Sobre la reforma del agua y las concesiones privadas
(Mensaje enviado el martes 16 de noviembre)
Estimado Emiliano Cotelo: Hoy escuché, como lo hago cada vez que puedo, el programa En Perspectiva y me ha parecido oportuno enviarle estas líneas con algunas ideas que si usted considera pueden serle de utilidad para enriquecer el debate sobre las concesiones de agua y saneamiento y aportar en la búsqueda de una salida, dejo a su criterio la utilización de las mismas. La complejidad del tema La interpretación y aplicación de la Reforma Constitucional sobre el agua parece ser un tema complejo... Sería recomendable que se analizara con rigurosidad y se antepusiera el interés público frente a cualquier interés particular, siempre respetando la normas vigentes. La principal duda surge si se aplica en forma retroactiva o no... Esto puede tener consecuencias importantes (negativas o positivas) para los ciudadanos que habitan en las zonas de las concesiones, como usuarios del servicio, y para todos los ciudadanos uruguayos, como contribuyentes (si se hace un mal manejo de la situación y el Estado termina pagando sumas siderales) Síntomas de esa complejidad Lo que está claro es que no existe una sola interpretación. No la tienen las empresas privadas que hoy prestan el servicio, tampoco los dirigentes políticos... y me animaría a decir que ni siquiera muchos de los que fuimos a votar un texto que, para los "entendidos", aceptaba más de una interpretación (no sólo sobre la retroactividad a las concesiones ya vigentes, sino también sobre la estatización o no de las aguas pluviales). Las dos empresas privadas que operan el servicio en forma legal (son concesionarias y no prestadores sin autorización) tienen una interpretación diferente... Voceros de URAGUA afirman que la concesión cae, pero voceros de AGUAS DE LA COSTA afirman que las concesiones otorgadas antes del plebiscito se mantienen. Es extraño que existan dos interpretaciones desde el sector privado... Probablemente además de la interpretación de cómo se aplica la constitución deben incidir otros factores, de conveniencia económica o de oportunidad para continuar o no con un servicio, que deben estar pesando en estas interpretaciones tan disímiles desde el lado de las empresas concesionarias. La mayoría de los dirigentes políticos que apoyaban la reforma se muestran cautos y consideran que el tema debe ser analizado, o incluso llegan a afirmar que las concesiones vigentes al momento de la reforma no caen... Mientras que la mayoría de los dirigentes políticos que no deseaban la reforma sostienen que el Estado debe hacerse cargo de todos los servicios en forma inmediata. Y por si esto fuera poco... para justificar más la complejidad del tema... la gente no votó necesariamente alineada. Por ejemplo, en el momento de escrutar los votos del circuito, donde participé como integrante de la mesa receptora, pudimos constatar que: - Algunos votantes del Encuentro Progresista-Frente Amplio-Nueva Mayoría no habían incluido la papeleta del SI. - Algunos votantes del Partido Colorado habían incluido la papeleta del SI. - Muchos votantes del Partido Nacional no había incluido la papeleta del SI. ¿Existen salidas a este problema? De lo que he escuchado hasta ahora parece que nuestra organización institucional no prevé la existencia de un organismo que interprete la Constitución, ante dudas como la que hoy nos preocupa. Se maneja la posibilidad de una ley interpretativa (en este caso resolvería el Parlamento, electo por la ciudadanía)... pero quienes impulsaron en su inicio el Plebiscito no lo estarían aceptando... y quienes se opusieron tajantemente al SI tampoco lo aceptarían. Las futuras autoridades del Poder Ejecutivo dicen que el problema de las concesiones actuales las debe resolver este Gobierno... Pero ante una señal del actual Gobierno (que todavía no es norma jurídica sino anuncios o instrucciones a OSE o URSEA) de que la resolución sería que el Estado retome los servicios... integrantes del futuro Gobierno manifiestan su desacuerdo con la resolución que se adoptaría. No existe entonces una interpretación similar de la reforma entre los dirigentes del partido que está en el Gobierno y los dirigentes del partido que se desempeñará en el futuro período de Gobierno. Por otro lado, tampoco el segundo partido político en el orden de votos obtenidos, tiene una visión totalmente coincidente con los dos anteriores. Me cuesta admitirlo pero quizás la única solución sea un nuevo plebiscito con una sola frase, que a vía de ejemplo podría decir: LA REFORMA SOBRE EL AGUA SERÁ APLICABLE A LAS CONCESIONES POSTERIORES A SU APROBACIÓN Y NO A LAS QUE ESTABAN VIGENTES A ESA FECHA. La gente que esté de acuerdo con esa frase votará por el SI, el resto no introducirá la papeleta. Seguramente algunas voces se van a levantar diciendo que "se van a gastar más recursos públicos"... Una solución a ese problema de "costos" sería plebiscitar esa reforma en ocasión de las elecciones municipales... Seguramente otras voces dirán "no es conveniente porque se van a mezclar temas locales con el tema del plebiscito que se hace a nivel nacional"... Creo que ese argumento es fácilmente rebatible... En realidad el agua potable y el saneamiento son dos servicios de alcance local (a excepción de las fuentes de suministro de agua). Entonces pienso que sería muy positivo que el tema se planteara en ocasión de las elecciones municipales. Es cierto que habría que esperar seis meses más para dilucidar el tema sobre la continuidad o no de las concesiones en Maldonado... Pero creo que todos nos veríamos beneficiados de que la reforma constitucional se aplique sin dobles "bibliotecas" y pleitos que a nadie benefician... salvo a quienes ofrecen los servicios durante los juicios. Ante tantas dudas e interpretaciones disímiles de los "entendidos" en el tema, quien no acepte una dilucidación clara por parte de la ciudadanía probablemente no esté pensado en el interés público. Es importante también que la ciudadanía sea informada de todos los pro y contras de la decisión a adoptar. Sin duda que quedará pendiente el eventual conflicto entre el punto de vista local y el nacional... pero estamos en un país unitario y hay normas que rigen para todo el país. Esperando que estas líneas sirvan como una contribución a los aportes de ideas constructivos que muchas veces surgen de su programa. Un escucha asiduo.