Año Nuevo

Petardos multiplican por 25 la contaminación de Pekín

Petardos multiplican por 25 la contaminación de Pekín
EFE

El lanzamiento de petardos con motivo del Año Nuevo lunar disparó hoy los índices de contaminación de Pekín y la concentración de partículas PM 2,5 -las más dañinas para la salud- se multiplicó por 25 en un lapso de siete horas.

Al dar la bienvenida al año de la cabra y despedir el del caballo, centenares de chinos encendieron petardos y fuegos artificiales cumpliendo la tradición del país asiático que dice que este acto ayuda a alejar la mala suerte.

Así, de una concentración de 16 microgramos por metro cúbico de las llamadas partículas PM 2,5 a las 18.00 horas locales (10.00 GMT) de ayer en Pekín se pasó a 407 microgramos por metro cúbico a la 01.00 local de hoy (17.00 GMT de ayer), según las mediciones difundidas en su cuenta de twitter por la Embajada de EEUU en China.

Estas partículas, de un diámetro inferior a 2,5 micras (mil veces más pequeñas que 2,5 milímetros), son las consideradas más perjudiciales porque entran directamente en los pulmones, y la Organización Mundial de la Salud (OMS) sitúa el umbral de salubridad en una media de 25 microgramos por metro cúbico en 24 horas.

Pekín amaneció hoy bajo una espesa capa de "smog" por el humo de los cohetes, que contrarrestó la bajada de la contaminación provocada por el cierre de fábricas y la disminución del tráfico por las vacaciones.

Las tracas y los castillos de fuegos artificiales iluminaron la velada del Año Nuevo Chino, a pesar de las restricciones adoptadas por las autoridades del gigante asiático.

Un total de 138 ciudades del país asiático adoptaron prohibiciones y 536 urbes restringieron los fuegos artificiales con el objetivo de disfrutar de un cielo más limpio durante estas marcadas fechas, según datos el Ministerio de Seguridad Pública de China.

Además, las autoridades realizaron a lo largo de las últimas semanas varios llamamientos a la población del país para que limitara el lanzamiento de petardos considerando sus consecuencias para la calidad del aire.

La previsión de escaso viento para las próximas horas en algunas zonas del país, especialmente en el centro, unida al continuo lanzamiento de petardos, podría agravar aún más la concentración de contaminantes en el cielo. EFE