El estancamiento de los últimos 10 días en la Cumbre del Clima se vio interrumpido hoy, cuando Clinton confirmó  que Estados Unidos sumará 100.000 millones de dólares al año desde 2020  para cooperar  con los países en desarrollo, si es que finalmente se logra un entendimiento.
En este sentido, la jerarca estadounidense agregó que esto será posible solo si las grandes potencias se comprometen a trabajar con "transparencia".

Esta es una condición que a juicio de Estados Unidos no se está cumpliendo. Según Clinton,  las grandes economías emergentes han dado "marcha atrás" en sus compromisos para luchar contra el cambio climático.

La financiación   anunciada por  el gobierno norteamericano puede ser clave, debido a que los países emergentes se han mostrado muy firmes respecto a no firmar ningún acuerdo, si antes no se conocen medidas concretas en materia de apoyo económico.

Ahora se deberá esperar por la posición que asuma China, debido a que Clinton condicionó la ayuda a que el gigante asiático deje auditar sus emisiones.

En primera instancia, China entiende que ceder en este punto para que la ONU realice esta tarea significaría una injerencia intolerable. De esta forma visualiza como lejano un acuerdo vinculante de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, según da cuenta El País de Madrid.
Por su parte, representantes de India adelantaron este jueves que los países ricos tienen preparada "una campaña de propaganda", para asignarle la culpa a los países pobres si es que finalmente las conversaciones fracasan.

Este viernes será el último día de reuniones donde 120 líderes políticos y jefes de Estado intentarán sellar un nuevo pacto en busca de reducir sus emisiones de CO2.