(Emitido a las 8.57)

EMILIANO COTELO:
Andrés, hoy te hemos encontrado en Bonn.

ANDRÉS GIL:
Exactamente. Estoy en la sede de la Deutsche Welle, un edificio realmente impresionante ubicado en el corazón de Bonn.

EC - Ya nos contarás sobre tu visita a la Deutsche Welle. Ahora ibas a contarnos sobre otro de tus puntos de recorrida, que también tiene algo que ver con el periodismo.

AG - Justamente; y que me hace acordar mucho a los "qué pasó con" en los que trabajamos nosotros. Porque hoy tuvimos una entrevista con los responsables de un proyecto que se llama "Rescate de noticias". Es una iniciativa que fue fundada en mayo de 1997 – es decir, hace ocho años – a partir de una iniciativa similar que comenzó en Estados Unidos y que luego se adaptó a Alemania. Su objetivo es devolver al primer plano informativo noticias que son importantes para la sociedad alemana pero que los medios no terminan de incluir en sus agendas. Los responsables de estos proyectos hablan de noticias "desplazadas"; es decir, pueden ser noticias que ya estuvieron en el primer plano y después desaparecieron, o noticias que directamente nunca llegaron a ser consideradas, sea por el motivo que sea. La consigna básica es: las cosas que hay para cambiar o para mejorar, antes hay que conocerlas y según esta organización hay muchas cosas que cambiar en Alemania que quizás no se conocen en absoluto.

EC - ¿Cómo trabajan, por ejemplo?

AG - Lo más interesante es la forma cómo se articula el trabajo entre los estudiantes de periodismo de algunas universidades alemanas con el de los profesionales ya consolidados del periodismo y, al mismo tiempo, con especialistas en otras áreas, como las ciencias sociales: ciencia política, economía, cultura. Cada año esta iniciativa divulga una lista de diez temas que a su entender cumplen la doble condición de ser muy importantes para la sociedad alemana, y de no estar suficientemente cubiertos por los medios masivos.

La base para la selección de los temas es el cúmulo de propuestas que hacen los estudiantes –por ejemplo el año pasado se presentaron 130 temas diferentes–, que pasan a consideración de un jurado que hace la selección final. O sea, los estudiantes hacen las propuestas pero a su vez operan como catalizadores de propuestas que pueden venir de periodistas, instituciones sociales, políticas, científicas, ONG o directamente ciudadanos inquietos. Este jurado, que está compuesto por representantes de los estudiantes, de los profesores universitarios de periodismo y de otras ciencias sociales, y por periodistas free-lance de diferentes medios de comunicación masiva, tiene el cometido de elegir los diez temas principales y al mismo tiempo de redactar notas de una extensión razonable a partir de toda la investigación previa que hicieron los estudiantes. Estas notas luego son publicadas en su página web y enviadas por correo electrónico a cientos de medios de comunicación en toda Alemania con el fin de propiciar su divulgación y al mismo tiempo poniendo a disposición de los periodistas absolutamente toda la información recopilada durante la investigación previa: búsqueda en Internet, en bibliotecas, en archivos de diarios, de revistas, material audiovisual. Entonces sobre los temas que se considera que no están suficientemente tratados los periodistas reciben algo bastante digerido que facilita su tratamiento.

EC - ¿Qué te parece si terminamos con algún ejemplo?

AG - Nos comentaban de la última selección, por ejemplo la situación de los deportados de Alemania y la preocupación sobre cómo siguen sus procesos en los países donde son devueltos; generalmente ese seguimiento no se hace en Alemania – no se hace en la mayoría de los países –, se trata de saber qué pasa, por ejemplo si se siguen las normas internacionales de respeto a los Derechos Humanos.

Un tema que en su momento generó mucho ruido acá y que después cayó absolutamente en el vacío fue el de la falta de privacidad de la información clínica sobre los pacientes del sistema de salud; había generado revuelo la manipulación de esta información y la distorsión que propicia a la hora del acceso a los seguros de salud por parte de las personas. Esa noticia aparentemente había caído en la nada y ellos intentaron retomarla.

Otra de bastante actualidad: según esta organización en Alemania nadie estaba al tanto –porque los medios de comunicación no le habían dado mayor trascendencia– de que la Constitución europea que actualmente se está discutiendo establece que todos los países deben aportar al aparato de seguridad de la Unión un monto adicional en materia de infraestructura militar, algo que para el caso de Alemania significaría un aumento del gasto militar del entorno del 50 por ciento. El gran público no manejaba esta información aquí porque los medios no habían tomado conciencia de la exacta medida de su trascendencia.

Me parece que es una forma original de actualizar ciertos temas que por un motivo u otro son desplazados, y al mismo tiempo generar una buena articulación entre estudiantes, sociedad civil y periodismo en la búsqueda de un sistema de información mucho más afinado, mucho más ajustado a los verdaderos intereses de la sociedad.

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Transcripción: María Lila Ltaif Curbelo
Edición: Mauricio Erramuspe