"Se trata de un extraordinario fenómeno astronómico: la lluvia de estrellas fugaces de la Gemínidas, que está siendo visible en el mundo desde el pasado viernes y que se podrá apreciar en condiciones excepcionales en esta noche con luna nueva. La Gemínidas es una lluvia que produce meteoros de velocidad moderada. En muchos casos son brillantes y pueden apreciarse con gran facilidad".

Según Brunetto, la actividad suele alcanzar hasta 120 meteoros por hora.

"Es interesante saber que el cuerpo progenitor de las Gemínidas es un asteroide de nombre Faetón y de hecho es la primer lluvia estelar claramente ligada con un asteroide. Los científicos estiman que Faetón es un cometa extinto, de actividad extinguida, y que las partículas han sido eyectadas al espacio hace muchos siglos".

El docente de Astronomía explicó que se le llama equívocamente lluvia de estrellas "porque antiguamente las personas estaban convencidas que eran estrellas que caían del cielo, de ahí el nombre totalmente impropio que lleva. En realidad se trata de cuerpos poliedros, cuerpos irregulares que gravitan alrededor del sol y que al ser atraídos por la fuerza de gravedad terrestre atraviesan la atmósfera a altísimas velocidades".

Y continuó explicando cómo se produce el fenómeno lumínico: "La fricción con las moléculas del aire las vuelve incandescentes y dejan tras de sí ese trazo luminoso que parece emerger de un punto del espacio que se llama el radiante. En este caso el radiante aparece proyectado en la constelación zodiacal de Géminis y de ahí el nombre de Gemínidas que lleva esta lluvia de meteoros".

Consultado sobre a qué distancia pasa de la Tierra, Brunetto dijo: "Generalmente la incandescencia comienza a los 120 km de altura, en los límites superiores de la atmósfera, y culmina aproximadamente a los 80 km sobre la superficie del planeta".

Según Brunetto desde Uruguay y todo el hemisferio austral el radiante aparece después de la medianoche. "Las horas más propicias para el disfrute de este acontecimiento celeste son las de la alta noche y particularmente aquellas horas que preceden al crepúsculo matutino".

Y concluyó con recomendaciones para ver el acontecimiento: "El fenómeno es fácilmente apreciable a simple vista, a ojo desnudo, no requiere ningún tipo de protección. Generalmente lo que se sugiere es ubicarse en lugares libres de contaminación lumínica, evitar los focos de luz. Particularmente los lugares más aptos son los el mar, los campos y especialmente las sierras".

Foto: EFE (Archivo).