La deforestación acelerada de la selva amazónica
Calificada de pulmón del mundo, la selva de la Amazonia desde hace años sufre una constante reducción de su superficie. Casi 20% de su superficie desapareció en 40 años, estima la organización Greenpeace.La tala ilegal de maderas preciosas, el desmonte para sembrar soja o palma africana, el tráfico de especies o las actividades extractivistas son, entre otras, algunas de las causas que explican el problema.
En diciembre próximo, en París, tendrá lugar la COP 21, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el cambio climático, que bajo presidencia del gobierno francés buscará alcanzar un acuerdo de consenso para combatir el calentamiento global de nuestro planeta.
"Ese encuentro debe adoptar medidas obligatorias para que los estados responsables de la producción de bióxido de carbono cambien de política y reduzcan su producción", afirma Vicente Romero, profesor de la Universidad Paris VIII a RFI.
La mayor parte de los diecisiete países de América del Sur forman parte de los estados megadiversos del mundo, pero la explotación minera y otras actividades se han vuelto una pesadilla. "Es necesario respetar la madre tierra, debe haber un instrumento jurídico para reglamentar las empresas transnacionales, responsables en gran parte de la contaminación y deforestación de la Amazonia", afirma Claudio Chacha, integrante de la Federación Euroecuatoriana de Asociaciones y miembro de la red latinoamericana por los derechos de la madre tierra y la justicia social.