Estados Unidos vuelve a debatir la tenencia de armas tras la masacre de Virginia Tech
Este lunes, Estados Unidos vivió la peor masacre de una larga lista de matanzas ocurridas en centros educativos. En una universidad alguien, presuntamente un estudiante y por un desengaño amoroso, desató una locura que terminó con la vida de 33 personas. Desde fuera del país, se tiende a responsabilizar a la facilidad para acceder a las armas y el gusto por tenerlas. Paradójicamente, para muchos estadounidenses el problema está en la falta de armas. Contacto con el analista internacional Tomás Mandl, un uruguayo residente en Virginia.
(Emitido a las 8.34)
EMILIANO COTELO:
Treinta y tres personas murieron ayer en lo que, sin duda, es la mayor tragedia ocurrida en un centro educativo en la historia de Estados Unidos.
La Universidad Virginia Tech, ubicada en Blacksburg, estado de Virginia, a 400 kilómetros al suroeste de Washington, fue escenario en la víspera de dos matanzas consecutivas llevadas adelante aparentemente por una misma persona que después se habría suicidado.
ELISA LIEBER:
Según la reconstrucción realizada por las autoridades de la universidad, los servicios de emergencia recibieron la primera alerta a las 7.15 horas. Cuando llegaron a uno de los colegios mayores de la universidad, conocido como Ambler Johnston Hall, donde viven unos 895 estudiantes, al menos dos personas habían muerto en uno de los dos dormitorios.
EC - El asesino no pudo ser apresado y, a pesar de lo que había ocurrido, las clases no se suspendieron hasta conocer el alcance de las noticias. Según la policía, en esos momentos se creía que el tirador había abandonado la universidad.
EL - Pero volvió a actuar dos horas después, en esta ocasión en la Facultad de Ingeniería, Norris Hall, situada al otro lado del campus, a más de 100 metros de distancia, donde mató a 31 personas.
EC - Ocho años después de la masacre de Columbine, en la que murieron dos estudiantes y un profesor, y con el antecedente de más de una decena de episodios similares que se han dado desde entonces, ahora, otra vez, un centro educativo vuelve a ser blanco de la violencia en Estados Unidos.
EL - Quizás las palabras del presidente estadounidense, George Bush, resuman el sentir colectivo.
EL - Bush dijo que las escuelas deberían ser un lugar sagrado donde se estudie y que cuando ese santuario es violado, el impacto se siente en cada aula y en cada comunidad estadounidense.
EC - ¿Cómo se entiende esto? ¿Cuáles son los comentarios esta mañana en Estados Unidos?
Estamos en contacto con Tomás Mandl. Tomás, tiene 27 años es uruguayo, aunque nació en Estados Unidos, en la localidad de Radford, ubicada a 10 minutos de Blacksburg, en el Estado de Virginia. Es master en Relaciones Internacionales por la Syracuse University, en el Estado de Nueva York y actualmente se desempeña como analista internacional en Trans World Services of America, una organización dedicada a la elaboración de informes de prensa sobre países, para distintos medios de comunicación como The Economist, Wall Sreet Journal, New York Times, y Observer.
Además el colaborador del Blog "Nido de Erratas"
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Tomas, te hemos encontrado donde tú resides, en las afueras de Washington.
TOMAS MANDL:
Correcto, vivo en Arlington, Virginia, un suburbio de la ciudad de Washington que queda a cuatro horas de Blacksburg, donde ocurrió la masacre.
EC - Tú eres uruguayo pero naciste en Virginia.
TM - Sí, tengo un vínculo especial porque nací en Blacksburg, donde mis padres estaban estudiando, ahí en Virginia Tech.
EC - Conoces la localidad donde está situada la universidad y supongo que también la propia universidad.
TM - Sí, he vuelto varias veces, la última vez fue en mayo del año pasado, y conozco muy bien el campus y la ciudad, incluso tengo gente conocida que vive en Blacksburg.
EC - Es todo un mundo, todo un complejo de edificios de grandes dimensiones.
TM - Así es, como la mayoría de las universidades en Estados Unidos, un campus en el que están no sólo los edificios educativos sino también los edificios donde residen los estudiantes. Virginia Tech en particular es la universidad más grande del estado de Virginia, con más de 25.000 estudiantes y alrededor de 10.000 empleados. Si se compara con Colonia del Sacramento, que tiene 25.000 habitantes, se puede apreciar que es un número bastante grande y habla de que la universidad es una ciudad en sí misma.
EC - El campus tiene 1.050 hectáreas de extensión.
TM - Exacto, es un lugar bastante grande, con 100 edificios. Es un terreno difícil, no es un terreno plano si no un terreno en una zona rural, con elevaciones, lo que de alguna forma explica las dificultades que tuvo la policía para realizar los procedimientos. Ayer había muchísimo viento en el área, lo que hizo más difícil que participaran helicópteros.
EC - Después de estas primeras preguntas que apuntaban a ubicarnos físicamente en el lugar, vamos a ubicarnos a lo que ocurrió ayer. A última hora de ayer la policía informó que el supuesto asesino era un hombre joven de rasgos asiáticos que se suicidó después de la matanza. ¿Estos elementos ya fueron confirmados? ¿Hay más datos?
TM - No están confirmados, aunque la mayoría de las fuentes asegura que ha sido un solo asesino. Yo hablaba con un abogado de aquí que me decía que muchos de los futuros juicios se decidirán en estos primeros momentos, entonces quizás la universidad, el FBI, la policía, estén cuidando qué información dar a la población. Se presume que la persona es de origen asiático, un estudiante.
Efectivamente, el primer incidente se produjo alrededor de las 7 de la mañana de Estados Unidos, a las 8 de Uruguay, en los dormitorios, y dos horas más tarde se produjo la matanza mayor en la escuela de ingeniería, donde murieron más de 30 personas.
EC - En algún momento se especuló con que el motivo de esta matanza fue un desencanto amoroso, un problema amoroso. ¿Ha habido algo más a propósito de esta hipótesis?
TM - Sigue siendo la misma hipótesis, un problema amoroso. Al parecer una de las primeras víctimas fue la ex novia del asesino y una de las principales fuentes de la policía es un amigo o conocido del asesino.
EL - Llama la atención que entre una matanza y la otra, la de mayor dimensión, haya habido un lapso de dos horas. ¿Por qué después de los primeros asesinatos no se evacuó el campus?
TM - Es la gran pregunta, fue lo que la gente le preguntó ayer durante la conferencia de prensa que dieron el presidente de la universidad y el jefe de policía de la universidad. No se sabe todavía por qué se tomó esa decisión. Todo indica que lo mejor habría sido cerrar el campus después del primer tiroteo y traer una fuerza policial mayor. Sobre todo teniendo en cuenta dos antecedentes importantes del mes de abril, el 2 de abril hubo una amenaza de un recluso que había escapado de una cárcel cercana y se había escondido en el campus, y el 14 de abril hubo una amenaza de bomba en el campus. Esos incidentes van a tener mucha fuerza en los futuros juicios sobre cómo se manejó la policía.
EL - La policía dice que actuó con toda la información disponible, que es un centro muy grande, con 26.000 estudiantes, con más de 1.000 hectáreas, y que entonces costó mucho tomar decisiones rápidamente. Seguramente esto va a traer bastante cola.
Parece raro decir que esta es la mayor matanza en un centro educativo en Estados Unidos. Estamos hablando de un tema que ya tiene antecedentes, no estamos hablando de un caso aislado. Quizás el más recordado sea el de Columbine de 1999, pero desde entonces se produjeron más de una decena de asesinatos, tiroteos o matanzas en centros educativos. ¿Cómo cae esto en la sociedad estadounidense?
TM - Cae en el debate sobre la tenencia de armas, que es uno de los debates recurrentes en la política interna de Estados Unidos. La Constitución de Estados Unidos, en su segunda enmienda, establece y protege el derecho a portar armas. La población está dividida, y la división no se da entre partidos sino más bien entre áreas, las áreas de la costa y las ciudades se oponen a una total libertad de armas, en cambio las áreas más rurales, como Virginia o Blacksburg, donde ocurrió el accidente, tienen una visión mucho más favorable sobre la tenencia de armas.
Hay dos incidentes muy claros en ese sentido en el contexto de Virginia. Hace poco un ayudante del senador de Virginia fue detenido en el Congreso por portar armas. Y es muy común en la legislatura del estado de Virginia que los representantes tengan armas. Pero la opinión pública está dividida, ayer una primera encuesta sobre el hecho de Virginia Tech indicaba que la mayoría de las personas creía que se trataba de un problema de educación de los padres, no de un problema de armas.
EC - Probablemente las facilidades para la tenencia de armas tengan algo que ver, pero es asombroso que Estados Unidos tenga una historia de masacres de este tipo desarrolladas en centros educativos. ¿Por qué pasa este tipo de cosas en centros educativos?
TM - Es difícil de explicar, el último hecho anterior al de ayer en un centro educativo fue el que se dio en octubre del año pasado en una escuela amish en el estado de Pennsylvania, donde una persona de la comunidad mató a cinco niñas. No tiene mucha explicación, quizás una explicación sea el armamento, pero la opinión pública no está de acuerdo, al menos en su mayoría, en restringir el uso de armas. Sobre un hecho que se dio en Texas en 1991, cuando una persona entró a un shopping center y mató a unas veinte personas, la opinión en Texas era que el problema había sido que las personas no tenían más acceso a armamentos, porque, si no, se habrían podido defender.
EC - El argumento se utilizaba en sentido contrario.
TM - Exacto.
EL - Seguramente esto va a traer mucha reflexión. Estábamos revisando algunos editoriales de diarios estadounidenses e iban en ese sentido, por el tema de la tenencia de armas, pero sobre todo por qué está pasando esto en la sociedad estadounidense. The New York Times decía "siempre miramos hacia fuera buscando al enemigo fuera del país, pero tenemos los enemigos dentro". Seguramente va a haber mucha reflexión, hay muchas cuestiones por discutir.
TM - Sí, va a ser un tema serio. Ha sido la mayor tragedia después del 11 de setiembre, por lo menos en cuanto a cobertura periodística, y supongo que en el correr de las próximas dos semanas o quizás un mes va a seguir siendo un tema central en la mayoría de los medios periodísticos de Estados Unidos.
EC - Sí, hay distintas facetas arriba de la mesa para considerar. Por ejemplo, una de las consecuencias de un episodio como este es que aumenta la psicosis por las normas de seguridad. Ya a partir de matanzas anteriores en institutos de enseñanza en Estados Unidos se habían comenzado a emplear dispositivos similares a los que se utilizan en aeropuertos, en instituciones de gobierno y en grandes compañías. Supongo que esto se va a agravar ahora. Entonces otra pregunta es cuándo se corta esta espiral.
TM - Es difícil, en las universidades de Estados Unidos hay mucha libertad y es muy difícil establecer medidas de seguridad como quizás se pueda hacer en un aeropuerto. El debate va a ser muy interesante pero no veo que en el futuro vaya a haber, por el lado de la ley, grandes prohibiciones en cuanto a la tenencia de armas. Hace poco el gobierno de la ciudad de Washington DC intentó limitar el uso de armas y la Suprema Corte de Estados Unidos derogó la ley. Los cambios seguramente vendrán por el lado de una negociación entre las universidades y la policía en cuanto a qué niveles de seguridad se van a implementar.
EL - Michael Moore va a poder hacer otra película con este episodio.
TM - Lamentablemente tiene material de sobra.
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EC - Hay toda una lista de hechos de violencia en centros educativos en Estados Unidos.
En abril de 1999 dos adolescentes asesinan a dos estudiantes y a un profesor y después se suicidan en la escuela secundaria de Columbine, Colorado.
En mayo de 1999 un alumno mata a seis estudiantes en el estado de Georgia.
En noviembre de 1999 un estudiante mata a una compañera de aula de 13 años de edad en Nuevo México.
En febrero de 2000 una niña de seis años de edad muere por los disparos de otro alumno.
En marzo de 2001 un alumno abre fuego en una escuela de California y mata a dos estudiantes.
En abril de 2003 una adolescente mata al director de una escuela en Pennsylvania y después comete suicidio.
En mayo de 2004 cuatro personas resultan heridas en un tiroteo en una escuela de Maryland.
En marzo de 2005 un alumno de Minnesota mata a nueve personas y después se quita la vida.
En noviembre de 2005 un estudiante de Tennessee asesina al vicedirector de una escuela y también hiere a dos trabajadores administrativos.
En setiembre de 2006 un sujeto asesina a una estudiante adolescente de las dos que había tomado como rehenes en una escuela en Colorado y luego se quita la vida.
Dos días más tarde un adolescente mata al director de una escuela en Casenovia, estado de Wisconsin.
En octubre de 2006 un hombre mata a cinco niñas en una escuela de la comunidad amish, en Pennsylvania, para luego suicidarse.
Y ahora, en abril de 2007, un pistolero asesina a 32 personas en la Universidad Virginia Tech, en el estado de Virginia.
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Edición: Mauricio Erramuspe