La jueza llegó a la casa de Erika, en Madrid, poco después de las 14.30 de la tarde (hora española) y estuvo una hora en el departamento. Pese a la insistencia de los periodistas concentrados en la puerta del edificio, la jueza se negó a hacer comentarios a su salida.

El cuerpo fue retirado del edificio y llevado al Instituto Anatómico Forense de Madrid, donde se practica la autopsia.

"La Casa Real (de España) se remite a la confirmación que ha hecho la familia, que ha confirmado el fallecimiento", dice un comunicado de prensa que añade que la "familia ha hecho una petición de respeto" tras la muerte de la joven.

Erika Ortiz, tenía 31 años, era madre de una niña de seis años y no tenía ningún problema grave de salud. Era decoradora en la productora de televisión Globomedia y, este miércoles, se supo que había pedido un permiso de dos días libres en la empresa. Los medios españoles agregan que en el pasado había sufrido problemas de estrés y ansiedad.

Desde todos los ámbitos llegaron las condolencias por su muerte.

El príncipe Felipe de Borbón y la princesa Letizia (quien está embarazada de seis meses) recibieron la noticia en Madrid, sin que haya trascendido ningún detalle más al respecto.

La muerte de Erika sorprendió a los reyes de España de viaje, ya que el rey Juan Carlos está en Alemania, invitado por el presidente Horst Köhler, y la Reina se encuentra en Indonesia en un viaje de cooperación. Ella anunció que volverá de inmediato a Madrid.

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, transmitió su pésame a la familia real por el fallecimiento y pidió "el máximo esfuerzo de respeto" a los periodistas.

(Fuentes: AFP y El País, de Madrid)