Impertérrito ante las enormes mandíbulas que tritura los huesos de la criatura escamosa, el leopardo se pone a comer junto al cocodrilo que, sorprendentemente, parece feliz de compartir a su rica presa.

Para el cachorro leopardo la carne fresca del impala resultó un bocado difícil de resistir, ya que saltó de su árbol y se acercó al cocodrilo en la orilla de la carretera.

Después olfateó cuidadoso y finalmente tomó de un gran mordisco un pedazo del impala, a centímetros de las fauces del cocodrilo.

El cocodrilo se mostró tolerante y simplemente siguió masticando a su presa.

Al cabo de unos minutos, el cocodrilo recogió a su impala considerablemente menor al que había cazado y se dirigió por la carretera. El leopardo observaba como se retira su amigo ocasional.

Las increíbles fotos de los dos animales devorando al impala fueron tomadas por los fotógrafos que integraban una gira en el Parque Nacional de Luangwa Sur, en Mfuwe, Zambia.

Los guardaparques del lugar han identificado a diez leopardos diferentes en los alrededores de los campamentos de este parque que cuenta con una de las mayores concentraciones de vida animal en África. También se han reportado avistamientos de más de 200 cocodrilos en cacerías o tomando el sol.

Los impala son los más animales más numerosos en este parque que tiene más de 60 diferentes especies de animales, incluyendo hipopótamos, búfalos, jirafas, cebras y cerca de 400 especies de aves.