(Emitido a las 8.31)

EMILIANO COTELO:
Esta semana en Irlanda del Norte se alcanzó un acuerdo calificado como histórico para la formación de un gobierno de poder compartido. Dos archienemigos, el presidente del Sinn Fein, Gerry Adams, y el reverendo Ian Paisley, líder del Partido Democrático Unionista, se reunieron por primera vez en sus vidas para terminar de moldear un gobierno regional con representación de los sectores protestantes y católicos.

Sin lugar a dudas, se trata de un momento clave para la solución de un conflicto interno que ha marcado la historia de las últimas décadas. Por eso vamos a dedicar el análisis internacional de hoy a comprender este acuerdo, su alcance y sus perspectivas.

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Elisa, ¿de qué se trata el acuerdo a grandes rasgos?

ELISA LIEBER:
La primera aclaración, que habla mucho de las características de este acuerdo, es que el pacto fue sellado el lunes, justo cuando finalizaba el plazo para el establecimiento de una estructura gubernamental. Una estructura que representa tanto a católicos republicanos como a protestantes unionistas.

EC - Antes de ir al acuerdo en sí mismo, es importante detallar cómo se encuentra el escenario político en Irlanda del Norte: católicos republicanos y protestantes unionistas.

EL - El Sinn Fein, el brazo político del Ejército Republicano Irlandés, el conocido IRA, representa los intereses de la población católica, que mayoritariamente es republicana. Es decir, quieren salir del Reino Unido de Gran Bretaña e incorporarse a la República de Irlanda. El Partido Democrático Unionista, mayoritariamente protestante, defiende que Irlanda del Norte siga siendo parte del Reino Unido.

El Sinn Fein y el Partido Democrático Unionista fueron las formaciones políticas más votadas en las elecciones celebradas a principios de marzo pasado. En esos comicios los electores debían elegir a los 108 miembros de la Asamblea de Irlanda del Norte. Aquí hay un antecedente importante: los poderes de la Asamblea anterior habían sido suspendidos por el gobierno británico en octubre de 2002 porque no se había logrado establecer una administración regional.

EC - ¿Cómo se llega ahora a este acuerdo?

EL - En enero de 2007 el Sinn Fein decidió terminar su histórico boicot a la policía y al sistema judicial de Irlanda del Norte, a los que consideraba representantes del intervencionismo británico. Este reconocimiento le permitió al Sinn Fein compartir el gobierno con el Partido Democrático Unionista y finalmente se hicieron elecciones para una nueva Asamblea.

EC - Después de las elecciones de marzo lo que se puso en juego fue la formación de un gobierno de poder compartido con autonomía del Reino Unido.

EL - El gobierno británico decía que ambas facciones, el Partido Democrático Unionista y el Sinn Fein, debían ser capaces de ponerse de acuerdo para formar un co-gobierno, porque ninguna de las dos partes tenía apoyo suficiente como para gobernar sola, y además en un conflicto de estas características era importante que ambas participaran en el gobierno. ¿Qué podía pasar si no se ponían de acuerdo? Que se volviera al sistema anterior en el que el gobierno dependía absolutamente de Londres.

EC - Esa era la advertencia que venía del primer ministro Tony Blair.

EL - Se llegó a un acuerdo el lunes para conformar un gobierno de poder compartido que deberá establecerse el próximo 8 de mayo. ¿Quiénes serán las principales autoridades en Irlanda del Norte? El reverendo Paisley será el primer ministro del Ulster. Algo raro, porque Paisley aseguraba hasta hace muy poco que nunca se sentaría en un gobierno de poder compartido con el brazo político del IRA; finalmente lo hizo. El número dos va a ser Martin McGuiness, ex comandante del IRA.

EC - El acuerdo necesitó la aprobación del Parlamento británico.

EL - Algo que se hizo de inmediato, con carácter de urgente. En un solo día la legislación que permite hacer efectivo el acuerdo en Irlanda del Norte pasó por todos los trámites. Esto se hizo ayer, tanto en la Cámara de Comunes como en la de los Lores se aprobó e inmediatamente recibió la sanción legal. Gracias a esta ley y al acuerdo entre protestantes y católicos, el Ulster podrá mantener la autonomía recién recuperada.

EC - Nos vamos a Londres, al contacto con el periodista uruguayo Carlos Cortiglia, radicado allí desde hace más de 15 años.

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Carlos, ¿desde hace cuánto tiempo se arrastraba este conflicto entre unionistas y republicanos en Irlanda del Norte?

CARLOS CORTIGLIA:
Desde hace más de ochenta años. Todo se inició en 1921, en sus principios toda la isla de irlanda era parte del Reino Unido; a raíz de una revolución se llegó a un acuerdo de paz y en 1921 se crearon las dos Irlandas, Irlanda del Sur con capital en Dublín e Irlanda del Norte con capital en Belfast.

EL - ¿Cómo surge esta situación en Irlanda del Norte? ¿Por qué este conflicto?

CC - Es un conflicto que tiene raíces de muy larga data, no es un conflicto nuevo. Lo que es nuevo es este desarrollo tras el cual se ha llegado a un acuerdo para poder finalmente lograr una paz que todos deseamos sea duradera.

EL - Pero a República de Irlanda es independiente e Irlanda del Norte está bajo la tutela de Londres. ¿Qué pasa ahora con este acuerdo?

CC - Este acuerdo se enmarca dentro de lo que en el Reino Unido se denomina "la devolución". "La devolución" fue promovida por el gobierno laborista y creó en Gales la Asamblea de Gales y en Escocia el Parlamento escocés. Se busca descentralizar el poder, llevarlo hacia las regiones, hacia lo que llamamos los estados dentro del Estado. El Parlamento de Irlanda del Norte se enmarca dentro de ese proyecto para permitir una mejor gobernabilidad y, de paso, dado el conflicto tradicional entre católicos y protestantes, darle una solución permanente.

EL - Sería importante explicar la situación en Irlanda del Norte. ¿Por qué tanto conflicto, por qué esta imposibilidad de llegar a un acuerdo entre las dos facciones, y cómo se logra ahora llegar a esta solución?

CC - El problema fundamental es que el partido Sinn Fein quiere la unificación de toda Irlanda como un país independiente del Reino Unido, y el Partido Unionista quiere la continuación del status quo, que es que la provincia de Irlanda del Norte continúe siendo parte del Reino Unido. Son dos objetivos totalmente opuestos. La fórmula que se ha logrado es decir: hasta tanto la mayoría de los irlandeses quiera permanecer dentro del Reino Unido, va a hacerlo, pero para poder tener alguna fórmula de paz tiene que haber una cogobernabilidad para satisfacer los intereses de cada una de las colectividades.

EC - Tú ubicabas la antigüedad de este conflicto, que ya daba la pauta de lo difícil que fue llegar a un entendimiento. Pero además de tiempo, en este conflicto ha habido mucha sangre, mucha violencia, muchas muertes. ¿Cómo pesan esos antecedentes a la hora de pronosticar la viabilidad de esta nueva etapa?

CC - Los antecedentes en cierta forma son la motivación fundamental para que esos sucesos no se repitan, y la única forma de evitarlo es que haya una viabilidad política, que cada colectividad pueda satisfacer sus intereses respetando los de los demás.

EL - ¿Se puede hablar de paz duradera en Irlanda del Norte?

CC - Los que saben de este tema en profundidad dicen que una vez resuelta la mayor parte de los problemas económicos, las diferencias de corte religioso o de enfrentamiento político van a menguar, van a desvanecerse en función de que haya una evolución económica en Irlanda del Norte. En cierta forma el desempleo y la violencia eran lo que llevaba a este permanente enfrentamiento.

EC - ¿Es de esperar que efectivamente la situación económica se encamine? ¿Qué se va a hacer en esa dirección?

CC - En esa dirección hay un gran paquete, que fue dado como condición para llegar a un acuerdo por parte del gobierno británico, de más de 30.000 millones de libras esterlinas a efectos de promover el empleo y el desarrollo económico. Pero no se debe olvidar que en Irlanda del Norte hay grandes intereses especialmente de empresas como Microsoft que han invertido en esa parte del país. Ya están sentadas las bases para que haya desarrollo económico.

Por otra parte, hay que mirar el ejemplo de Irlanda del Sur, el "milagro irlandés" se basó en los dineros aportados por la Unión Europea. La pacificación abre las puertas al desarrollo económico, por cuanto Irlanda del Norte aspira a recibir fondos de la Unión Europea para su propio desarrollo.

EC - Un detalle por el lado de los gestos. Gerry Adams y Ian Paisley no se habían encontrado nunca, no habían dialogado nunca; el lunes se sentaron en una misma mesa, firmaron los acuerdos, pero no llegaron a saludarse, no se dieron la mano. ¿Qué va a pasar en el vínculo entre los dos? ¿Cómo se lee el episodio en ese sentido?

CC - No deberíamos leer más de lo que vimos. Todavía hay sectores dentro del partido del Ulster y en la rama católica totalmente contrarios a cogobernar. Se van a ir dando los pasos naturales, se va a mantener el tema de los gestos, pero lo que hay que ver fundamentalmente es la política de fondo: más allá de los gestos, ¿funciona el gobierno, sí o no? Vamos a juzgar lo que está pasando ahora por los resultados.

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Edición: Mauricio Erramuspe