(Emitido a las 7.50)

EMILIANO COTELO:
Tony Blair aspira hoy a convertirse en el primer líder laborista en ser reelegido por tercera vez consecutiva después de una campaña marcada por las críticas al primer ministro británico por su apoyo a la guerra de Irak. Más de 44.000.000 de ingleses están convocados a elegir a los 646 representantes de la Cámara de los Comunes. El conservador Michael Howard y el liberal demócrata Charles Kennedy figuran detrás de Blair en las encuestas, dicen los despachos que están llegando desde Londres.

Vamos a dialogar con Roberto Bello, periodista uruguayo que se desempeña en la BBC.

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Roberto, ¿cómo viene la jornada de votación?

ROBERTO BELLO:
Por ahora bien, aparentemente no ha habido novedades aquí en el Reino Unido, las mesas electorales abrieron a las 7 de la mañana hora local. Es interesante que no se registra ninguna actividad proselitista, tampoco se puede informar, los medios de comunicación solamente pueden referirse a temas generales pero no por ejemplo a qué están haciendo particularmente los candidatos, más allá de mostrar imágenes de cuándo votaron, etcétera.

EC - Blair acudió a votar a la circunscripción de Sedgefield, en el norte de Inglaterra, por la que se presenta. Lo hizo acompañado por su esposa Cherie y dos hijos mayores, sobre las 10.45 hora local.

RB - Por supuesto que el que se juega todas las fichas es básicamente Blair, aunque sabe en el fondo que tiene grandes posibilidades de ganar, las últimas encuestas le estaban dando en promedio un 37 por ciento de las predilecciones electorales frente a un 32 por ciento para los conservadores, 23 por ciento para los liberales demócratas.

Hay que tener en cuenta el peculiar sistema de votación del Reino Unido, son unas 646 circunscripciones o distritos electorales y cada ciudadano vota por su representante en ese distrito, no se vota directamente por el primer ministro. Por supuesto, el que gana en un distrito por mayoría simple es el diputado que representa a ese condado y el resto no cuenta para nada, o sea que si un laborista gana por un voto al conservador, el conservador en ese lugar no corta ni pincha, en absoluto. Esto hace que la elección no sea 100 por ciento representativa, es un sistema que muchos critican, pero ha estado funcionando así desde hace muchísimo tiempo, como son todas las cosas aquí: si funcionan más vale dejarlas funcionando.

EC - Justamente debido a ese sistema es que algunos analistas decían que uno de los riesgos que corría Blair era que sus votantes, convencidos del triunfo, decidieran no votar, se dejaran estar, propiciando ese tipo de derrotas en las circunscripciones.

RB - Sí, esa es la gran duda, la cantidad de gente que va a ir a las urnas. Recordemos que en las elecciones pasadas hubo un 59 por ciento de asistencia; por lo general aquí en el Reino Unido había una cultura cívica bastante grande, recordemos que el voto no es obligatorio, promedialmente se daba una concurrencia de 70 por ciento, fue de 59 por ciento en 2001 y ahora se espera que sea inferior aun.

Hay dos cosas, por un lado, como tú decías bien, el hecho de que los laboristas, algunos cuantos desengañados o desilusionados con su líder, desistan de ir a las urnas, y por otro lado la gente que apueste a ir a votar a los liberales demócratas, por ejemplo, con lo cual, según dicen aquí, si bien Tony Blair mantendría el liderazgo y los laboristas ganarían la elección, lo harían con una mayoría reducida, lo que aquí llaman un "blooding nose", o sea dejarle nariz ensangrentada a Blair para que vea que la gente no está muy contenta o que dentro de lo mal que está igual prefiere que sigan los laboristas en el poder.

EC - ¿Cómo fue la campaña? Dicen algunos que fue muy aburrida y que tuvo un par de temas centrales, uno la guerra de Irak y la justificación que el gobierno de Blair dio para que el Reino Unido se involucrara, información que llevó a sus rivales a acusarlo de mentiroso. Por otro lado, los temas económicos.

RB - En efecto. Lo principal es que la economía, mal o bien, anda bien, y eso es lo que a la mayor parte de la gente a la larga le interesa. El resto marca algunos matices, por ejemplo como hablábamos antes muchos laboristas están indignados con el gobierno de Tony Blair por su actitud con respecto a Irak, pero a la larga lo que importa es la plata y en ese punto el gobierno laborista ha hecho un buen trabajo. Aunque dicen algunos analistas que se vienen nubarrones en un futuro no demasiado lejano. Habrá que ver.

La campaña más que lo que hicieron los laboristas fue lo que dejaron de hacer los conservadores, que empezaron con una campaña dándole muy duro al tema de la inmigración, solicitando medidas más restrictivas, cosa que a la larga no es un tema tan central como para definir una elección. Y luego con respecto a Irak no pudieron decir mucho porque en definitiva ellos también apoyaron la guerra, apoyaron la intervención armada, pero la gente aquí tiene muy buena memoria y a pesar de que ellos traten de tapar el pasado se acuerda muy bien de las dificultades económicas que tuvieron lugar durante el gobierno de Margareth Thatcher, por ejemplo. Los británicos lo tienen muy presente. Justamente por el particular sistema electoral que lleva a que predomine el bipartidismo porque no es una representación total, los que ganaron son los liberales demócratas pero muchos liberales demócratas al hacer un voto táctico piensan "en mi circunscripción me encantaría votar a un liberal demócrata, pero antes de que ganen los conservadores prefiero votar al laborismo", entonces a la larga muchos terminan votando, por una cuestión táctica, a alguien que no prefieren pero... peor es nada.

EC - ¿Hasta qué hora se vota?

RB - Hasta las 22, o sea hasta las 6 de la tarde hora uruguaya.

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Transcripción: María Lila Ltaif Curbelo
Edición: Mauricio Erramuspe