Mercurio causa homosexualidad en algunas aves
Un tóxico medioambiental vuelve homosexuales a los ibis blancos, lo cual afecta las posibilidades reproductivas de esas aves, según revela un estudio de la revista Proceedings B de la Royal Society.
Acorde a investigadores de la Universidad de Florida (EE UU), el mercurio metílico, la forma biológica más activa del mercurio, provoca alteraciones en el sistema nervioso y hormonal en dicha especie.
La contaminación de mercurio proviene de la quema de carbón y basura, así como de los desechos de la industria minera.
"Sabíamos que el mercurio deprime sus niveles de testosterona (la hormona masculina)", sostuvo Peter Frederick, investigador de la Universidad de Florida y líder del estudio en diálogo con BBC Mundo. "Pero no esperábamos esto", agregó.
Se realizaron experimentos en tres poblaciones de esas aves y se demostró que, en las más expuestas al tóxico, el número de parejas de ibis homosexuales era hasta 55 por ciento mayor. Esta tasa no se registró en grupos de aves que vivían al aire libre y que se encontraban menos en contacto con el mercurio metílico.
Asimismo, la sustancia también hace que las parejas heterosexuales de ibis tengan menos crías. Además, en los grupos afectados por el mercurio los machos eran menos agresivos y no resultaban atractivos para las hembras.
Los experimentos constaban de alimentar a los íbises blancos con pequeñas porciones de comida con una concentración de mercurio equivalente a la que se pueden encontrar en los camarones y los cangrejos que componen la dieta de las aves.
Los humedales, como los Everglades de Florida, en EE.UU., en donde habitan estas aves son muy vulnerables a la contaminación por mercurio. Además, las bacterias que viven en el barro alteran químicamente el mercurio, dando como resultado su forma más tóxica: el metilmercurio.