(Emitido a las 8.45)

EMILIANO COTELO:
La calma relativa del fin de semana largo de Memorial Day –día de recordación a los caídos en defensa del país- terminó abruptamente ayer en Estados Unidos con una noticia que sacudió a la opinión pública y puso fin a uno de los misterios más grandes en la historia de ese país. "Garganta Profunda", la fuente anónima que permitió a dos periodistas revelar los detalles de Watergate –y así hacer caer a un presidente- tiene nombre y apellido: se llama Mark Felt, y es un ex vicedirector del FBI de 91 años.

Para conocer los detalles del caso, y de como se está viviendo en Estados Unidos, estamos en contacto con Roberto Porzecanski, corresponsal de En Perspectiva en Boston, Massachusetts.

***

Roberto, antes que nada, ¿cómo se ha vivido la noticia en Estados Unidos?

ROBERTO PORZECANSKI:
Ha sido sencillamente un terremoto, y a captado la atención total de todos los medios de comunicación. Desde que estoy acá –hace dos años- ninguna noticia, salvo la elección, ha tenido el impacto de ésta. Desde que la confesión de Felt a la revista Vanity Fair es el único tema del que se habla, opacando incluso una conferencia de prensa del presidente George Bush ayer en la Casa Blanca.

En cuanto a cómo se desarrolló la noticia, te diría que al comienzo la reacción fue de confusión, ya que no es la primera vez que parece revelarse el secreto que se mantenía guardado hace 30 años. Si bien quienes han seguido el caso por años afirmaban que la noticia era muy sólida, el hecho de que uno de los periodistas directamente involucrados, Carl Bernstein, inicialmente se negara a confirmar la noticia agregó un poco de incertidumbre. Luego, en el correr de la tarde la confirmación de Bob Woodward, el otro periodista directamente involucrado y quien mantenía contacto regular con "garganta profunda" le puso fin a las especulaciones y desató los comentarios todo tipo.

EC - Sería bueno repasar en grandes líneas que fue el escándalo de Watergate y el rol que cumplió "garganta profunda.

RP - En primera instancia, el escándalo de Watergate hace referencia al involucramiento de gente cercana al presidente Richard Nixon en un episodio, sucedido el 17 de Junio de 1972, en el que cinco hombres irrumpieron en las oficinas del Comité Nacional Demócrata, en el Edificio Watergate en Washington DC, para obtener información que sería utilizada en la campaña para la relección de Nixon, en los comicios que tendrían lugar unos meses más adelante.

De todas maneras, en un nivel más general, Watergate simboliza la utilización por parte de Nixon del aparato estatal –en particular, la CIA- para llevar adelante actividades de espionaje con fines políticos partidarios.

EC - ¿Y cómo evolucionó el caso desde el día 17 de Junio?

RP - El evento comenzó a ganar mucha importancia cuando en el correr de los días y meses distintas pistas comienzan a indicar la existencia de un vínculo entre esa operación y la campaña para la reelección del presidente Richard Nixon. Recordemos que Nixon fue finalmente reelecto, por unos de los márgenes más grandes en la historia de Estados Unidos, el 7 de noviembre de ese año, 1972.

Sin embargo, Nixon no pudo terminar su segundo mandato ya que el final de la historia, el que todos cononocemos, es la renuncia del presidente, la primer renuncia de un presidente de Estados Unidos, dos años más tarde en 1974.

EC – Esa dimisión era el final de un período fuertemente convulsionado en la política norteamericana.

RP - La renuncia de Nixon llegó después de dos años en los que, entre otras cosas, diversos funcionarios de alto rango de Casa Blanca fueran renunciando sucesivamente, en que la Suprema Corte de Justicia obligara al presidente a entregar las grabaciones de 64 conversaciones en la Casa Blanca y en que en Comité de Asuntos Judiciales de la Cámara de Representantes aprobara tres artículos acusando al presidente Nixon de obstrucción a la justicia.

EC - ¿Obstrucción a la justicia?

RP - Si, es importante aclarar que a Nixon no se lo acusaba de organizar la operación sino en utilizar todo el aparato del Estado para encubrir el vínculo existente entre quienes la llevaron a cabo y su campaña para la reelección.

EC - ¿Y que papel cumplió, en todo esto, "garganta profunda"?

RP - Bueno, a pesar de que varios medios de prensa investigaron el episodio, fueron dos jóvenes periodistas del Washington Post, Bob Woodward and Carl Bernstein, quienes llegaron más profundamente en la investigación, dejando en evidencia la participación de la campaña de Nixon en el episodio. Y en la investigación de Woodward y Bernestein una fuente hasta ahora anónima, identificada como "garganta profunda", cumplió un rol instrumental, al menos esa es la visión que la mayoría de la gente tiene...

RP - ¿Por qué decis eso?

EC - Porque en estas últimas horas muchos han instistido –aunque no Woodward y Bernstein- que el rol de "garganta profunda" ha sido magnificado e idealizado, en parte por el papel que se le asigna a esa fuente en la película "Todos los hombres del presidente", lanzada en 1976 con la participación de Robert Redford y Dustin Hoffman.

De todos modos, idealizado o no, la identidad de "garganta profunda" ha sido una pregunta permanente en el imaginario colectivo de los estadounidenses, una pregunta que finalmente fue respondida, 30 años más tarde.

EC - ¿Y no se supo nada de la identidad en los últimos 30 años?

RP - Bueno, de hecho en los últimos 30 años investigar e hipotetizar sobre la identidad de "garganta profunda" ha sido una industria en si misma. Por lo que sabemos a partir de ayer varios estaban cerca del objetivo, ya que el nombre de Mark Felt estaba en las listas de varios. Inclusive, hace unos años tuvo que negar que él fuera "garganta profunda".

EC - ¿Y que llevó a Felt a decir su identidad públicamente y a hacerlo ahora?

RP - Al parecer fueron varios motivos, aunque podríamos resumirlos en que, en palabras de Jorge Batlle, Felt llegó a Estación Carnelli. Luego de años de vivir con la contradicción de haber contribuido enormemente al interés público pero perjudicado en gran medida a su partido y a su presidente, y luego de varios quebrantos de salud, con 91 años, al parecer Felt sintió la necesidad de hacer las cosas públicas en vida. Recordemos que Woodward y Bernstein se habían comprometido a hacer pública la identidad de "garganta profunda" a su muerte.

El nieto de Felt explicó en declaraciones a la prensa que su abuelo había expresado reservas en el pasado a revelar su identidad porque tenía dudas si sus acciones habían sido apropiadas para un hombre del FBI. El nieto recordaba que Felt le había dicho a su madre que "la gente solía pensar que gargante profunda era un criminal pero ahora creen que es un héroe". Es decir, la reivindicación personal fue un factor importante.

EC – También agregó que la familia creía que los mayores, los ancianos "son nuestro tesoro nacional y deben ser honrados y respetados en los años finales de sus vidas". "Mi abuelo es uno de esos hombres especiales", dijo.

RP – Termina diciendo que espera que a la luz de su edad y su salud, van a pedir una zona de privacidad para que disfrute el momento con ellos. Está por verse si los medios estadounidenses van a respetar esa zona de privacidad o si le sacarán a la noticia el mayor jugo posible.

EC - Y en cuanto a los motivos que llevaron a Felt a contribuir con los periodistas en aquel momento, ¿qué se sabe?

RP - Al parecer una mezcla de convicción personal con interés institucional y propio. Por un lado Nixon comenzó a realmente limitando la independencia y la capacidad de acción del FBI. Por otro, las aspiraciones personales de Felt, quien era el candidato lógico para dirigir el FBI, fueron frustradas por la administración Nixon que nombró a otra persona. Como dijimos antes, sin embargo, la decisión de contribuir a la investigación como fuente no estuvo privada de dudas.