha ido surgiendo sobre este caso, tanto a través de los medios mexicanos como a través de medios internacionales...

EC - Bien

MR - ...para luego sobre el final tratar de explicar sí, cual puede ser el efecto sobre el panorama político futuro de México del caso López Obrador. Este político nació en 1951 en el estado de Tabasco, integra el Partido de la Revolución Democrática y seguramente sería presidente si las elecciones fueran mañana en México, pero al cual incluso –según sus detractores- ni siquiera habría que llamar alcalde. Y eso a pesar de que ayer se reintegró a su cargo al frente de la alcaldía de la mayor urbe del planeta.

EC - De entrada nomás tiraste sobre la mesa varios puntos interesantes. Como hay que empezar por algún lado, vamos a concentrarnos en ese aspecto que mencionabas recién Mauricio, el de si llamarlo o no alcalde.

MR - Voy a simplificar lo más que pueda Emiliano. El 7 de abril pasado, la Cámara de Diputados del Congreso mexicano decidió por una mayoría aplastante -constituida esencialmente por votos del Partido Acción Nacional, el PAN de Vicente Fox, y el Partido Revolucionario Institucional, el PRI que gobernó México por 70 años hasta la asunción de Fox- quitarle los fueros a López Obrador para que respondiera judicialmente a una acusación formulada por la Procuraduría General de la República. Este organismo depende de la Presidencia de la República y la acusación era que López Obrador había desacatado una orden judicial para detener la construcción de un camino de acceso a un hospital. El PRD, el partido de López Obrador, no pudo hacer nada en el Congreso ya que es minoría, constituye la tercera fuerza de ese cuerpo, y el alcalde perdió los fueros. Entonces, primer resultado: el alcalde dejó su puesto y se instaló en buena parte de la opinión pública mexicana la sensación de que hubo una especie de pacto para terminar con la carrera de López Obrador por la Presidencia.

EC - Esa es la tesitura que sostiene el alcalde de Ciudad de México, justamente.

MR - Y que rechaza el gobierno de Vicente Fox que afirma que de lo que se trata es de que un funcionario público respete las decisiones judiciales, en este caso, la que ordenaba detener esas obras. Se instaló entonces como decíamos, esa percepción en la opinión pública mexicana y el apoyo a López Obrador comenzó a crecer a niveles superiores a los que ya tenía, mientras el ida y vuelta de acusaciones entre el gobierno y este político de izquierda crecía. López Obrador dejó la alcaldía luego de que le fueron retirados sus fueros, pero volvió ayer a sus funciones, en principio, sin fueros.

EC - Según los medios mexicanos y algunas informaciones que leía en agencias de noticias, volvió aprovechando un "vacío legal" sobre su situación.

MR - Bueno, acá viene los más complicado de este caso. Resumiendo e interpretando un poco la información que ha venido llegando en los últimos días desde México, la segunda discusión que se instaló a raíz de la decisión de los diputados de dejar sin protección jurídica al alcalde tiene varias aristas. La primera: la justicia está considerando si los diputados federales tienen la potestad de quitarle los fueros al alcalde. Algunos dicen que sí, otros dicen que solo puede ser el organismo que equivaldría a nuestra Junta Departamental el que puede quitarle los fueros o destituirlo. La segunda arista, ¿puede gobernar un funcionario si existe un proceso judicial en su contra? Parecería que no. Pero, ¿existe un proceso judicial en contra de López Obrador? El alcalde parece pensar que no porque de hecho el viernes pasado, un juez rechazó un pedido de la fiscalía para que el político de izquierda fuera llamado a comparecer en su juzgado, lo rechazó por vicio de forma, y el resultado es que ahora, luego de esta decisión judicial del viernes, el alcalde resolvió volver a sus oficinas.

EC - El gobierno de Fox calificó esta repentina vuelta del alcalde a sus funciones como una "provocación".

MR - Provocación o no, lo cierto es que el domingo López Obrador y el PRD lograron que por lo menos un millón de personas marcharan en silencio en Ciudad de México en protesta por lo que consideran una jugarreta del oficialismo y del PRI, que están bastante lejos de poder disputarle la Presidencia a López Obrador. Y el gobierno de Fox –y acá no estamos haciendo ninguna apreciación sobre quién tiene razón en este caso porque no es nuestra función- está metido en un berenjenal jurídico que por ahora viene beneficiando a López Obrador y perjudicando al oficialismo.

EC - No cabe duda de que la marcha del domingo fue, si faltaba alguno, el espaldarazo final para la candidatura de López Obrador

MR - Yo creo que sí. Y creo que lo más importante del caso López Obrador, es que cada vez más la imagen que está quedando, hacia afuera de México incluso, es que hay un intento por parar el avance del alcalde mexicano. Ayer un colega me dijo que a López Obrador "le pusieron el cepo" y creo que cada vez más esa es la idea que se está generando porque las acusaciones que le hacen realmente se desdibujan ante esta maraña legal tan difícil de desenredar y ante la magnitud de las manifestaciones a favor del político del PRD. En definitiva, él tiene todas las de ganar porque si la batalla judicial para, sale triunfador, pero si va preso, o si lo sacan de sus funciones, a ojos de buena parte de los mexicanos queda como una víctima del oficialismo. Así que estoy seguro que vamos a volver a referirnos a este caso porque cualquiera sea el desenlace, seguro va a ser explosivo.