Juntos Lacalle-Larrañaga
La fórmula presidencial del Partido Nacional está definida. "La revolución recién empieza y vamos a ganar", afirmó Larrañaga al anunciar que aceptó formar parte de la fórmula presidencial. De inmediato estalló una ovación en la Casa del Partido Nacional.
Tras la gran votación blanca (43,1% según Factum) por la que superó al Frente Amplio (42,2%) en estas Elecciones Internas, Luis Alberto Lacalle se convirtió en el candidato a la Presidencia de la República por el Partido Nacional (57,3% frente al 42,6% de Jorge Larrañaga).
Luego de los festejos en Unidad Nacional, sector que lidera el ex mandatario, la vacante para ir de vicepresidente de Lacalle no se hizo esperar cuando los dos líderes blancos, ahora ex rivales, se juntaron para estrechar un abrazo en la sede del Directorio del Partido Nacional.
"Luis Alberto Lacalle me ha ofrecido la candidatura a la Vicepresidencia de la República. Y ese sentido del deber, ese amor a mi Partido y a la patria me lleva a expresar que lo voy a acompañar", afirmó Larrañaga.
Luego de gritos y aplausos que siguieron a este anuncio, Larrañaga agregó: "Con una condición; que se sepa en todos los rincones de la República que la revolución recién empieza y que vamos a ganar".
El senador por Alianza Nacional dijo que "lo bueno y lo mejor está por venir", pero "solamente si viene un gobierno del Partido Nacional".
Respecto a su derrota en la interna del Partido, Larrañaga señaló que "la democracia sirve para cuando se gana y sirve para cuando se pierde. Cuando se pierde, hay que tener la dignidad de saber que la lucha empieza mañana (lunes) y que integramos a este gran Partido".
Agregó que "lo que importa es estar luchando por un proyecto político que se llama Partido Nacional (...) No se puede vivir sin luchar".
Por último, Larrañaga felicitó a Lacalle, porque, dijo, "ganó en buena ley".
Por su parte, y luego de manifestar respetuosamente su alegría por su reciente victoria, Lacalle se mostró optimista frente a la capacidad de su partido para conducir los destinos del país. "Hoy tenemos la responsabilidad de llevar la bandera del Partido Nacional, un partido que llega a esta confrontación desprovisto de sentimientos menores, pero convencido de que puede gobernar mejor la nación; de que puede y de que la va a gobernar mejor", aseguró.
Para ello, el líder de Unidad Nacional dijo que es preciso que la unidad "no sea una mera expresión, sino un convencimiento profundo". En ese sentido, agregó: "Si en algún momento salió de nuestros labios un concepto que pudiera menoscabar esa unidad, queda olvidado en este momento".
Además, manifestó que el único capaz de lograr la unidad nacional es el Partido Nacional, "que por algo lleva el nombre de la nación".
Lacalle tuvo palabras de afecto para su relación con Larrañaga. Recordó que un día estuvieron en lugares opuestos uno como vencedor y el otro como ganador- y que "si alguna vez se cruzó alguna rispidez, siempre terminó con una mano tendida y otra apretándola".
"Hoy queda saldada lo que hasta hace unas horas era una competencia -no fue nunca un combate-; está terminada y olvidada para que confluyan estas dos tendencias y formen un solo haz [...] Habrá un solo partido, una sola fuerza, una sola voluntad", subrayó.
También recordó especialmente las palabras de Dardo Ortiz: "Lo que es bueno para el país es bueno para el Partido Nacional", idea que siempre llevó al Partido Nacional a buscar acuerdos con todas las fuerzas políticas, según destacó el candidato.
Con respecto a las elecciones nacionales, las cuales dijo- serán "duras", retomó la idea de "pacto nacional", más abarcativo que un "pacto social", para que luego de la campaña "no quede un país partido en dos".
En cuanto a sus ideas de gobierno, dijo que el objetivo es lograr un país políticamente soberano, socialmente justo y económicamente próspero. "Es una gran meta, pero por eso es una meta para el Partido Nacional", declaró.
Por último, envío su saludo a quienes serán sus próximos rivales el 31 de octubre: José Mujica, Pedro Bordaberry y Pablo Mieres.
En tanto, Carlos Julio Pereyra, presidente del Partido Nacional, afirmó que en las próximas elecciones se tiene que "reestablecer el estilo de vida que ha roto el actual gobierno".
En conferencia de prensa, dijo que el actual gobierno estuvo "recogiendo el fruto" que otros sembraron. Señaló que ganar las elecciones no es sólo "gloria partidaria", sino que el Partido Nacional es el "padre del sufragio limpio" y que buscará eliminar la intolerancia que ha estado gobernado el estilo de algunos gobernantes".
Pereyra afirmó que está viviendo el momento de la victoria del partido y extendió sus felicitaciones y augurios de éxito a los precandidatos.
Por último, indicó que ésta es una "contribución que, una vez más, el Partido va a hacer a la Republica".
"No sólo irán los blancos, irán ciudadanos honestos de nuestro país que quieran restablecer el régimen de derecho en nuestro país", concluyó.