Especiales

Apertura del Foro

El periodista Emiliano Cotelo, director de En Perspectiva, y los presidentes de la Asociación Cristiana de Dirigentes de Empresa, Eduardo Campiglia, y del Colegio de Contadores, Economistas y Administradores del Uruguay, Julio César Porteiro, presentaron la edición 2005 de este tradicional foro con el equipo económico de gobierno, el primero en la administración del Encuentro Progresista.

EMILIANO COTELO:
Señoras y señores, tengan ustedes muy buenos días.

La Asociación Cristiana de Dirigentes de Empresa (ACDE) los invita a compartir un nuevo foro con el equipo económico de gobierno.

Un foro que ya es tradicional, pero que este año concita una atención especial, como queda claro al observar este salón del Complejo Punta Cala, con su capacidad colmada, más de 600 personas ubicadas en las mesas y decenas más que no pudieron conseguir localidades.

Está claro que ese interés se debe en buena medida a la expectativa, la gran expectativa, que existe hoy entre los agentes económicos y en la sociedad en general a propósito de los primeros pasos de este primer gobierno de izquierda en la historia de nuestro país.

Todo ello amplificado, además, porque a raíz de la crisis económico-financiera buena parte de la población ha tendido a estar un poco más involucrada en temas que quizás antes no le eran tan cercanos, como por ejemplo los detalles de la política económica del gobierno.

Así, con el telón de fondo de la polémica por el precio del dólar y la política monetaria, aparecen hoy en primer plano varios asuntos de importancia central para el futuro y la sustentabilidad de la economía de nuestro país.

Entre otros: el equilibrio fiscal, el manejo de los altos niveles de endeudamiento público, los objetivos de inflación y las herramientas para alcanzarlos, las reformas estructurales e institucionales tan postergadas, y finalmente con todo esto como contexto, el margen para la aplicación de políticas sociales.

Con ese marco es que abordamos hoy esta nueva edición del Foro Económico.

Pero más allá de estas consideraciones generales, invitamos ahora a hacer uso de la palabra al presidente de ACDE, ingeniero Eduardo Campiglia.

EDUARDO CAMPIGLIA:
Primero queremos agradecer a las autoridades nacionales, en particular al equipo económico, que nos permite continuar con esta tradición de presentar su propuesta en el seno de ACDE; agradecer a nuestros patrocinantes, porque sin ellos este Foro no sería posible; además a todos los participantes, a nuestros invitados especiales, y pido disculpas a todos los que quisieron participar y no tuvieron lugar.

ACDE fue fundada hace más de 52 años por un grupo de empresarios cristianos que, inspirados en la enseñanza social cristiana, compartían una misma visión: la promoción del bien común, es decir, el conjunto de condiciones de la vida social que hacen posible a todos los hombres y las mujeres el acceso a una civilización más humana y fraterna.

Para concretar ese objetivo tuvieron la iniciativa de estudiar y capacitarse respecto de tres puntos claves: uno, responsabilidad con relación al personal de su empresa; dos, trabajar en el tema de la responsabilidad social de la empresa, que hoy en ACDE se llama Índice de Responsabilidad Social Empresarial; y tres, profundizar en la formación personal tanto de los empresarios como de los funcionarios, lo que hoy en ACDE se llama ISEDE (Escuela de Negocios de ACDE).

En pocas palabras, tuvieron la visión de que la enseñanza social cristiana es aplicable a la sociedad y a la empresa sin menoscabo de una sana rentabilidad, eficiencia y participación.

Hoy los empresarios de ACDE tenemos claro que si nosotros y nuestro personal alcanzamos mayores niveles de realización y generamos productos de mejor calidad, nuestra empresa podrá crecer y estaremos en condiciones de contribuir con más fuentes de trabajo formal, digno y genuino.

En octubre del año pasado, antes de las elecciones nacionales, en ACDE se generó un documento cuyo objetivo era colaborar para alcanzar una visión compartida de país, al que adhirieron las principales cámaras empresariales y obtuvo el consenso de todos los candidatos a la Presidencia de la República (ese documento se adjunta en la carpeta del Foro).

Entendemos que en él hay un tesoro, pues nos pusimos de acuerdo en aspectos cruciales de antemano, sin distinción de partidos, lo que implica la responsabilidad, para todos los que lo suscribimos, de hacer los máximos esfuerzos para lograrlo.

Resaltamos de ese documento: un marco propicio para la inversión productiva nacional y extranjera; un sector público administrado por profesionales que ofrezcan servicios de calidad; la búsqueda de un crecimiento económico sustentable; y el desarrollo de la educación como instrumento y mejora social.

Señor ministro: para ACDE es fuente de constante preocupación el aumento de la pobreza y de la desocupación, porque entendemos que el trabajo humano es muy superior a los otros elementos de la vida económica, porque estos últimos no tienen otro papel que el de instrumentos.

En los próximos días su equipo estará abocado a la formulación del presupuesto quinquenal, que muchos consideramos como una de las leyes más importantes después de la Constitución de la República.

Nosotros los empresarios sabemos de las dificultades de compatibilizar limitados recursos con necesidades ilimitadas. Pensamos que el nuevo gobierno tiene la oportunidad de reasignarlos a las necesidades prioritarias que la sociedad y el país requieren a efectos de insertarnos con éxito en el mundo que nos toca enfrentar, con sus desafíos y oportunidades.

Pensamos que el Estado uruguayo debe ser formulado a la luz de la nueva realidad, aplicando el sabio principio de subsidiariedad, es decir, dejando al sector privado actividades que le insumen recursos al Estado, los que a su vez son imprescindibles en las áreas prioritarias que la sociedad demanda.

Desde aquí deseamos que tenga éxito, ya que de ello depende el futuro de todos los hombres y las mujeres del país, especialmente de los más necesitados.

Antes de escuchar vuestras propuestas, sepan que los apoyaremos con todas nuestras fuerzas, siempre en la senda del documento suscrito por todos nosotros en octubre de 2004.

Muchas gracias.

EC - Esta edición 2005 del Foro ACDE con el equipo económico es auspiciada por el Colegio de Contadores, Economistas y Administradores del Uruguay. Por eso, antes de pasar a las conferencias de nuestros invitados de esta mañana, les proponemos escuchar las palabras de bienvenida del presidente del colegio, contador Julio César Porteiro.

JULIO CÉSAR PORTEIRO:
Buenos días a todos. Me dirijo en particular a los amigos integrantes del equipo económico, a la enorme cantidad de amigos que están hoy colmando las instalaciones de esta sala.

El Colegio de Contadores siente una enorme satisfacción, un profundo orgullo, ante la posibilidad que le ha ofrecido ACDE de auspiciar este evento que es clave en el funcionamiento de toda nuestra economía y toda nuestra sociedad.

Yo podría hacer alguna breve digresión personal, si ustedes me lo permiten, porque mi vinculación con ACDE empezó en la década de los sesenta. Entonces en este momento en que estoy reconociendo la distinción de la invitación de ACDE, me vuelvo a acordar de las invitaciones que me hacía a principios de la década de los sesenta, cuando iniciando mis primeras experiencias docentes trabajábamos en los programas de formación gerencial en la casona de la avenida Uruguay. Son muchos los recuerdos, muchos los nombres que se agolpan en mi memoria, y quiero –sin mencionarlos, obviamente– hacer un homenaje especial a todos esos grandes hombres que forjaron lo que ACDE ha sido, es y seguirá siendo en la realidad uruguaya.

Mis palabras van a ser simplemente éstas, un agradecimiento muy grande a ACDE, una manifestación de la vocación de servicio del Colegio de Contadores, Economistas y Administradores del Uruguay, de su compromiso con la sociedad. Las profesiones que allí están representadas, economistas, administradores, contadores, todos tienen la obligación, el compromiso de responder públicamente por sus actos. Esa vocación de servicio público, de compromiso público, la confianza pública que deben merecer los estados financieros firmados por los contadores, hacen de nuestras profesiones un soporte insoslayable, se nos ocurre, para el buen funcionamiento de los mercados.

Desde ese punto de vista mi presencia aquí tiene un propósito de ratificar esa visión de la profesión, ese compromiso del actual Consejo Directivo del Colegio de Contadores, Economistas y Administradores. Es muy fácil anticipar desde ya la fecundidad de la reunión de esta mañana, quienes nos van a presentar las ideas del equipo económico de gobierno, la calidad y la jerarquía de quienes están llenando hoy esta sala, aseguran el éxito de esta jornada.

Termino expresando en nombre del Colegio de Contadores los mejores augurios de éxito a todos los integrantes del equipo económico, y repitiendo prácticamente la idea del presidente de ACDE: todos nosotros sabemos que del suceso en la gestión de quienes aquí nos están acompañando depende en buena medida la calidad de vida de la sociedad uruguaya.

Muchas gracias y suerte.